Capítulo 54 Maratón 5/5 (Sin editar)

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- No bella Ren, sólo dices eso porque crees que es una 'usurpadora' - le dice Mau a Ren, parecen no notar mi presencia al entrar también a la cocina - Suena como una chica agradable.

- ¡Claro que no! Es una odiosa - alega ella - Si vieras como se puso por un chiste que contó Diego...

- ¿De qué era el chiste?

Ella sonríe maliciosamente - De gallegos.

- ¡Oh! - Mau explota en una carcajada y aplaude - Creo que tú no eres la única que la piensa como una 'usurpadora' - dice dramatizando la última palabra - Aunque no entiendo el drama, si como dices él dijo que no iban en plan romántico.

- Si, quizá nos pasamos esta vez - dice con algo de culpa Ren - Pero estábamos furiosos porque ella parece no tener en claro eso de amigos y... es impertinente... es que... arg... ni siquiera tiene idea de lo que ocurrió con nuestro Pupi. ¿Puedes creerlo?

- ¿No le contó?

Ren niega enérgicamente.

- Al menos él luce hecho una mierda - ella suspira - No es lo que era antes.

- Ren, ninguno de los dos lo es... aunque "ya sabes quién" aparente lidiar con ello.

Si tus amigos cotillean bajito escondidos en la cocina, no es nada bueno.

-Espero que hablen de Voldemort - les digo interrumpiéndolos y dan un brinquito al verme - ¿Qué pasa? Ahora se cuentan secretos a mis espaldas. ¿Qué ocurre aquí?

-Veras, cara de cola - me dice Mau pasando su brazo en mi espalda - Como tú no aceptaste el hecho de que somos almas gemelas me he buscado otra, la bella Ren ahora es mi nueva alma gemela, ¿verdad bebé?

Le sonríe sínicamente y Ren le rueda los ojos sin antes regalarle un dedo de en medio.

- No me van a contar de qué hablaban, ¿verdad? - insisto.

- Nada importante, una cosa con un amigo de la universidad de Diego - se encoje de hombros - Un tipo medio atarantado, por eso lo charlaba con este que es uno igual.

Sé que Ren se ha estado viendo con Diego desde unos meses acá. Incluso la vi aplicar para una universidad en la misma ciudad de él. Me duele que no podamos hablar del tema. Quisiera hacerlo porque mi amiga es feliz y yo quisiera estar ahí para ella tal como estuvo para mí, pero, aunque he insistido en que puede hablarme de ello, que lo llevo bien, sinceramente ninguno de las dos se siente cómodo. Me da explicaciones resumidas sin entrar a detalles. Triste, pero parece ser lo mejor por ahora.

- ¿No me estarás ocultando algo que crees que no quiero escuchar?

Niega enérgicamente - Nop. Pero venga, no tiene importancia... has dejado a Ian solo.

- Mariana se quedó y él está instalando los cables, vine a ver porque se tardaban tanto ustedes dos.

- ¿Celoso? - pregunta Mau coqueto. Me agrada que de cierta forma él siga siendo él mismo que siempre conocí.

- No te imaginas cuanto - dramatizo y él ríe.

-Tomemos los refrescos y subamos, Ian ya ha de haber terminado - dice Ren.

- Sabes Joaquín - me dice Mau - Me siento mal por Ian, si le dices de una vez que no te interesa y el pobre puede seguir su vida feliz navegando en tu friendzone o buscando otra isla.

- Él no está interesado en mi - le gruño - Somos amigos, así como tú y yo. Además el no es gay.

Mau ríe - Cara de cola, recuerdas, yo ya tengo hasta un muelle privado de tanto que navegue en tu friendzone. No soy el mejor ejemplo. Solo te advierto porque te quiero, pero cuando él te pida salir ni te espantes y no seas tan cruel al rechazarlo. Mira que la hermana de Andrés lo dejó en el suelo, no lo patees.

- Cállate - le digo - Sabes que no estoy interesado en nada romántico.

- Yo lo sé, Ren lo sabe, tu padre y su novia psicóloga lo saben, el novio rancio de Ren lo sabe - ella le da un codazo - Mariana lo sabe ¡Hasta Queso lo sabe! - dice riendo mientras mi gato nos sigue por las escaleras - Pero el pobre chico de los cables no tiene ni idea.

- ¿Por qué debes tener razón? - espeto.

- Porque soy hermoso e inteligente... - bromea - Y conozco esa mirada que él te da y como no provoca nada en ti.

-Joaquín - dice Ian mientras entramos a mi habitación. Ya tiene instalado todo. - Deja te ayudo con eso.

Toma los vasos que llevo en la mano y los deja en la mesa.

Mau me mira de reojo mientras le da un vaso a Mariana quien está sentada en mi cama acariciando a Queso quien saltó a su regazo. Sé lo que piensa, tiene razón. Ian se ha fijado en mí. Cualquier chica del colegio estaría bailando la macarena de felicidad, él es uno de los pocos preparatorianos que no es un completo tonto. Es inteligente, atlético, bien parecido, divertido y presidente de la sociedad de alumnos. Nada mal. Pero yo no le quiero más allá de nuestra amistad.

Quizá debería seguir adelante tal como Emilio parece haberlo hecho. Porque no me trago el cuento de un amigo de la universidad de Diego. Sé que es Emilio y aparentemente una chica interesada en él.

Quisiera dejar de amarlo. Son casi seis meses desde la última vez que le vi. Supe que ha venido dos veces desde que se fue a Washington, pero sólo llega hasta donde Diego, no ha vuelto acá.

Su cumpleaños este fin de semana. Seguro por eso está aquí. No se si soy tan fuerte para soportarlo. Alguien había prendido la televisión en un programa de chismes que podía escuchar vagamente mientras trataba de apartar las lágrimas que amenazaban con salir.

Emilio Osorio Marcos. Hijo del exitoso empresario socio de Stylinson, una de las más grandes y más exitosas empresas a nivel mundial y de la famosa diseñadora de Joyas Niurka Marcos.

Escuchar su nombre en la televisión se me hacía tan extraño. Decidí prestar atención.

Se ha comprometido hoy con la reconocida actriz, cantante y modelo Guadalupe López Treviño, hija del empresario Francisco López dueño de Avon, una de las cosmetiqueras más grandes de México y hermana de Cuauhtémoc López Torres, gobernador de Oaxaca. Según lo dio a conocer en sus redes sociales está tarde.

Las lágrimas brotaban ahora sí sin control sobre mi cara. Seguramente era lo que Ren y Mauricio habían tratado de ocultarme. No sé que dolía más si la traición de ellos o de Emilio.

-Joaco.... Yo ... - dice Ren

-No... ahora no - respondo y corro hacía mi habitación.

Pensé que lo tenía cubierto, que estaba empezando a superarlo, que podía recuperarme, dejarlo de pensar y con un poco de suerte hasta de amor pero ahora mismo todo lo que construí se está cayendo a pedazos...Verlo mirarla de la misma forma que me miraba a mí, ver que ha seguido con su vida mientras yo estoy aquí, sufriendo por él solo me hace odiarlo más. Juro que a partir de hoy y para siempre no volveré a derramar una sola lágrima por Emilio Osorio Marcos. Porque no se las merece, no merece que mi amor, no merece mi odio. No merece nada de mí.

Fin

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Hola caras de bola ¿Cómo están? Yo ya no tan bien :(

Bueno como vieron hice un maratón porque supuse que era mejor llorar de una junto a Joaquín que hacerlos llorar toda la semana :)

Aquí se termina la historia

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Bueno no es cierto. Aquí vamos a parar de narrar con Joaquín para empezar a conocer el lado de Emilio. Espero disfruten los capítulos. Nos vemos mañana.

Gracias. Les quiero

Mi profesor || Emiliaco || TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora