Profundizaciones de la Biblia (Antiguo Testamento)

Lideres improbables

Dios supo extraer el potencial oculto de Gedeón

Pero Jehová le dijo: Paz a ti; no tengas temor, no morirás. (Jueces 6:23)

Gedeón era un guerrero improbable —vacilante y temeroso. La primera vez que lo encontramos aparece sacudiendo trigo furtivamente en un lagar. Desgranar el trigo abiertamente era invitar a los invasores madianitas a confiscarlo. Los madianitas dominaban a Israel tan completamente que era muy rara la vez que los israelitas podían levantar sus cosechas; algunos vivían en cuevas.
Gedeón no proyectaba ninguna acción heróica hasta que el ángel del Señor se le apareció con órdenes de batalla. "¿Quien! Yo?", parecia decir Gedeón, temblando.

Si uno tiene en cuenta la situación real, sus dudas estaban justificadas. Su familia y aldea adoraban a Baal, no a Jehová. Él mismo era presa de temores paralizantes, aun en visperas de batalla. Gedeón repetidamente solicitó pruebas milagrosas de que Dios realmente estaba con él —y un solo milagro no era suficiente.

Al mismo tiempo, Dios parecia hacer la empresa de Gedeón cada vez más formidable. Redujo su ejército de 32.000 a solo unos 300 soldados. Si un ejército tan superado en numero lograba la victoria, eso probaría más allá de toda duda que Dios estaba a cargo.

Dios conocía el potencial de Gedeón y lo fue llevando poco a poco hasta el punto de tomar valor. Lo alentó, lo dirigió y lo transformó. Y del día a la noche, Gedeón se transformó en un general decidido. Usó ruidos y luces como armas tácticas para infundir miedo, permitiendo así que su pequeño grupo dispersara a los madianitas. Fue de este modo que Gedeón, triunfante, hizo amanecer una era de libertad. Quizá nadie se sorprendió tanto como él mismo.

Material de rezago

La selección de Gedeón muestra un nuevo modo de actuar de parte de Dios. En una época en que las mujeres eran consideradas ciudadanos de segunda clase (vea 9:54: 19:24), Dios escogió a Débora como líder. Jefté, otro juez, había sido un descastado líder de una banda de proscritos, antes de que Dios lo escogiera para acaudillar al pueblo.

Y este modo de actuar no solo aparece en Jueces. A la largo de la Biblia, Dios utilizó material de rezago. Israel no había sido escogida por su gran tamaño ni por su gran cultura. (Es más, los arqueólogos informan que siempre había una caída en la cultura de cada ciudad después de ser capturada por los israelitas.) Dios no busco la gente más capaz, ni la más naturalmente "buena". Escogió una tribu pequeña y esclavizada, de poca cultura, con una memoria muy corta en cuanto a las bondades que el les otorgaba. Una y otra vez los israelitas demostraron ser indignos de confianza. Y también lo fueron sus lideres. Con este material poco promisorio Dios hizo grandes cosas para que el mundo pudiera ver que la gloria era suya y de nadie más.

Pablo retomó este tema al escribir, mas de mil años después, "Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo debil del mundo...para avergonzar a lo fuerte...para que, como está escrito: El que se gloría, gloriese en el Señor" (1 Corintios 1:26-31).

Preguntas vitales: ¿Se imagina a sí mismo como lider? ¿Por qué sí, o por qué no? ¿Qué tendría que cambiar Dios en usted para convertirlo en un líder?