Inestable

50. "Siempre me entiendes"

Rapunzel POV

Estaba dolida...

Por supuesto que el rechazo de Elsa me hacía sentir muy herida pero en el fondo sabía que ella tenía toda la razón. Yo me dejé enredar por Jack una vez y me falló. No es posible que aún con lo que le hizo a Elsa yo siga pensando que vale la pena.

Me quedé estática en el mismo lugar donde había hablado con Elsa...

¿Y si sospechas eran ciertas y ella estaba embarazada?, ¿qué se supone que debía hacer entonces? ¿Volver a alejarme? Ella es mi mejor amiga y aunque ella ya no confíe en mi o no me quiera ver ahí estaré para ella. No importa qué. Fui a mis clases pero la incertidumbre me estaba matando necesitaba saber si Elsa estaba esperando un bebé de Jack.

Cuando finalmente tuvimos un receso me di cuenta de que Mérida no me estaba esperando y de que ni Elsa ni Jack estaban cerca. Me extrañe porque nadie me deja sola, quiero decir que normalmente estoy acompañada de mis amigos. Divisé a Merida con una chica castaña que asumí era Lila, la chica de intercambio del salón de Elsa. Me acerqué con una sonrisa para poder platicar y distraerme.

-¡Hola Mer!-Le dije sonriendo y note que inmediatamente su rostro cambió.-Debiste haberme esperado para almorzar juntas.

-Lila... ¿Será que me puedas esperar en la mesa? Voy en un momento.-Dijo mi amiga con el rostro serio, Lila simplemente se fue cuando Mérida terminó de hablar.-Punzie... Yo creo que debemos tomarnos un tiempo.

-¿De qué hablas?

-Mira yo no soy estúpida, sé que tienes algo con Jack y mira por mucho que lo adore como mi hermano. Él jamás será la mitad de amigo que ha sido Elsa conmigo, tuviste que escoger y en cierto modo lo elegiste a él.

-Las cosas no fueron así Mer... Tu lo sabes.-Le dije con la voz rota.-Estábamos enamorados hasta que Elsa llegó.

-Entonces Jack no te amaba como decía... Y te lo dije muchas veces, no debiste hacerte tan amiga de ella si lo que en verdad querías era a su novio. Elsa te demostró que era una amiga sincera y aún así la traicionaste.

-No lo veas de esa forma...

-No tengo otra forma de verlo Rapunzel y es por eso que te pido que te alejes de mi un tiempo, yo no quiero ser participe de tu telenovela.

Con esas simples palabras Mérida hizo que de mis ojos comenzarán a bajar las lágrimas más tristes que había derramado. No sólo perdí a una amiga sino que también a la que siempre estuvo ahí para mí, mi chica de clase, en cuestión de segundos había perdido a tanta gente que solo me quebré.

Ahogaba mis pequeños lamentos con la mano y me dirigí a una mesa más privada para poder lamentarme con más privacidad, al llegar y sentarme noté que había un grupo de chicos riéndose alegremente y no pude evitar recordar lo que tenía unos meses atrás...

Jack y Elsa sentados abrazados y con una gran sonrisa de alegría, Mérida y yo riéndonos de la manera tan empalagosa en que se veían junto con Anna y Kristoff. En mis pensamientos ese era un cuadro hermoso lleno de felicidad, todos juntos alegres como los chicos de aquella mesa. Ahora estoy yo aquí, completamente sola hundiendome en mis recuerdos.

¿Cómo podía superar eso?

Luka piensa lo peor de mí y lo más probable es que jamás vuelva a querer cruzar palabras conmigo pero eso era en parte lo que me había ganado. La familia que había construido con mis amigos se había desmoronado y no solo por un error mío. ¡Eso es! Jack debe entender que por nuestra culpa perdimos a las mejores personas que podíamos conocer.

Caminé hacia su aula limpiandome en el camino las lágrimas de los ojos, tenía la cabeza alta y cuando me lo topé cara a cara me di cuenta de que él y Elsa estaban hablando, a lo mejor ella si está embarazada y es de lo que están hablando. Yo solo veía los movimientos de Jack y se veía muy molesto. Esperaba que lo que sea que estén discutiendo este resultando bien.

Decidí darles su espacio y volver a mi clase. Cuando todo acabó me fui directo a mi casa, ya no tenía caso quedarme porque ninguno de mis amigos quería saber de mi.

Tenía algunos mensajes de personas que la verdad prefería ignorar. En momentos como este cuando estaba sola acostada en mi cama, solía escribirle o llamarle a Elsa para estar platicando durante horas y reírnos con nuestras infinitas historias pero ella ya no estaba más... Y eso me ponía muy mal, abrí mi celular y vi que su foto de perfil había desaparecido al igual que su estado. Me había bloqueado.

Después de todo así terminamos, quizás ahora junto a Jack están a punto de empezar otra etapa en sus vidas si es que ella esta embarazada pero ahora ni siquiera sé cómo preguntarle porque entiendo que no quiere volver a saber de mi. Agarré mis cosas y me decidí a manejar a su casa. Teníamos que hablar.

Al llegar frente a la mansión de Elsa, me sentí como la primera vez que vine solo que en aquel momento fue la misma Elsa quien me hizo sentir como en casa. Toqué a su puerta una... Dos... Tres veces y nadie me abrió por lo que decidí sentarme en su porche y esperar a que llegara. Tardé por lo menos 2 horas sentada esperándola hasta que por fin llegó.

-¿Qué haces aquí? ¿No fui lo suficientemente clara en el instituto?-Me dijo levantando una ceja.

-Elsa... Lo lamento muchísimo, lo único que quiero es que me perdones porque créeme que eres más importante para mí tú que él. Debí haberte dado tu lugar como mi amiga, como mi mejor amiga pero me ganó un poco el resentimiento que te tenía.

-Rapunzel... Yo no quiero tus discursos baratos, por favor déjame en paz. Quiero entrar a mi casa.

-Si no quieres volver a verme lo entenderé perfectamente pero en el fondo sabes que nuestra amistad es real que siempre hemos sido amigas.-Le dije con lágrimas en los ojos.-Siempre te voy a querer.

Vi en los ojos de Elsa el dolor que le estaba causando rechazarme pero sé que la herí de un modo del que a lo mejor jamás logre recuperarse del todo. Yo quería que ella creyera en mi y que supiera que jamás fingí nada.

-Dame permiso quiero entrar.-Me dijo para después cerrarme la puerta.

CONTINUARÁ...