Enamoradas en Prisión {Caché G¡P}

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El día era cálido, las olas del mar eran muy calmadas, no había imperfección alguna, habían algunas decoraciones con frutos endémicos de la isla, los "invitados" estaban sentados sobre los improvisados asientos con troncos de palmera, todos vestían atuendos elegantes negros, a excepción de Calle, esta vestía un traje completamente blanco, esta joven estaba esperando ansiosa a Poché la cual aún se encontraba en su cabaña junto a Sebastián y Paula.

-Ya debo ir, se hará tarde- decía la chica de pelo mitad blanco mitad negro queriendo escapar del lugar, estaba igual o más ansiosa que su pareja.

Paula había ayudado a Poché a arreglarse para la boda, le había hecho un cambio de look, ya no era mas la peliazulada ahora parecía "Cruella"

-No, debes esperar un poco más, solo déjame acomodarte el velo y ya- respondió Paula la cual se estaba desesperando de las quejas y nervios de la novia.

-¿Por qué tengo que llevar velo? Solo quítalo y déjame ir- Poché solo quería salir y ver a su amada, pero, a la vez, no quería cometer un error y arruinar su boda.

-¡Ya cálmate, Poché! Ya falta poco, solo déjate poner el maldito velo, no se va a tardar ni 5 minutos- Sebastián expresó, jamás había visto a Poché tan nerviosa.

Los tres se quedaron en completo silencio mientras Poché, con su ceño fruncido, se dejaba acomodar el velo, un hermoso vestido color blanco la hacia ver hermosa, fue algo que consiguieron de forma apresurada, pero era hermoso.

Unos minutos después Paula gritó victoriosa:

-¡Terminé! ¡Ahora vete a la mierda si quieres!- lo dijo sin pensar a lo que Poché y Sebas solo soltaron una carcajada, Paula no era del tipo de decir malas palabras, pero se veía tierna cuando lo hacía.

-Después me voy allá, ahora vámonos que nos están esperando- dijo Poché mientras se ponía de pie y corría a la salida de la cabaña.

-¡Espera! Debo entregarte a Daniela- fue lo que dijo Sebastián mientras tomaba el brazo de su amiga.

-Y yo debo sostener el velo para que no se arrastre- fue lo que dijo Paula y, acto seguido, tomó el velo con delicadeza.

-¿Qué estupideces dicen? Solo vámonos- se desesperaba cada vez más de ese par- Mejor le hubiera pedido a Paisa o a Johan que me ayudaran- pensó.

-¿Acaso no has visto películas extranjeras? Es lo que se hace en una boda, así que hazlo o no te dejamos salir- amenazó Paula por lo cual Poché solo rodó los ojos y se dejó hacer como el otro par quisieron.

Al salir de la cabaña lo primero que Poché quería hacer era correr hacia Calle, se sentía tan nerviosa, solo quería verla, abrazarla y besarla, no necesitaba más que a ella; sus manos comenzaron a sudar, su cuerpo temblaba y el maldito pensamiento de equivocarse rondaba su mente. No quería ni levantar la mirada, sabía que a sólo unos metros se encontraba su futura esposa, y era algo que quería, pero que le aterraba al mismo tiempo.

-Tranquilo, pareces maraca- Sebastián se burló mientras sentía el cuerpo completo de su mayor temblar- Te diré algo que te hará relajarte...- hizo una pausa, se aclaró la garganta y siguió- Te va a dar toda la noche hasta para llevar, así que no te pongas así o más se va a tardar la noche en llegar, solo camina y relájate- las palabras no eran tan reconfortantes, pero logró sacarle una leve sonrisa a Poché.

Poché intentó calmarse así que decidió levantar la mirada y la vio, su corazón se aceleró a mil por minuto, pero no pudo evitar sonreír, Calle también tenía una enorme sonrisa al ver que su amado se acercaba, era un sentimiento único, era una maldita mezcla de emociones para ambas, solo querían correr hacia ella y abrazarse, pero debían esperar solo un poco más.

Al llegar junto a Calle lo primero que hizo Sebastián fue decir:

-Te entrego a María José, mi amiga y hermana, cuídala y protégela, si no lo haces venderé tu cuerpo a traficantes de órganos- y sonrió para después soltar con delicadeza el brazo de la semi rubia la cual no esperó más y tomó la mano de Calle.

Paula soltó el velo con cuidado y tomó la mano de Sebastián para después ambos ir a sus respectivos lugares, un lugareño era el que se iba a encargar de la ceremonia, no era la primera vez que una pareja extranjera le pedía que los casara, así que lo haría sin problemas.

La felicidad se transmitía por todo el lugar, los hombres se sentían tan felices al ver a la Poché en su boda al lado de la persona que ama y que la ama. Y esperaban que eso durara para toda la vida...

... [Nos saltamos toda la ceremonia porque me aburre xdxd sigamos]...

-Por último, al sellar la promesa de amor que se están jurando debo aclarar que esa promesa estará presente en esta y las próximas vida, al decir esto pueden besar a la novia- dijo el hombre, Calle y Poché no esperaron más pare poder sellar el juramento con un sincero beso, era lo que ambos habían querido desde el día en que se conocieron, pero no lo sabían hasta ese momento.

-Te amo, Calle- fue lo primero que Poché dijo al separarse de los labios de Calle la cual la abrazó fuertemente al escuchar aquellas cortas pero sinceras palabras.

-Te amo, te amo, te amo y jamás me cansaré de decirte cuánto te amo, me haz hecho la mujer más feliz del maldito mundo, no quiero separarme nunca de ti, no me importa que nos estén persiguiendo para poder asesinarnos, te protegeré con mi vida entera, mi amor, porque eres todo lo que necesito para poder vivir, eres todo lo que me hace querer vivir, me haces tan feliz- ninguna de las dos pudo aguantar las lágrimas, corren el riesgo de amarse para después poder ser asesinados...

No, eso no es cosa de locos...

Es cosa de amor verdadero.

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-¡¿Una semana?! ¡¿Por qué carajos quieres que esperemos una semana?!- gritó el hombre mientras se encontraba en llamada con aquel traidor que revelaría el escondite de Poché y los demás.

-Confía en mí, necesito que a guardes una semana más, será una venganza perfecta para mí, por todo lo que me han hecho- respondió el hombre con una voz divertida, imaginaba el sufrimiento de todos y lo disfrutaba aún más.

-Pero en esa maldita semana se pueden ir a otro lugar- respondió el hombre mayor con inquietud.

-Tranquilo, Todos están confiados, no se moverán de aquí ni un solo milímetro, tú confía en mí, viejo- se escuchaba tan seguro de lo que hacía sin siquiera pensar en él daño que podía causar.

-De acuerdo, confío en ti

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HOLIIII!!, DIA DE ACTUALIZACIOOON

¿Cómo estan?, ¿Ya vieron el video de Calle y Poché con Juanpa?.

Fue de lo MEJOOR 

Actualizare pronto <3 

LXS AMO ♥♥♥.