Un día un ser que controla la realidad decidió que era buena idea llevar a un grupo de amigos a otra dimensión para mantenerlo entretenido.
Ahora la historia esta a punto de ser cambiada y nada volverá a ser como antes, se formaran alianzas, imperio...
Para cuándo terminaron las negociaciones la noche había caído sobre la ciudad capital, muchos de los soldados de Terranova estaban ocupados en recoger su equipo y prepararse para volver al nuevo territorio adquirido por su nación.
En las afueras de Sadera había una gran celebración por el fin de la guerra, los soldados de Terranova bailaban y cantaban en diferentes idiomas para expresar lo felices que se sentían tras haber terminado la guerra, pero no todos celebraban el éxito de Terranova en la guerra contra el imperio.
En en interior de la capital había muchos problemas entre los nobles que deseaban seguir la guerra y la facción a favor de la paz, las peleas y luchas estaban amenazando con iniciar una guerra civil en el imperio y destruir lo que quedaba del país, pero el emperador se impuso recordándoles que habían perdido gran parte de su ejército profesional y deberían esperar al menos tres años para recuperar parte de su ejército perdido.
Entre los nobles que estaban a favor de la paz era Lord Cicero La Moltose, el viejo senador había visto el poder del armamento de Terranova, le había impresionado mucho al ver cómo con sus armas podía derrotar a ejércitos varias veces más grandes en cuestión de minuto a una gran distancia, pero lo que más le sorprendió fue la movilidad y velocidad de su ejército en los diferentes vehículos que tenían a su disposición.
Pero había muchos nobles y senadores que estaban furiosos si haber perdido la guerra contra el ejército de Terranova, ellos habían organizado varios amotinamientos contra los invasores de sus tierras, pero los resultados siempre fueron iguales, todos los rebeldes eran acribillados o capturados.
Había orquestado varios planes para atacar a los soldados de la nueva nación e incluso al nuevo emperador, pero finalmente el emperador Molt los hizo detener las agresiones amenazando con ejecutarlos si seguían gastando inútilmente los recursos del Imperio.
Pero todas las celebraciones y eventos de luto en el imperio se detuvieron cuando cierto joven de cabello negro estaba en una montaña viéndolos hacía abajo, ese era Zero, quería probar a sus creaciones y saber cuáles eran sus límites actuales.
Zero: supongo que abrir un pequeño portal servirá por ahora -Dijo mientras se formaba una esfera negra que parecía hecha de petróleo en su mano-
Miro a lo lejos y la arrojó como su fuera una bola de béisbol, la esfera negra finalmente aterrizó en un bosque que se encontraba a 50 kilómetros de la capital del Imperio, aquella mancha negra se esparció por la tierra contaminando todo en un radio de 500 metros.
Aquella charca negra no estaba cerca de ninguna aldea por lo que nadie pudo ver cómo salía el primer ser de aquél agujero infernal, se trataba de un ser retorcido de piel completamente negra, median aproximadamente 1.80 metros en promedio, sus extremidades eran largas, sus brazos no mostraban muchos músculos pero al final de sus largos dedos había garras muy afiladas, su cabeza parecía la de un murciélago y producía un chillido agudo.
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