XLVI. Entrenamiento extra.

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Nick se había ido hacía un rato de mi habitación y después volvió sujetando entre sus pálidas manos una humeante taza de té caliente, vaya obsesión.

-La tonta mayor se fue llorando de la casa seguida de Arthur y papá. Ahora esta encerrada en su habitación muy molesta porque quiso hacer que Harry saliera con ella al centro comercial y él no quiso. - Rió. -Al parecer él le dijo que estaba aquí para ver el partido de los empacadores, no para salir con ella.

Le miré sorprendida por la grosería que había hecho Harry mientras él mantenía su sonrisa burlona.

-Te hace feliz verla molesta, ¿ah? - Sonreí también.

-Sí, no tienes idea.

Más tarde, mi padre entró a mi habitación con una cara de felicidad extrema, lo que me pareció muy raro.

-Hija, el partido va a comenzar, toma tu camisa, ponte el sombrero de queso y ¡Vamos empacadores!

Le miré curiosamente, siempre había hecho que mirara los partidos de fútbol americano en los que los Packers o Empacadores de Green Bay se enfrentaban con cualquier otro equipo, sin embargo, antes era muy aburrido, ya que nunca logré entender el deporte en sí y por eso era un martirio que jugara tal equipo, pero ahora sería diferente. Hice lo que me pidió, haciendo que Nick se volteara al momento de cambiarme la camisa. Me puse el sombrero de queso que tenía Chaz desde hace un tiempo y me dispuse a bajar las escaleras seguida de un callado Nicholas.

Inmediatamente divisé a mis amigos vestidos con camisas del equipo y gritando embelesados con el televisor.

-Únete, preciosa. - Musitó alguien a mis espaldas. Di un salto minúsculo debido al susto y lo encaré con una expresión sarcástica.

-Gracias por el infarto. - Mencioné el susto que recién me había dado.

Rió en un intento de lucir inocente, aunque ambos sabíamos que con esa camisa verde de los empacadores y ese despeinado cabello en conjunto con esa mirada tan profunda, era todo un arma letal.

-Te ves muy linda con ese uniforme. - Alagó. Sonreí más por cortesía que por otra cosa y me giré para caminar en dirección a los demás. - ¡Espera! Preciosa... ¿Podemos hablar?

¿Y ahora?

-¿Sobre qué? - Le miré desafiante.

-Es sobre el equipo. - Sugirió con severidad.- Necesito que sea en privado.

[Harry]

Justo después de que mandé a Emma a llorar a otra parte, el entrenador Driver y padre de Hayley se acercó a mí y me solicitó que hablásemos en privado, y por supuesto que accedí.

-Harry, hijo, he estado pensando mucho en un asunto que me tiene como un loco, y tú eres el único que puede ayudarme. - Me miró seriamente y esperé a que continuara. - Louis es el novio de Hayley pero... Hay algo en eso que no cuadra, ¿sabes? Lo vi el otro día dándose un beso con una chica de la escuela. - Fruncí el ceño. Louis es un imbécil. - Y ella no parece gustar de él... - Sonreí inconscientemente y cuando el entrenador se volteó para mirarme, borré mi sonrisa de mi cara, a sabiendas de que él me había visto de todos modos.

-Bueno, sí, pero ¿en qué puedo ayudar? - Pregunté.

Ni idea de qué podría yo hacer para apoyar al entrenador en un caso como ese.

-Quiero que me ayudes a separarlos... Quiero que la alejes de Louis. Enamórala, y después, cuando ella esté comiendo de la palma de tu mano, la convences de que su relación con Louis es un error.

Touchdown to your Heart. [H.S. Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora