Y El Cielo Cayó Cuando Te Sentaste A Mi Lado.

32. Te lo prometo

*Narra Jess*

Tres días, ya van tres días y no se nada de James. Hoy es Jueves, tenemos dos clases juntos y espero que hoy sea el día en el que no me evite...

- ¿Vas a intentar hablar con él?- me pregunta Marta.

- Ni siquiera me mira, tres jodidos días y ni una mirada. Pasa por mi lado en clase y nada...

- Intentalo Jess, es tu novio y no podeis terminar por una gilipollez.- me aconseja Jimena.

- ¿Soy su novia? No lo sé.- suspiro.- Bueno, voy a ver que me espera. Nos vemos luego.

Mientras voy de camino a mi clase, me suena el teléfono. Gonzalo. Este tio es tonto, lleva llamándome desde el lunes...

- ¿Que quieres?

- ¡Por fin!- grita al otro lado.- ¿Podemos hablar?

- No, no podemos.

- Jess, quiero pedirte disculpas.- ¿En serio?- No debí haberte besado sin tu permiso...

- Oh ¿De verdad?- Notese mi sarcasmo.

- Vamos J... No te enfades, solo quería que te dieras cuenta de lo que sentimos.

Ya me extrañaba la disculpa... Idiota.

- Primero: No me vuelvas a llamar "J" y segundo: ¡Que no siento nada por ti! ¡Tengo novio! ¡Metetelo en la puñetera cabeza!

- Como quieras, ya te darás cuenta...

- Gilipollas.- y colgué.

No me di cuenta de la situación hasta que vi a todo el mundo mirandome, habia estado gritándole al teléfono delante de toda la universidad y cuando miré a mi derecha... Delante de James.

- Em...Yo...- no tenia ni idea de que decir.

- Tenemos que hablar.- ¡Si!

- Eh... Si, si, claro ¿Vamos?

- Tenemos clase, ¿te parece si quedamos para comer?

- Si, supongo...- estoy mega, hiper nerviosa.

- Vale, bueno, nos vemos en inglés...

James se fue, tenia dos horas para prepararme lo que le iba a decir asi que, adiós concentración en Geografia e inglés.

***

- Hasta mañana chicos.- nos despidió el profe John.

Es la hora. ¡Los nervios me están comiendo! He estado pensando que decirle, hasta escribí un discurso pero la verdad, era una mierda. Lo bueno es que se que no he hecho nada malo asi que solo le explicaré lo que pasó y ya está.

- Jess...- la voz de James me saco de mi.- ¿Vamos?

- ¡Oh! ¡Si!- ¿Estaba chillando?- es decir... Vamos.

Por dios, parece que es la primera vez que hablo con él. No me dí cuenta de donde estábamos hasta que paramos en su portal. Cuando entramos en el, habló.

- ¿Por qué te besaste con Gonzalo?- Ouch, que directo.

- Yo no me besé con él, él me besó a mi. Intenté separarme pero me sujetaba muy fuerte, cuando conseguí...

Le conté todo, desde el momento en que me dejó en casa hasta cuando le cerré la puerta en las narices al imbécil del Gonzalo. También le conté que me ha estado llamando desde entonces y lo que me dijo en la conversación que él escuchó.

Solo hablaba yo, él caminaba de un lado a otro del salón. Hasta que de acercó a mi.

- El me dijo que os besasteis y que estuvo genial... Promete que no me estás mintiendo...- me pide.

- James... Te lo prometo.

Él me miraba, no sabía de que forma pero lo hacia. Tenia miedo de que no me creyera, yo no lo hacía hasta el mensaje de Ana... En cambio él tenia la versión de Gonzalo.

- Dime algo, por dios.- seguia callado.- James no aguanto este sil.- me interrumpió con un beso.

¡Me esta besando! ¡James me está besando! ¡Por dios! Lo adoro... Cuando deja de besarme, me abraza.

- No te acerques a el otra vez, por favor.

- Está bien, no lo haré.- le aseguro.

Intenta decir algo mas pero ahora soy yo la que le interrumpe besándole. Creo que este beso es el mejor que me ha dado hasta ahora, quizá por el miedo que tenia a que me dejara o simplemente las ganas que tenía de besarlo.

El beso pasa del amor y romanticismo al mas puro deseo... James me quita la camiseta y marca un camino de besos desde mi boca a mi cuello, ¡Joder! Yo hago lo mismo y le saco su camiseta, no me dí cuenta de como ni de cuando pero estába tirada en el suelo con James encima de mi.

- Jess...- decia sobre mi cuello.

- Cállate J.

***