Fearless

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BNET

Ya había llegado el fin de semana acordado y tenía todo preparado para viajar hacia Alicante. El hecho de vivir algo lejos de Nuria no me gustaba porque no podía verla cuanto quisiera, pero mis padres me dijeron que podría venir a casa en algunas semanas así que estaría bien.

Estaba terminando de meter todo en la maleta. Mire mi móvil y vi un mensaje de Ginés diciendome que saldría de su casa para coger el coche, por lo que estaría aquí en menos de 10 minutos.

Esta semana había estado algo molesto con mis padres pero no quería darle más vueltas y en cuanto pudiera me terminaria por independizar con Nuria, ya habíamos hablado algo de esto antes. Suspire y salí pero no vi a nadie en la sala de casa, hasta que escuche unas voces en la cocina.

-Pero... Juan -dijo mi madre con voz apagada- no quiere ni escucharme -sabía que era por mi- no lo entendería, no entendería porqué lo hago.
- Es normal María... sabes como es -suspiro- dejalo que lo asimile, te aseguro que no estará tan mal. Cuando todo se tranquilice hablaremos con el.
- ¿Crees que Elsa estará tranquila alla donde esté? ¿Crees que estoy haciendo lo correcto? -dijo con la voz cortada-
- Claro que lo creo cariño, y ¿sabes que es lo que creo también? -dijo mi padre y mi apegue un poco más para escuchar- que Javi recordara y no se llevaran tan mal.

¿Recordar? ¿Recordar que?. No me gustaba ver a mi madre llorar, era una mujer fuerte y pocas veces la había visto así, pero es que no había estado esta semana soportable con nada ni con nadie, no sabía porqué.

Decidí salir de mi escondite con las maletas para despedirme. Mi madre se secó rápidamente las lágrimas y me dio una pequeña sonrisa que correspondí de manera tranquila.

- Ten cuidado ¿si? -sus brazos me envolvieron-
- Si mama -siempre me lo decía- te quiero -dejé un beso en su cabeza-
- Buen viaje hijo y dale recuerdos a Nuria -asentí y choque puños con mi padre-
- Despedir a Belén cuando venga de mi parte -abrí la puerta y baje-

Zasko estaba ya abajo y me monté rápidamente. El viaje sería rap, trap y charla con mi amigo así que no se me harían las 3 horas muy largas.

ARIA

- Y en primer lugar... el puesto es para - miró al grupo que había en el centro de la cancha- ¡¡ Aria !!

Sonreí emocionada y deje caer la pelota de baloncesto que tenía sobre mis manos al sentir a mis amigas abrazarme. Todos los años hacíamos un campeonato de baloncesto grupal y uno individual. Claro que había más deportes pero yo siempre había sido muy fan de todo lo que estaba relacionado con este deporte y sobre todo con la NBA. Solía quedarme con mi padre de madrugada a ver todos los partidos cuando era pequeña. Me consideraba fan en esto y me gustaba.

Subí al pequeño podio improvisado para recoger mi medalla, no había mucho dinero para dar trofeos pero tampoco era necesario. Se sentía bien por una vez hacer bien algo.

-Aria Aria Aria -gritaban mis amigas y me sonroje-
- Infantiles... -escuche decir a Rebeca, una chica que no nos caía muy bien-
- Infantil tu -dijo Laura con su ceño fruncido-
- Da igual chicas -dije bajando con una sonrisa y mi medalla colgada-

De repente se escuchó el sonido que indicaba que iban a hablar por megafonía: Comunicado oficial. Hay una familia que ha acelerado su cita y vendrá a visitar el centro el fin de semana, repito, este fin de semana una familia vendrá con motivo de acogida. Muchas gracias.

- Pues si que van a venir rápido -dijo mi amiga Paula y asentí-
- Poneros guapas -dije sin dejar de mirar la medalla, era feliz con poco-
- Ponte guapa tú, que también formas parte de esto -me contestó-
- Yo estoy bien aquí -dije algo nerviosa- estoy acostumbrada supongo...
- No podemos quedarnos aquí toda una vida -dijo Laura- mi madre me tiene aquí porque ella tenía problemas con la droga y estaba sola, pero cuando salga de la psicóloga y se ponga buena va a venir a por mí.

La alegría e inocencia con la que lo dijo me hizo quedarme callada y asentir. Mis padres no volverían, ni estaban en ninguna clínica. Ni siquiera mis tíos o abuelos habían tenido la cara de venir a verme.

-Pues yo solo tengo a mis abuelos -se encogió de hombros Paula, su madre murió también y a su padre nunca lo conoció- pero están muy mayores y yo era muy traviesa -dijo riendo- cuando vuelva los voy a cuidar con mi vida -sonreí interiormente-
- Estoy segura -dije mirándola con seguridad-

BNET

-Ya estamos aquí bro -dijo señalando la puerta del edificio donde vivía Nuria-
- Gracias hermano -dije dándole un abrazo rápido- ¿vamos hablando para la vuelta no?
- Claro, disfruta estos días -asentí y bajé del coche-

Subí las escaleras hacia el primer piso de mi chica y toque el timbre. Escuche unos pasos y después completo silencio. Siempre miraba por la mirilla hasta asegurarse de que era quien conocía y después miraba de nuevo. Una manía suya. Sentí como se abrió la puerta e inmediatamente su cuerpo rodearme haciendo que tirara mis maletas al suelo. Se sentía bien estar en casa.