Hijo de Luna "KookMin"

ÚNICO EXTRA

Año 2040 - Seúl - Corea

Jungkook se encontraba sentado en uno de los palcos de aquel lujoso y elegante teatro, sólo grandes personalidades podían tener la dicha de pagar por un sitio tan privilegiado.

Esa noche era especial, después de 5 largos años de ausencia el mejor bailarín de todo Corea haría una presentación de retorno a los más aclamados y prestigiosos escenarios, según los rumores que circulaban el muchacho poseía una belleza que pondría celosa a la mismísima diosa griega afrodita, cabellos cenizos que danzaban ante la más suave briza, piel tan blanca como el lomo de un armiño, ojos grises tan brillantes como diamantes, una boca roja cual manzana madura que te incitaban a pecar, un cuerpo esbelto y fino que te seducía con el vaivén de sus caderas y coronando sus atributos, el omega poseía una fragancia a jazmín tan dulce y embriagante que llegaba a enloquecer a muchos alfas.

La prensa amarillista afirmaba que el omega había tenido a los más adinerados y poderoso alfas rogándole para emparejarse, ninguno había podido captar la atención de tan sublime ser.

Los aplausos y voz del maestro de ceremonias captaron la atención de Jeon, por fin se daba inicio al programa, los primeros bailarines hicieron acto de aparición para ejecutar su rutina, los ojos de Jungkook se posaron en la descripción del acto principal, el omega presentaría una danza lirica contemporánea de interpretación propia, acompañado de una orquesta y el prodigioso pianista ChiHo Han que tocarían una canción antigua y ya casi olvidada "Hijo de la luna"

Jungkook se acomodó en su butaca mientras levantaba su copa de Macallan 1926, el trago paso por su garganta dejando un ardor seco con sabor concentrado a regaliz, su mano izquierda fue a parar al colgante de plata y oro blanco con forma de media luna, con un lobo aullando decorando con una gran piedra de luna blancas, acariciaba la pieza con parsimonia.

A estas alturas él debía estar en Alemania a cargo de una de las mejores clínicas, Jeon era el mejor y más cualificado cirujano de toda Corea, el plan que tenía era extender su clínica a una sucursal en el extranjero abriéndose camino para poder comenzar con una cadena de clínicas en el nuevo continente, todo se vio frustrado por un incidente que cambio su vida entera.

El acto central estaba por dar inicio, todo el lugar quedo en completo silencio, todos expectantes y anhelantes de ver al agraciado omega.

– Para finalizar nuestro programa, me honra presentar al aclamado bailarín Park Jimin y su interpretación de "Hijo de la luna" – el telón se elevó para dar paso a la más sublime imagen de un mismísimo ángel, el omega vestía una camisola blanca de seda con bordados dorados en el pecho, cuello y mangas, un fino pantalón de gasa que se ajustaba perfectamente a su estrecha cintura, en su cabeza descansaba una diadema de oro adornada con plumas de cisne a los costados y un delicado tejido de perlas le daban el toque final a tan fina pieza de joyería, sobre su hombro derecho reposaba un manto blanco, las luces sólo enfocaron al bailarín, las primeras notas de piano dieron inicio a la presentación.

El omega parecía flotar en medio del escenario, sus movimientos eran agiles y muy elegantes, todo su cuerpo se movía al compás de la música cual flor que danzaba con la briza del viento de otoño, el lobo de Jungkook aulló con anhelo y melancolía, se podía sentir el desbordante deseo que sentía por aquel muchacho, a la mente de Jungkook vinieron algunas imágenes rápidas del mismo muchacho en diferentes lugares, sin darse cuenta de sus ojos caían gruesas lágrimas que llegaban a impactar en su costoso traje gris, su mano derecha palpo su mejilla empapada, esas no eran solo sus lágrimas sino también las de su lobo.

Cuando la música de detuvo un abrumador sonido de palmas inundo el ambiente, las personas aclamaban en alto el nombre del omega, Jimin le regalo una hermosa sonrisa a todo su público, su mirada se desvió disimuladamente al alfa de cabello azabache que no había quitado su mirada de encima suyo en toda la presentación.