Capitulo 17

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Enmascarado

-Y... ¿Aceptaste?- pregunto Max comiendo del otro lado de la mesa de cristal. Después de aquella propuesta el príncipe y Jin se habían marchado.

-¿Qué crees?- levanto la mirada de su pasta- Claro que lo hice, estaba pensando en que tipo de dulce debo hacer- dijo dejando cubierto de un lado y mirando el techo pensativa.

-Mm ya- dejo los cubiertos de lado- ¿Qué piensas del principito?

-¿Qué?

-No te hagas- la señalo con una sonrisa de lado- vi cómo te miraba el chico, parecías su más preciado objeto.

-Lastima- se encogió de hombros, levanto su plato y camino hasta su fregadero- No soy un objeto.

-Tus chistes son pésimos ¿sabías?- se puso a su lado secando lo que ensuciaron- ¿Qué harás mañana? Tengo que ir en la tarde a buscar unos pedidos del banco y no podre pasarte a buscar.

-Mm iba ver los pedidos para las donaciones, tranquilo te llamare cuando llegue a casa ¿sí?

-¿Estarás bien sin mí?

-No es la primera vez que me vengo a casa sola tonto- lo empujo divertidamente y este le regalo una sonrisa- descansa bombón nos vemos mañana.

-Buenas noches pastelito- le dio un beso en la frente y camino hasta su habitación.

La confianza era muy fuerte entre ellos desde que se conocieron hace diez años y más cuando se mudaron a Corea y Vivian juntos desde hace seis. Se llamaban así desde que ella hizo su primer bombón y se lo obsequio y a él le encanto y el la llamaba pastelito desde que el arruino un lindo desayuno por no saber prepararlo hace años, desde ese entonces ellos son más unidos.

...

Al día siguiente Lili salía del depósito donde estaban los ingredientes que encargo para preparar los dulces de las donaciones.

Iba caminando tranquila con sus audífonos a todo volumen, paró en seco cuando vio un suéter negro en una vitrina y eso le recordó "Mochi", no lo había visto y muchos menos dejado un presente, saco su celular y vio la hora aún tenía tiempo antes de que Max llegara a casa. Camino rápidamente hasta el bosque y se metió por el sendero, había personas haciendo ejercicio y otras hablando tranquilamente pero algo llamo su atención, un carrito de helados que tenía globos de colores. Se acercó y le pregunto al señor si se los podía vender, este con gusto asintió dándole un par de globos de colores, camino alegre hasta una pequeña casilla de madera y compro un hermoso girasol. Al caminar se percató de que no había traído un Bloc de notas y bolígrafo. Pero la idea se le fue cuando llegando su mirada se conectó con la otra, él estaba como siempre, vestido de negro y cubriendo su cara, en sus manos llevaba un lindo peluche blanco. Ella se sonrojo y se acercó a él regalándole una pequeña sonrisa.

-¿Cómo estás?- lo miro, estaba como siempre mirándola atentamente en silencio y con ese brillo hermoso de sus ojos.

-Bien- respondió tartamudeando- ¿tu?

-Bien, tenía tiempo que no te veía, así que ahora mejor- dijo risueña, si definitivamente su estómago tenía una lucha interna. ¿Estaría loca por gustarme alguien de quien solo conozco su voz y ojos?- Tenía mucho que contarte, no te había traído algo, lo siento.

-No, no- negó frenéticamente- no es necesario- extendió sus manos sin mirarla entregándole el peluche blanco- se llama momo, le puse nombre- ella lo miro tiernamente. ¿en serio este no es un niño?

-Gracias Mochi- ella lo tomo, le extendió la flor y los globos y ahora bajaba la mirada sonrojada- No es mucho pero espero te gusten, no sabía si te gustaban los globos, sé que es tonto pero...

Iba seguir hablando pero él no la dejo

-No- ella lo miro sus ojos estaban más brillantes- Gracias de verdad muchas gracias.- Los tomo como niño pequeño, al igual que la flor. Ella observo como el miraba aquellos globos y sus colores como si estuviera en una galaxia lejana por eso.

-Mochi...- el la miro- ella quito la cinta de su vestido blanco y lo vio alarmado-Tranquilo sí, no hare nada malo- se colocó la cinta en sus ojos y camino hasta estar cerca de el- ¿Puedo hacer algo? Por eso me puse esto, para no incomodarte.

-si- dijo tímido, ella acerco sus mano hasta su rostro, quitando el tapabocas, sintió como la respiración de él se agito, ella toco sus labios carnosos, su pequeña nariz, sus cachetes, su rostro completo y el solo respiraba más rápido cada vez, hasta que...

Lo beso

....

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The Golden Prince©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora