OBSTINACY | t.s ✔️

t r e i n t a y c i n c o

"Pequeña advertencia"

La cabeza de Jisoo no hacía más que revolverse constantemente. Si antes era distraída ahora lo era el doble, y vaya que eso le traía problemas. Pero ni siquiera ella podía evitarlo cuando ya volvía a perderse dentro de su cabeza intentando resolver todos los pensamientos que la mantienen inquieta todo el tiempo.

Tantas dudas, tantas preguntas que resolver y nadie parecía querer ayudarla, al contrario, solo volvían a confundirla una y otra vez. Y al final, nunca obtenía algo concreto que resolviera sus problemas.

Sentía que en cualquier momento se derrumbaría.

Días habían pasado y ni siquiera era capaz de olvidar la llamada de Taehyung.

Y estaba segura que algo había diferente en el.

– Te dire solo una cosa Jisoo – mencionó el chico con un deje que le propinaban escalofríos a la pelirroja – Si quieres encontrar la verdad de tras de todos los hechos raros que últimamente te han estado sucediendo, busca de quien menos has creído y solo así encuentres algo... quizá esa sea la solución a todos tus problemas – había logrado dejar callada a la fémina, y de mofó de ello – Pero querida, yo no me haré responsable de lo que pueda ocurrirte.

¿Que demonios había sido eso? No, no, no. Más bien, ¿como sabía el los hechos extraños que le habían estado ocurriendo últimamente...? Solo se lo había comentado a Lisa, era imposible que Taehyung supiese lo que le ocurría.

Pero querida, yo no me haré responsable de lo que pueda ocurrirte.

Necesitaba hablar con el. Aclarar que había sido todo eso que sucedió en esa llamada aquel día.

– ¿Estas lista?

Una voz a su espalda la sobresaltó ligeramente, volteando y percatándose de quien se trataba, le dedicó una pequeña sonrisa antes de asentir.

– Espérame solo un segundo.

Se dedicó a guardar su uniforme en uno de los casilleros de la habitación de empleados en la cafetería. Había quedado al salir de trabajar, ir al cine con Doyoung. El pobre insistió tanto que a Jisoo no le quedo de otra que aceptar, porque vamos no es por ser alguien cruel ni engreída pero, si por ella fuera preferiría quedarse en cama a descansar un poco de tanto estrés.

– Ya estoy.

– T-te vez muy linda – Las mejillas del chico se encendieron de un rojo ligeramente observándola, acción que provocó enternecer a Jisoo y soltar una pequeña risa.

– ¿Aún con mi cabello oliendo a café y mi ropa manchada de betún? – mencionó haciendo referencia a las veces que solía salpicarle encima el café o los pastelitos, dejándole pequeñas manchas sobre su ropa.

– Aún así te sigues viendo demasiado linda.

La pelirroja rio quedito por lo bajo – Gracias, tu también te vez muy bien. ¿Vamos?

– Sí claro.