"Acogida"
Jisoo estaba agradeciendo internamente que ahora mismo no estuviera por anochecer. Estaba sentada en una banca de un parque, sin compañía alguna. Su teléfono estaba siendo encerrado en sus manos hechas puños, su maleta yacía junto a su cuerpo, y la pelinegra tan solo se mantenía absorta de la realidad.
Se sentía horrible por haber abandonado a Taehyung, por haber dejado de amarlo. Cuando los dos pasaban momentos y momentos juntos, felices el uno al otro riendo de sus tonterías y compartiendo besos. Sin embargo, por la mente de Jisoo jamás paso que dejaría de sentir cosas por aquel chico de cabellos rubios y sonrisa cuadrada. Ahora se daba cuenta que, el destino puede llegar a cambiar aquel camino que ya tenías trazado en tu vida, dejándote totalmente sin saber que hacer o como reaccionar.
De vez en cuando la pelinegra se percataba de las miradas que la gente le echaba al pasar. Y como no, viendo a una mujer sola con una maleta y sentada en una banca en medio de un parque como si estuviera esperando alguna señal del cielo, llegaba a verse extraño.
– Jisoo.
La nombrada levantó su mirada al instante en que escuchó su nombre salir pronunciado por aquella boca, encontrándose a quien había estado esperando todo ese tiempo.
Sonrió.
– Ya estoy aquí – camino apurado hasta sentarse junto a Jisoo, y tomarla entre sus brazos, recibiéndola en un abrazo que realmente necesitaba – ¿Estas bien, pequeña?
La pelinegra, correspondió a su cálido abrazo y se aferró aún más escondiéndose en el pecho que palpitaba del castaño. Replicó solo con un asentimiento, sin decir palabra alguna.
– Gracias por venir, no quería verme como una aprovechada pero de verdad-
– Hey – el castaño exclamó, deteniendo sus palabras farfulladas con un gesto hecho por sus manos y su mirada de compasión hacia Jisoo –, está bien, me preocupé por ti y por eso vine.
Su brazos y los del chico, aún seguían envueltos sobre sus cuerpos cuerpos. Jisoo llevó su mirada triste a los ojos del castaño, como si a travez de ellos pudiera mostrarle su gratitud por no haberla dejado sola en esos momentos.
– Gracias, Jinie, no sé qué haría sin ti.
– ¿Me contarás qué pasó y por qué tienes una maleta? – Jisoo asintió, rompiendo el abrazo de Seokjin al separarse. Estaba por replicar y contarle todo pero este la detuvo tomándola del brazo para levantarla sin mucho esfuerzo – Pero primero. Vayamos a casa para que te sientas más cómoda, pequeña.
Cerca de algunos minutos más, los dos había llegado a una linda y pequeña casa. Entraron, el castaño después de Jisoo para luego cerrar la puerta. Al estar adentro, una sensación reconfortante llegó a la pelinegra, Seokjin siempre fue alguien demasiado bueno en la vida de Jisoo que, aveces sentía que se aprovechaba de su bondad.
– Siéntete como en tu casa. – mientras el castaño caminaba apurado de un lado a otro, la pelinegra se dispuso a sentarse en uno de los sofás de la pequeña sala sin apuros. En eso vio como Seokjin salía de un cuarto y la miró – ¿Quieres algo de tomar?, ¿Agua, un té tal vez?
– No, estoy bien de verdad. Gracias.
– Pequeña – Seokjin volvió después de algunos minutos y tomó asiento junto a Jisoo. Podía sentir sus ojos afligidos sobre ella, la cual simplemente se mantenía cabizbaja – ¿Ahora si me dirás lo qué pasó?
Seokjin sabía la relación que Jisoo mantuvo con Taehyung, pero hasta ahí nada más. No tenía idea de todos los problemas que llegaban a tener, ni de los momentos donde la pelinegra dudaba de su amor por el rubio al ya no sentía lo mismo cuando la besaba o tocaba. Por que Jisoo sabía que, su relación con Taehyung, siempre fue hermosa y alegre ante los ojos de los demás, pero no sabían lo que se escondía de tras.
– Termine con Taehyung.
Fue directo al grano, rápido y sencillo. Y por un momento la pelinegra sintió algo doler en su pecho al pronunciar de golpe aquellas palabras. Se quedaron en minutos de silencio donde Jisoo no sabía exactamente y deseaba saber qué era lo que estaba pensando Seokjin. La miraba sin expresión alguna, solamente neutral, le hacía creer que le reprocharía o la regañaría.
Pero se equivoco cuando sintió sus brazos encerrar su cuerpo al instante. Quedó un poco pasmada por tan repentina acción, y lo único que la pelinegra hizo fue recargar su cabeza sobre su pecho, aceptando gustosa su especie de consolación. Por que aún que no lo quisiera admitir, si necesitaba que alguien la consolara para no sentirse más culpable de lo que ya se sentía.
– Oh – el castaño había comenzado un vaivén con su mano sobre las hebras negras de Jisoo. Sus caricias sobre el lograban calmarla desde algún punto. – Todo va a estar bien ¿Si?.
– Sigo sintiendo que estoy siendo aprovechada con tu bondad, jinie.
Le fue completamente inevitable no decírselo. Sabía que tenía la opción de ir con sus padres de vuelta a su casa, pero tienen un resentimiento tan grande hacia su propia hija, desde el día en que decidió irse y vivir con Taehyung. Jisoo era tan orgullosa que no se atrevía ir a rogarles y pedirles perdón para volver con ellos. Por qué después de todo, no se arrepentía de haber vivido independiente junto a Taehyung.
Y es ahí cuando vuelve a pensarlo y a darse cuenta que no es buena idea hacer tan precipitadas las cosas, no siempre salen como uno las espera.
– No – el mayor exclamó mandando a la pelinegra una sonrisa enternecedora – Eres como una hermana para mi, Jisoo, y sabes que siempre voy a estar ahí para apoyarte. Así que deja de pensar que eres una aprovechada.
Lo miró a los ojos realmente agradecida. Es cierto que Seokjin era como aquel hermano que nunca tuvo, y agradecía que estuviera en su vida. Solamente esperaba que todo saliera mejor después de estos tiempos de dolor de cabeza y sufrimiento para Jisoo.
Esperaba que estuviera bien.
Recuerden que, para saber que si les está gustando, dejen su votito o si no lloro(;'༎ຶٹ༎ຶ')Yo me voy, se les ama y hasta la próximaaaaaa😽💖
~JeonlesseBaez♡
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OBSTINACY | t.s ✔️
FanfictionOBT | Una desconocida 𝐨𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢𝐨̂𝐧 que opaco completamente a un sentimiento de 𝐚𝐦𝐨𝐫 genuino y puro, jugarán los dos papeles más importantes de esta historia. ❝Una vez que comprendes porque aquello que tanto crees querer simplemente no está...