MCs ➳ Jimsu

22

Nam no estaba en su casa. Taehyung pasó las dos últimas horas conduciendo más arriba del límite de velocidad y no había nadie en el hogar.

Se estaba dirigiendo al territorio de Jin con mucha preocupación, se supone que ellos ya tuvieron su cita, pero Namie no le había contado nada acerca de cómo le había ido, ni si funcionó, porque para comenzar no respondía sus mensajes, ni llamadas. Tampoco Jin le respondía las actuales, aunque de él no era una sorpresa, casi nunca atendía el teléfono y cuando lo hacía era de mala gana. Reclamándole de que era una molestia.

Lo típico.

Llegó y al tocar, nadie le abrió. Siguió tocando con más empeño, hasta que se dio cuenta de la existencia del timbre. Con un poco de vergüenza por su falta de atención, lo presionó.

Nada de nada.

Volvió a enojarse y mantuvo su dedo índice presionado hasta que por fin apareció Seokjin con su cara roja de furia.

—¿Qué? —Ladró molesto.

Taehyung le iba a responder con el mismo tonito hasta que cayó en cuenta de los rasguños frescos que se veían desde los hombros de Jin y que, este, solo tenía puesto unos pantalones sueltos. Claramente se había apareado recientemente con alguien.

—¡TRAIDOR! —vociferó con rabia comenzando a golpearlo—. ¡Se supone que te gustaba mi hermano y te cogiste a cualquiera! ¡Jugaste con sus sentimientos! ¡SABÍA QUE ERAS UN DESGRACIADO, PERO NO PENSÉ QUE TANTO!

El de cabellos platinos era consciente que su hermano no era una persona que se dejaba llevar, ni por sus instintos. Era un omega muy tranquilo, pacífico y siempre calculaba cuidadosamente el siguiente movimiento.

Era alguien sensato.

—Adivina quién está en mi cama —respondió con burla el alfa mayor.

Taehyung casi se desmaya al escuchar eso ¡Era imposible! Su Namie no era ese tipo de omega, siempre pensaba con la cabeza fría y...

—Jin hyung, ¿Qué es todo este alboroto? —preguntó el omega de piel canela, mientras se sobaba su ojo derecho, parecía que recién se levantaba porque sus cabellos cafés estaban despeinados.

—Nada, solo el histérico de tu hermano —comentó tranquilo—. Espero que lo que seas que hagas aquí sea importante —advirtió serio—, estábamos pasando un buen tiempo si sabes a lo que me refiero.

Taehyung quería gruñirle como nunca le había gruñido a alguien ¿Cómo podía ser tan descarado para decirle tales cosas estando su hermano presente?

—Namie~ —lloriqueó haciendo un puchero—. Jimin y Yoongi pueden morirse, el malvado de mi omega con su jefe, planean hacer que Jimin muerda a otra omega en su próximo celo que está a la vuelta de la esquina. Tengo el celular de Jungkook, sé la contraseña. ¿Qué hago?

Esa información fue suficiente para quitarle el sueño al omega de piel canela. Sonaba grave.

—Con lo que pasó, lo mejor es hacer que Yoongi vaya lo más rápido posible donde su alfa, como es su pareja predestinada, el celo va a llegar al instante... hazte pasar por mi cuñado y mándale un mensaje a su superior, escríbele que ya conseguiste un omega, que no se preocupe, te harás cargo de todo.

—Ay, mi hermoso omega es un genio —El alfa mayor lo abrazó por la espalda a un muy sonrojado Namjoon—, nuestros cachorros serán tan lindos e inteligentes ¡Seremos la envidia de la generación!

Taehyung comenzó a gruñir.

—¡No va a haber ningún cachorro! ¡No sobre mi cadáver!

—¿Ah sí? —cuestionó con superioridad—. Chequea esto —Bajó la camisa del único omega de la habitación revelando un marca fresca.

—P-pe-pero ¡NAM! —gritó frustrado con los ojos llorosos ¿Cómo era eso posible?—. Tú, no...

—Resulta que Jin es mi pareja predestinada y... —jugó con sus dedos—, solo pasó.

—Si sigues así de insoportable e incomodando a mi omega, no te invitaré al bautizo de nuestro primer cachorro —amenazó.

—Pues no creo que mi hermano sea tan tonto como para no cuidarse —Le enseñó la lengua.

—Bueno... —Bajó la cabeza, con una sonrisita tímida queriendo salir—. U-un cachorro o cachorra correteando por nuestro hogar no suena tan mal. D-de hecho, me parece muy lindo —dijo con su carita sonrojada.

—¡¿Nuestro?! —preguntó Taehyung con sorpresa.

—Ah, no te lo dije, Nam bubu vive conmigo desde hace una semana —Se acomodó el mechón de su cabello negro—. ¿Qué te puedo decir? No pierdo el tiempo y tengo mis encantos.

—Nunca te voy a perdonar este golpe tan bajo Jin, se supone que eras mi amigo, confidente y hermano del alma.

—Mejor deja de lloriquear y haz lo que te mandó mi omega que una marca no aparece sola —Se estiró ocasionando que sus huesos truenen—. Todo yo, espero que de aquí al futuro, me dejen en paz, ya que me he tomado unas vacaciones de un año.

—¿Vacaciones?

—Duh, no creas que te mentí con eso de darte sobrinos, Nam nunca salió del país, por eso aprovechando la situación, vamos a hacer un viaje por el mundo. Yo ya terminé mis grabaciones de mi serie y álbum, eso será más que suficiente para que mis esclavas estén tranquilas por mi larga inactividad —comentó mientras se ponía su saco encima, revisando que tener lo necesario para salir—, nuestra parada final será Taiwán.

—¿Por qué Taiwán?

—Nam quiere aprender de su cultura y la última vez que estuve allí, su gente me trató muy bien —Se encogió de hombros—. Volveremos antes del nacimiento del cachorro.

—Si sigues mencionando la palabra cachorro una vez más, te voy a golpear.

—Que sensible, ahora vamos con Yoongi que no tengo todo el día —Lo empujó fuera de su casa—. ¡Muévete! ¿Qué esperas?