Jerome, Jerome, Jerome. -suspiro- ese muchacho que me trae loca lleva 3 semanas en Arkham y aún no encuentro valor para visitarlo.
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Seguía pensando en el.
-¡Ana!.-grito Mendoza-. ¡¿Donde tienes la cabeza?! Te he preguntado lo mismo como por diez minutos.
-Ammm ¿Qué? ¿Cuanto tiempo me fui?.-dije distraída-.
-Repito, diez minutos. -dijo divertida-. En quien demonios piensas llevas tres semanas así.
-Pues no puedo decir nombres es algo… reservado pero tiene semanas que no lo veo y no se si ir a visitarlo. ¿Qué opinas Mendoza? ¿Debo ir a verlo?.
-Qué mala eres, sin nombres heee… ummmm.-dijo pensando-. Ve a verlo puede que le alegre tu visita, solo ve su mirada cuando te vea llegar y pues yo sé que lo entenderás. Eres la alegría de muchos aquí, espero que de el también. Así que mueve ese lindo trasero y corre a por el.-dijo y me sonrió-.
Le devolví la sonrisa y corrí por la escuela a mi chófer, rápido le dije que visitaremos Arkham.
Arkham.
-Hola buenas tardes necesito ver a un paciente.-dije tranquila-.
-Disculpa linda es que no así de fácil estas cosas, necesitas gafete, saber si el paciente está bien para visitas y si no prepararlo, permiso y revisión si es peligroso. -dijo serio-.
-saque de mi saco cien dólares- Jerome Valeska, pero ya. -se lo entregue por debajo de una libreta pues hay camaras-. Gracias caballero.
-Por supuesto ya lo traemos pase.
Abrió la puerta y estaban todos los reclusos en una pequeña habitación supongo el comedor. Caminé y pues mi uniforme es corto no faltó cada enfermo depravado. Malditos piropos idiotas.
Llegué a una puerta, y el guardia me dejó pasar. Estaba mi pelirrojo. Mirando la pared.
-Buenas tardes.-dije sin ningún sentimiento-.
-Siempre formal Anita.-dijo y me dedicó una sonrisa-. Asi que cómo va todo?.
-Excelente gracias, solo que no te veo desde hace tres semanas y ya. -dije sarcástica-. Y tú cómo estás?.
-Ni tan formal niñita, pues en lo que cabe bien, solo pensando en tus curvas.-sonrio cínico-. Esa falda te va bien si fuera aún más corta te… ummm que ganas me da hacerte mía alocadamente.
Me sonroje, que está diciendo.
-Ummm caramelito, ven aquí. No te sonrojes como si no lo hubiéramos hecho ya. -sonrio cínicamente-.
-Jerome… aquí no se puede hacer eso hay gente afuera… -me interrumpió-.
-hey tu el de afuera, ven aquí. -llego el guardia-. Apaga las cámaras y déjanos completamente solos.-el guadia asintió y salió-.
-¿Y como pasó esto? Osea te obedecen llevas apenas tres semanas. -dije sorprendida-.
-Ummm ya ves ellos harán lo que sea con tal de que no los mates.-sonrio como el gato de Alicia-. Ahora sí ven.
Me acerqué y deposite un beso en los labios de Jerome, el me besó con más desesperación. Mordí su labio inferior.
-Tranquila traviesa.-dijo excitado-. El que maneja la situación soy yo. Ven aquí caramelito que te comere.-dijo y señaló sus piernas-. Ven nena o te haré pagar.
Me senté y nuevamente me besó salvajemente. Sus manos las metió debajo de mi camisa. Toco mis pechos.
Masajeando uno y beso mi cuello. Yo no movia las manos. El seguía, se separó y bajo mi falda, me recostó en la mesa que estaba ahí, me quitó las bragas, y me hizo un buen oral. Me vine en su boca.
-Umm caramelito, tan deliciosa como siempre.-dijo y me besó.
Yo baje a su pantalón, debo admitir las rayas, se le ven genial. Le hice el mejor oral que pude.
Después el y yo nos levantamos, yo lo volví a besar, estoy completamente desnuda.
-Jerome mis bragas?.-pregunte y lo vi-.
El las tenia en la mano después las llevo a su bolsillo.
-Se que te encanta este color.-dijo y sonrió-. Te las devolveré hasta que me des otras, la semana que viene en la “visita”.- hizo unas pequeñas comillas en la última frase-. Te esperaré.
-Como me saldré así Jerome, no osea no.-dije con una vos exaltada-.
-Vamos solo yo puedo verte por qué eres mía o que hay alguien más y te da pena verlo sin bragas?.- dijo ¿Celoso?.
-No Jerome, solo que no me convence salir así.
En fin el me convenció con un beso.
Salí así, lo bueno solo habían pocos policías. Me fui a mi casa incómoda. Con solo un pequeño short.
Así que tendré que estar llendo semana a semana ...