CAP 16

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*ME ENCANTA ESTA CANCIÓN*


Llevaba una semana así. Solo salía para la escuela. Iba y venía. Mi nana y Marcus preguntaron que me pasaba yo les decía que no pasaba nada. Que no tenían que preocuparse. Pero ellos sabían que no era así. Estaba muy triste. No era nada cercana con Diana, no estaba de de humor. Comía lo normal pero comía en mi cuarto. En resumen me aislé. Se iban a cumplir 9 días de la muerte de Jerome y seguía triste.

–Ana nena ¿Quieres pastel de fresa? -pregunto mi nana al otro lado de mi puerta-.

–Si, gracias nana tráelo a mi cuarto y ya. -dije sin ánimos-.

–Amor mío por favor abre quiero hablar. -dijo en tono preocupado-.

–Solo trae el pastel Olga. -dije sin ánimo todavía-.

Ella no dijo nada. Sentí que se acabaría el cuestionario, pero me equivoqué ella abrió con la llave y entro. Cerro la puerta y se sentó a mi lado. Me miro fijamente estaba a punto de decir que se saliera pero me interrumpió.

–Ni se te ocurra decir que me vaya por qué no lo haré hasta que me digas y creeme que me quedaría aquí una vida. -dijo segura, cruzando los brazos-. Así que comienza a hablar Ana, por qué eso de que no tienes nada yo no me lo creo.

–Olga no, no quiero hablar. -dije enojada-.

Ella alzo una ceja y todo se quedó en silencio. Sentí su mirada en mi pero yo la ignore. Pasaron al menos 2 minutos. Y nadie decía nada. Hasta que ella hablo.

–Ana Harris, soy la mujer que más se preocupa por ti ahora. Dime qué te pasa, desde ese día de locos en la cena del hospital infantil estás muy mal, no sales, no comes, no me hablas. Ya es la quinta vez que habla Diana para saber si tienes algo. La gente se preocupa por ti Ana más yo. Te paso algo, te hicieron algo y no me lo dijiste. Ana dime amor. Por favor. Quiero ayudarte. -dijo suplicante viéndome fijamente la cara-.

Yo trate de no verla a los ojos pero fue imposible en el momento de hacer contacto visual con la mujer que me cuida desde que era bebé y que me cría desde los ocho años. Mi corazón se rompió al verla así, comencé a llorar mis ojos se llenaron de lágrimas que próximamente corrían en mis mejillas. Ella me abrazo y correspondí a su abrazo.

—Nana perdí a alguien. No me hicieron nada lo juro, pero perdí a alguien. -dije entre sollozos-.

—Oh cielo, ¿Quien era? -dijo mientras me sobaba la espalda-.

—No lo conociste nana, el era… -no sabía que decir, hasta que se me ocurrió-. Iba a entrar conmigo al colegio, era nuevo en Gotham, lamentablemente murió.

—Ana cariño, ¿Quieres que demos el pésame a su familia? -pregunto mientras me tenía en brazos-.

—No nana el era nuevo aquí, no tenía familia. -dije mintiendo-. Lo extraño, en tan poco tiempo se ganó todo, todo mi corazón. Me quiso tanto. -dije ahora de verdad y soltando todo-. Me demostró muchas cosas y ahora está muerto Nana. No pude hacer nada. Y lo extraño mucho mucho.

No paraba de llorar, ella me abrazó y besó la cabeza. Ella me consoló.
Después me acarició el cabello mientras decía cosas como "Todo estará bien" "El está en un lugar mejor". Casi me quedaba dormida. Cuando ella me dijo que me acomodará en la cama. Dormí profundamente.

La luz del sol entraba por mi ventana. Desperté triste pero no tanto después de todo me siento mejor por decirle todo a mi nana. Ella entró con una bandeja de desayuno. Platicamos de cómo me sentía hoy y esas cosas. Diablos, qué bien se siente está plática. Decidí tomar una ducha con música y todo. Las que tomaba antes eran muy depresivas. Solo agua, silencio y llanto. Pensé algo muy importante y que me serviría bastante.

ONE BAD DAY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora