Black List [Teen Wolf]

Epílogo

Epílogo

—Entonces... ¿Simplemente te irás? —deduje tras el discurso que Derek parecía estar contándome.

Él suspiró y asintió — Sí, me iré. —respondió con simpleza. Por suerte, estábamos apartados a un costado de La Iglesia y nadie nos veía. Mis amigos estaban reacomodando las cosas para volver a casa mientras Derek y yo charlábamos—. No volveré a Beacon Hills.

Asentí con lentitud, entendía esa parte del mensaje. Y sinceramente, no podía decir que estaba asombrada con la decisión. No era la primera vez que Derek partía de Beacon Hills. Y no puedo culparle, sé que el pueblo le trae memorias de su familia y que no es sencillo vivir ahí con tantos malos recuerdos.

—¿Esto es como la vez que fuiste a Sudamérica? —pregunté con los brazos cruzados, una postura defensiva que adquirí casi de forma inconsciente—. Me refiero a que no volverás ahora mismo a Beacon Hills pero ¿sí en un tiempo?

Derek tardó unos segundos pero finalmente negó con la cabeza lentamente, desviando levemente su mirada — Creo que mi tiempo en Beacon Hills terminó. —mencionó con cautela, como si intentara buscar las palabras adecuadas.

Su comentario me hizo fruncir el ceño — ¿A... A qué te refieres?

Se relamió los labios. Desvió su mirada hacia un costado. Podía notar que le costaba decir lo que quería expresar — Había vuelto por Laura y me quedé para resolver quién le había matado. Después de ser Alfa, permanecí por asuntos familiares. Porque era el pueblo de mi familia y sentía que debía quedarme ahí. —me explicó, asentí levemente pues recordaba que me había contado sobre el terreno Hale y sus tradiciones—. Pero luego de la conversación que logré tener con mi mamá, con sus garras, hace tanto tiempo ya... Me explicó que no debía quedarme, no tenía que hacerlo. Al menos, no por ellos. —alzó su rostro, conectando su mirada con la mía por unos momentos.

»Me quedé en Beacon Hills por ti, por todos ustedes. Porque me necesitaban. Y porque sabía que me necesitarían tras lo que hicieron con el Nemeton. Pero ahora... —giró su rostro hacia Scott, quien en la lejanía estaba hablando con Liam—. Scott tiene un Beta y recién, en la pelea contra Peter, la voluntad que tuvo para evitar transformarse en Berserker y no dejarse doblegar por mi tío... Eso demostró la clase de persona que es. La clase de Alfa que es. —indicó con un claro tono de orgullo. Se relamió los labios, mostrando una sonrisa triste—. Él ya no me necesita.

Debía admitir que lo que decía de Scott era una observación bonita, pero no podía dejar de pensar que toda la conversación, la dirección que tomaba era una que no me gustaba demasiado. Me mordí levemente mis labios, dudosa de decir lo siguiente, pero esforzarme por sacar las palabras a la luz — Yo te necesito.

Su rostro se giró hacia mí. Una sonrisa suave cursó sus labios — No, Sarah. Tampoco me necesitas. —detalló con decisión—. Te he visto luchar, te defiendes de una manera espectacular...

Bufé — Bueno, tal vez me desempeño bien en una pelea, pero no significa que no deje de necesitarte a mi lado. —contraataqué casi con violencia, sacando las palabras del fondo de mi ser—. Estás diciendo que quieres irte, y yo no seré quien te contenga, sabes que nunca lo he hecho. Pero...

Me vi obligada a desviar mi mirada, pus sentía mis ojos picar y no quería que él notase mis lágrimas. Apreté mis labios conteniendo mis emociones. Se pronunció un leve silencio entre ambos. Él se mantuvo callado, esperando a que yo soltara lo que necesitaba decir. Por esa razón, me costaba formular la pregunta, porque temía la respuesta.