Siren 13

68 13 4
                                    

Mis intentos por intentar comunicarme con Wendy, mi hermana, durante las últimas horas terminan en fracaso.

He de decir que la noche de ayer fue en realidad muy agradable estando con este humano, me hizo sentir bien, segura.

Conocí la casa que es bastante pequeña en comparación a la mansión donde estaba antes. Es muy diferente.

En la casa de la abuela de Taehyung todo era gris, sobrio.. Aquí todo es colorido.

Las paredes son de madera al igual que el piso, a diferencia del laboratorio donde todo era plano, sin textura. Las luces no son reflectores ni tampoco te lastiman la vista, son meramente cómodas con un leve color amarillento.

Pero lo que mas me gusta de aquí es el cuarto donde estoy, es realmente magnífico. Tiene un techo hermoso de cristal transparente donde entran los rayos del sol, donde puedes ver el cielo azul en su máxima expresión y a la vez donde puedes ver las estrellas si es una noche especial.

El aire del océano, el olor, entra por las grandes ventanas de esta casa que me hacen sentir libre y no ser una prisionera. Pensándolo bien, esa es la mejor parte.

Sungjae no está en este momento, trabaja bastantes horas en una exportadora de mariscos para ganarse la vida; lo que me deja a mi sola en esta casa.

Estoy muy emocionada, nunca me había sentido de esta forma en una casa humana y menos sola, en el pasado siempre estaba acompañada de personas e incluso cámaras.. Me adentro a la cocina balanceandome y dando saltitos, es pequeña, pero el aroma de no se qué es, es delicioso; siento que me fortalece.

Justo en medio hay una gran ventana con pequeñas luces alrededor, me asomo un poco y puedo ver todos los árboles alrededor de la casa. Puedo sentir el aroma del océano al máximo.

Mi vista se centra de nuevo a la cocina y cae en un tazón lleno de cosas, frutas. Tomo la más pequeña para ir probando y simplemente la muerdo.

¡POR ATLAS! ¡Que manjar! ¿Qué es esto? Empiezo a comerlo todo y cuando finalizo tomo otra del mismo color y forma para repetir. ¡Dioses santos! Esto es mucho más delicioso que un pez.

No se cuantas mas como, pero me detengo porque ya no encuentro mas.

Ahora paso a la no sé que es esto, hay una TV que debería de estar en el cuarto, una mesa que debería de estar en la cocina y un sillón grande que debería de estar por las escaleras.

¿Por qué lo tiene acá? Justo donde está la puerta principal. Esta casa es rara. 

Borrando todo eso de mi cabeza, me dirijo al baño. Es.. incluso mi pecera era mas grande.

Veo la tina y decido tomar un baño. Cuanto termino veo un cepillo rojo al lado de otro azul, tomo el rojo y lo paso entre mis dientes.

Ahora simplemente estoy sentada en el sillón de la puerta esperando a que esta se abra.

...

—Es un collar, cuando lo vi me recordó a ti, porque siempre brillas donde sea que estés, tiene el color azul de tus ojos y el color rosa de tus labios. Es tuyo.

Abro mis ojos completamente horrorizada, mi pecho subiendo y bajando. Me paso la mano por mi cuello sintiendo el collar, mi cabeza se llena de pensamientos, pero el sonido de la puerta abrirse me distrae.

Me levanto rápidamente.

Es Sungjae, quien llegó a su casa.

—Ya llegaste, ¡Que bueno!. ¡Probé una fruta o no sé que sea que me encantó y por lo tanto tienes que decirme como se llama y comprarme más!—hablo emocionada.

SirenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora