42

1.4K 98 7
                                    

-¡Cristóbal!- gritó con lágrimas en los ojos, su respiración estaba agitada y su corazón latía con fuerza. Al darse cuenta que estaba sólo decidió volver a recostarse.- Malditas pesadillas- se dijo, ni siquiera había notado cuándo se quedó dormido.

Secó sus lágrimas y se cubrió con las mantas, sentía tanto frío aún cuando el sol estaba en su punto más alto. Comenzó a recordar todo lo que pasó junto con su amado, esa pesadilla había traído tantos recuerdos malos y buenos, cosa que provocó que Johan de nuevo llorara.

-Te extraño tanto, quiero que estés a mi lado, que estés aquí conmigo, te necesito tanto- decía al aire esperando que el mayor pudiese escucharlo- Quiero verte una vez más, solo una- abrazó la almohada que había pertenecido a aquel hombre que tanto amó, mejor dicho, que aún amaba. Estaba a punto de caer dormido de nuevo, pero algo cruzó por su mente e hizo que se levantara de golpe.

Rápidamente caminó hasta el closet donde se encontraba toda su ropa y algunos ahorros, tomó una maleta y comenzó a guardar todo lo de él, no, todo lo de ambos, no dejaría las pocas cosas que aún le recordaban al mayor.

-No dejaré que me asesinen, necesito huir antes de que ocurra algo más...

...

El menor de ambos estaba desconcertado, ¿por qué Poché había cuestionado aquello?

-¿Q-qué? ¿Qué acabas de decir?- Calle estaba desconcertada, creía que había escuchado mal.

-Calle, lo que menos quiero es hacerte sufrir por mi muerte, es lo que menos deseo, si dejamos este amor hasta aquí te olvidarás de mí y no vas a sufrir el día que ya no esté...- fue interrumpido por su menor el cual no sabía si sentir tristeza o molestia.

-¿En verdad te preocupan mis sentimientos o te estás preocupando por los tuyos? Es increíble que estés diciendo esto- fue su respuesta, el que Poché le dijera aquello hacía que pensara cosas de más, inclusive cosas que no son- ¿O es que ya no me amas?- cuestionó.

-Bebe, te amo como loca, solo no quiero morir y dejarte sufriendo, ¿viste a todos aquellos que lloraban desconsolados? La mayoría de ellos perdieron a la persona que amaban, no quiero que algún día te encuentres como ellos, es lo que menos quiero. Te amo, Calle, en verdad te amo.- tomó la mano de la contraria para intentar tranquilizarla.

-Entonces, si me amas como yo a ti estarás consciente de algo, estaré contigo hasta el último momento, hasta el final de alguno de los dos o de ambos, no me importa morir a tu lado, ni morir por no tenerte, solo quiero pasar mi tiempo restante a tu lado- acarició la mejilla de la contraria- Quiero que me prometas algo- dijo.

-Claro, lo que sea con tal de hacerte feliz- respondió Poché esperando la petición de Calle.

-Prométeme que, pase lo que pase, estaremos juntos hasta que la muerte nos separe- se escuchó como una súplica.

La mayor soltó un pesado suspiro, imaginaba lo que sucedería si llegase a morir, Calle quedaría destrozada y era lo que menos quería, pero tampoco quería separarse de ella, era una decisión un tanto complicada, sin embargo, respondió:

-Lo prometo...

...

Al llegar al aeropuerto notó que se encontraban algunos oficiales que conocía, así que simplemente se colocó un gorro y un cubrebocas para que no lo reconocieran.

-Buena tarde, un boleto para...- hizo una pausa y comenzó a pensar a dónde ir, necesitaba un lugar con poca seguridad, lo decidió rápidamente- Islas Caimán, por favor- pidió.

-Claro, permítame un momento- respondió el chico que lo atendía- El próximo vuelo sale en 20 minutos, ¿está bien?- cuestionó amablemente.

-Sí, está muy bien- fue la respuesta de Johan, en ese momento solo pensaba en qué carajos haría en esos 20 minutos como para que no lo descubrieran.

-¿Me permite su pasaporte?- el chico necesitaba revisarlo, mucho más porque notaba un tanto nervioso al mayor el cual sin ningún pero lo entregó- Perfecto, aquí tiene su boleto, gracias por su preferencia- le sonrió a lo que Johan simplemente agradeció y dio media vuelta, tomó asiento en un pequeño banco.

Se sintió aliviado al ver que el chico no había notado el "pequeño" cambio que le hizo al pasaporte, ¿qué? ¿creían que Johan Vera era tonto? Claro que no, el pasaporte que entregó fue el de su difunto Cristóbal Falcón, el "pequeño" detalle fue que cambió la foto del mayor por una de él, ahora más que nunca creía que las personas son estúpidas.

-Solo veinte minutos, Johan, sé paciente...

...

El día llegó, tenían todo listo para largarse de Bogota, solo necesitaban ajustar algunas cosas mínimas e ir al aeropuerto, sí, aeropuerto, en este mundo todos son tan corruptos, aceptan sobornos incluso de criminales. Tenían vuelos por separado, la mitad en el día y la otra mitad en la noche. Eran vuelos exclusivos, muy pocas personas comunes y corrientes podían pagarlos, pero para Poché era demasiado fácil así que simplemente rentaron ambos vuelos. Sería tan fácil para ellos.

-¿Tienes todo listo, Calle?- cuestionó Poché al terminar de acomodar su ropa.

-Tranquila, no tenemos prisa, el vuelo es en la noche- respondió la menor mientras abrazaba por la cintura a su contraria, debía tener cuidado con la herida de la bala la cual aún no cerraba por completo

-Lo sé, cariño, pero no quiero que olvides algo y después quieras que regrese- fue la respuesta de Poché, parecían una pareja común y corriente que va de vacaciones, pero la situación en la que estaban era muy diferente.

-¿Te he dicho que me encanta cómo te quedan las camisas?- la menor cambió el tema, necesitaba que Poché no se estresara más de lo que ya estaba.

Poché simplemente soltó una risita, después respondió- Pero sé que te encanta mucho más cuando no llevo puesta una- su voz era tentadora a los oídos de Calle.

-Creo que sería una lástima que desacomodara tu perfecta vestimenta, ¿no crees? Será mejor esperar hasta llegar a la isla- tras decir esto besó el cuello de su enamorada la cual solamente se dejaba querer.

-Calle, ¿dónde dejo mis male...?- el menor hizo una pausa al observar la situación.- Bye- dijo para dar media vuelta a lo que Poché se separó instantáneamente de su contraria, su rostro estaba rojo. Calle soltó una risa.

-Dame un momento, voy a resolverle su asunto a Paisa- informó la más alta de ambas y salió de la habitación no sin antes dejar un tierno beso en la mejilla de Poché.

Calle al salir de la habitación Poché se tiró en la cama, sus ojos se llenaron de lágrimas.

-Perdóname, Calle no quise arrastrarte a esto- cubrió su rostro con sus manos- Quisiera poder ser eterna y vivir contigo para siempre, ahora temo dejarte sola en este maldito mundo- se arrepentía de tantas cosas- Si tengo la oportunidad de dejarte fuera de toda esta mierda lo haré, aunque tenga que renunciar a ti...

_____________________________________

Pondré una meta Fácil.

30 votos y subo el Siguiente Cap (ahora que se puede me permito pedirles esa cantidad de votos)

Buen dia chikilines

Enamoradas en Prisión {Caché G¡P}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora