Consolando a Kuroo

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(Matsukawa)

-Sigo sin entender por qué vienes conmigo. Vamos a consolar a Kuroo... -Reclame.

En el momento en que dije que iba a la casa de Yaku, Iwaizumi se subió a mi auto, y no hay forma de que lo bajé.

-Quiero ver a Yaku. ¿Por qué te molesta tanto llevarme? -Omega testarudo...

-Porque vamos a ser todos alfas, exceptuando a Yaku, y ahora, vos. -Respondí.

El mayor problema, no es que venga conmigo. Es que Terushima lleva cervezas, y si Yaku es bravo solo, con Iwaizumi al lado, son capaces de matarnos a golpes...

-Eso no es problema, estoy acostumbrado a estar entre alfas. -Mi amigo insistió.

- ¿No tiene caso pelear contigo, verdad? -Cuestione.

-No. -Iwaizumi me miro, enfurruñado.

-Genial... -Refunfuñe.

Es una suerte que la casa de Yaku, no quede tan lejos de la de Iwaizumi. Llegamos enseguida, y Yaku nos abrió. Se veía angustiado... supongo que se culpa por lo de Lev... aunque el que abrió la boca fue Kuroo...

-Hey, Yaku. -Salude.

-Oye, ¿cómo estás? -Iwaizumi miro a su amigo omega con preocupación.

-Kenma se disculpo conmigo por haber actuado tan mal, y haberme metido entre él y Kuroo. Pero me preocupa un poco Lev... Kenma dijo que está triste, y... se supone que debo hablar con él mañana... -Yaku parecía al borde de las lágrimas.

- ¿Enserio quieres terminar con él? -No pude evitar preguntar.

-Sí, solo... va a ser muy incómodo... -Me respondió.

-Bueno, mientras Mattsun abre la puerta, y consuela a Kuroo. Nosotros podemos hablar de eso, puedes practicar conmigo lo que quieras decirle a Lev. -Iwaizumi propuso.

-Eso... suena bien. Gracias, Iwaizumi. -Yaku sonrió.

-Bien, ¿dónde está la puerta? -Pregunte.

-Sube la escalera, Bokuto y Daichi ya están en el pasillo, intentando convencer a Kuroo de que los deje entrar. -Yaku me señalo la escalera, y yo subí.

Tal como dijo, Daichi y Bokuto estaban parados frente a una puerta.

-Hey, ¿ningún resultado? -Cuestione, acercándome.

-No... -Bokuto me respondió, y parecía muy triste.

-Bien, veamos si puedo abrir esto. -Saque un clip de mi bolsillo, y me agache a la altura de la cerradura.

Un par de minutos, y logre abrir la puerta. Bokuto enseguida se lanzó dentro, y se tiro sobre Kuroo, que estaba recostado en su cama.

- ¡MALDITO HIJO DE *****! -Grito nuestro amigo, con los ojos rojos de llorar.

- ¡Bro! ¡Estoy aquí para ti! ¡Llora sobre mí! -Bokuto exclamo, y abrió los brazos.

Kuroo miro a su amigo, nos miro a Daichi y a mí, y luego, con los ojos llenos de lágrimas, se tiro sobre Bokuto.

- ¡BRO! ¡KENMA ME DEJO! -Grito, y hundió su cara contra el cuello de Bokuto.

Daichi y yo nos sentamos a sus lados, y le dimos palabras de aliento. Pronto, llego Terushima, y se unió al abrazo de hermanos.

Nos costó casi dos horas, lograr sacar a Kuroo de su cuarto, pero cuando lo hicimos, nos llevamos la "agradable" sorpresa, de que Oikawa, Atsumu y Ushijima estaban en la sala, con cajas de pizza en las manos.

- ¡Kuroo-chan! -Oikawa corrió hacia nosotros, y abrazo al pobre, seguido de Atsumu.

-Bueno, como ustedes van a tener una noche de chicos, yo me voy con Iwaizumi. -Yaku nos anunció.

-Espera... -Kuroo se separo de los dramáticos setters, y corrió hacia la puerta donde estaban los omegas. -Tú... les dijiste que vinieran... gracias... -

-Idiota. -Yaku atrajo a Kuroo en un abrazo. -Te veré mañana en el entrenamiento... Por cierto, me llevo tu auto. –

Iwaizumi y Yaku se fueron, y nosotros nos sentamos en la sala a cenar. Terushima trajo las cervezas...

Bien, no sé que fue lo que paso, pero no es normal despertar sobre la terraza de un complejo de departamentos, sin camisa, y con Daichi al lado. 

Intercambio de parejasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora