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maratón 2/2

—¿Cuando hay que ir con tu mamá?.— preguntó Katia mientras se posicionaba boca abajo en la cama haciendo que las propias sábanas cubran su trasero y sus senos desnudos

—Pasado mañana.— respondió Gonzalo haciendo caricias en su espalda desnuda, habían hecho el amor minutos atrás— ¿que te vas a poner hoy?

—No lo sé— respondió riendo Katia—, algo sencillo, una pollera y un top algo así.

—Bueno.— dijo Gonzalo dándole un beso.

Hoy tenían una fiesta a la cual Mauro los había invitado, no era de él, era de alguien más que seguramente no conocían, pero a Mauro lo habían invitado y como tenía dos meses de no ver a la pareja los decidió invitar.

Aparte por que nuevamente era su día especial, hoy, cumplían cinco meses juntos.

—Te amo mucho.— le susurró Gonzalo y Katia sonrió enternecida abrazándolo

—Yo también.— le respondió de la misma manera dejándole varios besos en la cara

—Bésame hasta que no pueda hablar.— le pidió tierno, y Katia le acarició una mejilla; y lo besó de nuevo.

Después de más minutos de mimos decidieron bañarse juntos, a los veinte minutos ya estaban afuera, arreglándose. Katia al final si se había decidido por un top y una pollera, con botas de tacón no muy altas. Se había maquillado un poco, y como siempre, se había puesto su collar de Luna que le había obsequiado Gonzalo cuando cumplieron dos meses.

—Amor.— la llamó Gonzalo y ella fue hasta la habitación para ver que necesitaba— Vení

—¿Que pasó?.— se sentó en la cama mirándolo, mirando lo hermoso que estaba. Tenía una camisa negra (con un botón sin abrochar), olía muy masculino y tenía el pelo desordenado. De abajo los acompañan unos jeans oscuros y unas zapas igual oscuras.

—Felices cinco meses.— le dijo dándole una cajita de terciopelo

Katia miró la caja sonriendo, de lado a lado. La abrió y se encontró con un anillo, dorado. Tenía grabado una Luna y por dentro del círculo tenía una G igual grabada.

—Es hermoso, gracias.— agradeció feliz poniéndose el anillo, le quedaba muy bien.

—Yo también tengo uno.— dijo quitándoselo del dedo anular. Se lo mostró y era lo mismo, la Luna graba al centro por fuera, y por dentro tenía igual una letra grabada, solo que esta era una K.

Son preciosos, gracias, gracias.— le agradeció dándole un beso y un abrazo

—Siempre te voy a amar, ¿si?. Jamás lo olvides, nunca. Sos mi vida entera Katia.— le dijo, sincero con el corazón en la mano

—Jamás.— le prometió y lo abrazó más fuerte que antes

Estaba más que segura de que ella lo amaría siempre.

Después de estar demostrándose amor por unos minutos salieron de la casa para ir a la dirección que les había dado Mauro. Prometiendo que los recogería en la entrada junto con Antonella.

Cuando llegaron Mauro cumplió, estaba afuera con Antonella esperándolos; se saludaron y después entraron a la gran casa. Y al adentrarse cada vez más se encontraron algo que les quitaría las ganas de todo.

Katia por un lado miraba de lejos a Martin, el mismo Martin que le había hecho una escena y había golpeado a Gonzalo, haciéndola tragar saliva.

luna - bizarrap Donde viven las historias. Descúbrelo ahora