Siren

Siren 18

[Joy]

¿Soy igual a él?

—¿Él te ha traído aquí? —me pregunta.

—No entendí lo que me dijiste hace unos segundos. ¿A qué te refieres?

—Okay, puede que sea tu primera vez aquí y no sepas nada de este mundo por eso estás tan confundida y tengas miedo de que te descubra, pero déjame explicártelo paso a paso. Soy Yerin y soy una bruja.

Vaya que los humanos si se vuelan la cabeza. Yerin, como dice llamarse, es un tanto diferente a los humanos con los que he convivido. Tiene el cabello blanco largo ondulado y su ropa es toda de negro, su vestido es ajustado y de mangas largas a pesar de que el sol está muy potente.

—Sungjae es un tritón y tú eres una sirena, ambos de la misma especie; no tienes que fingir conmigo. No te haré daño, ya lo sabía. Creo que las especies diferentes tienen más en común de lo que se aparenta. Perdona por todo el alboroto, creí que entraste a robar.

¿Sungjae el humano que creí haber hechizado es un tritón? ¿La persona que todo este tiempo me hizo sentir segura es de mi misma especie?

—Yerin, yo no sabía sobre Sungjae.

—¿Y qué haces aquí? ¿Sí estabas robando? No te preocupes como ya te dije te puedo comprar un pan en el pueblo, no le diré. Simplemente olvidamos todo.

—¿Te han dicho que hablas mucho? —le sonrío. Veo como se relaja.

—Tiendo a decir todo lo que se me viene a la mente, sí, hablo mucho. Entonces, ¿Cómo llegaste aquí? Cuéntame.

—Yo no sabía sobre Sungjae, no sabía que era igual a mí.

—Necesito que me pongas en contexto, dime. ¿Recién te convertiste y él te encontró?

—No.. eso sería muy fácil.

Y le cuento todo, toda mi desgracia.

Al final simplemente me da palmaditas en la espalda, no lo siento reconfortante, pero entiendo el porque lo hace. Se levanta y me prepara un té de hiervas para que los dolores y calambres de mi cola sanen más rápido; ese era el aroma que sentía tan reconfortante esa mañana, flores y plantas puestas en toda la casa para que Sungjae se sienta vital como si estuviera en el océano.

—Iré por la ropa que le prometí a él, en un momento regreso. Termina de tomar el té y lava el vaso. No le gusta que haya trastes sucios—me dice y sale de la casa.

Es raro como aquí no terminan de despedirse, simplemente dicen su parte y se van. Al terminar el té hago lo que me dice.

Me voy a la cama y me acuesto boca arriba mirando hacia el cielo, ya es de noche de nuevo. Oficialmente es mi última noche en la tierra, no sé dónde está Wendy ya que no me he podido comunicar con ella, pero necesito volver al agua y estar de nuevo en mi hogar.

Lo has hecho bien Sooyoung, lo has hecho bien.

La puerta se abre y siento su aroma, es él.

Me levanto de la cama y salgo a recibirlo, pero me detengo cuando lo veo desde el umbral.

Es un tritón, no un simple humano que creí haber hechizado. Ahora lo veo, diferente. Le miro poner una maceta nueva en la mesa que tiene en la puerta para después quitarse la camisa.

Empiezo a observar cada centímetro de su cuerpo, no porque sea una enferma, sino porque simplemente no puedo apartar mi mirada.

Su cabello negro ahora está revuelto, creo que se debe a que trabaja durante horas, es medio ondulado o lacio, la verdad no lo sé.. Nunca lo había observado realmente. Su tez es blanca y hace contraste con sus ojos negros brillantes.