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-¿Qué?

Ambos miramos a la puerta donde se encontraba Valentina con lágrimas en los ojos, miré a Chris y él estaba duro como una piedra y más pálido de lo que suele ser.

Vaya forma de enterarse Valentina la verdad...

- ¿Qué mí mamá que? - ella tenía los ojos súper hinchados.

- Deja que te explique, chiquita.

Chris trato de acercarse a ella, pero ella lo esquivó.

- ¿Mí mamá no murió en el parto ? - preguntó dolida, Chris negó.

- No. - agarró la mano de Valen y se la llevó para que se siente.

- Esto era lo que quería impedir.

Valen se sentó en aquella silla, y Chris se arrodilló en el piso, agarrándole de la mano a punto de contarle lo de su mamá.

- Yo, - Christopher tomó aire. - me enamoré perdidamente de tu mamá. Ella, se prostituía, yo era su cliente. - Chris cerró los ojos pensando en lo que le diría. - Tiempo después, ella me contó que estaba embarazada, yo le rogué que te tuviera, te juro que lo hice, mí niña. - Chris derramó algunas lágrimas al igual que Valentina. - Tú madre no falleció cuando te tuvo, Valen. - el corrió su cabello detrás de su oreja. - Ella, - suspiró. - Se fue cuando naciste, luego, no la volví a ver durante estos 18 años.

-¿Por qué me ocultaste durante estos años? Durante todo este tiempo creí que mi mamá en algún momento me esperaba. No festejé mi cumpleaños durante 18 años pensando que mi mamá había fallecido porque yo nací. - ella se levantó.

- Lo siento, cariño. Creí que iba a ser lo mejor para ti y para mí, nunca pensé en las consecuencias que iba a traer esto.

- Todo iba a ser mejor si me hubieras dicho la verdad desde un principio.

Valen salió corriendo si decir ninguna palabra más.

-¡Esto era lo que quería impedir! - dijo en un grito. - ¿Te das cuenta lo que provocaste?

-¿Me estás hablando en serio? - reí irónica. -¡Por dios, Christopher! Por lo menos te sacaste un peso de encima, y ya podrás dormir mejor sin pensar en como le estuviste mintiendo toda la vida a tu hija. - me dirigí hacía la puerta. - No me heches la culpa de tus propio errores, Vélez.

Cerré la puerta con un golpe fuerte y me fui detrás de ella.

-¿Tú lo sabías? - me preguntó al verme llegar.

- Si, - me senté con ella. - Pero este era un tema delicado para que alguien como yo te lo cuente, yo me enteré hace poco.

- Que vergüenza. - se pasó sus manos por su rostro. - Yo soy la combinación de una prostituta y de un mentiroso. - me miró con sus ojos llenos de lágrimas. - Todo hubiese sido mejor si la prostituta de mí madre me hubiera abortado.

- No. - la abracé. Ella se recostó en mis piernas. - No digas eso, Valen.

- Jamás serás la combinación de ellos, tú eres alguien mucho mejor. - yo acariciaba su cabello. - ¿Sabes? Tienes que estar muy orgullosa de Christopher, salvo por la mentira que te dijo toda tu vida. - sonreí. - Pero él te ama, Valen. Y siempre te espero, te cuido como pudo, sin ayuda de nadie. No sabía cómo era ser padre, pero tras los años, él se convirtió en tu padre y tu madre, cumplió los dos roles. No estés mal con él, él solo, te quiso proteger, no sabía lo que iba a causar esta mentira. Gracias a él, eres lo que eres.

Valen me miró y me sonrió.

La acaricié hasta que ella se quedó totalmente dormida.

Me levanté con cuidado sin que ella se despertara, necesitaba descansar, y más ahora que se enteró de la verdad.

Al salir, me encuentro con Chris, sentado en el piso apoyando en sus rodillas con la cabeza mirando al piso.

- Perdóname. - dijo sin mirarme. - Tienes mucha razón. - me senté a su lado. - Jamás serás la culpable de nada, yo tengo toda la culpa, y si, tienes razón. Todo hubiese sido mejor si le decís la verdad desde un principio.

- Valen está destrozada. - apoyé mí cabeza en su hombro. - pero por lo menos ya sabe la verdad.

- Si, no sé. - mojó sus labios. - Gracias por estar aquí, y por no irte a pesar de todo lo que te hice pasar, nunca quise tratarte mal, y mucho menos culparte por lo que me pasa. - Levanté la mirada chocando con sus ojos color miel que tanto me gustaban. - No soy perfecto, tengo mis defectos como todo el mundo. - acarició mí mejilla, cerré los ojos sintiendo su tacto en mí piel. - Pero te amo, Amber, y te quiero en mí vida siempre.

- También te amo, Chris. - mordí mí labio inferior. - jamás me iré de tu vida.

Nos acercamos para darnos ese beso que tanto necesitábamos, tanto él, como yo.

Amor imposible (CV y Tú) Semi-hot. {TERMINADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora