- Joaquín, ¿sabes qué es esto? – pregunta Diego levantando su costoso móvil.
- Un teléfono móvil – respondo, ¿acaso no es obvio?
- Ajá, y dime, ¿para qué sirve? – suena como un profesor dando catedra.
Sonrió confundido.
– ¿Para comunicarse con las personas?
- Tienes uno, ¿cierto?
- ¿Cuál es la finalidad de todo esto? te estaba contando... ah, ya lo pillo – digo algo apenado, le he dicho a Diego todo lo acontecido con Mauricio, Emilio y yo después de que lo llamara para pedirle ayuda. Básicamente le he confesado que su visita ha sido en vano.
- ¿Tan difícil hubiera sido enviarme un texto diciendo que se abortaba la misión?
- Lo lamento Diego, no era mi intención causarte molestias innecesarias.
- Bueno, bueno, tampoco es que esté molesto – dice relajado aparcando frente a mi casa - Sabes, ahora comprendo porque tu pésima actuación como mi novio falso – ríe – No importa, además me gustó visitarlos, quizá lo haga desde ahora un poco más seguido.
Comienzo yo a reír – Claro, esa será la razón oficial, ¿no?
- ¿De qué hablas? – dice haciéndose el inocente.
- Te advierto que es como mi hermana.
Él capta mi indirecta sobre Ren – Vamos Bondoni, sigues con tus ideas raras, tienes mucha imaginación en esa cabecita.
- Entonces quizá no te interese tener su número – digo encogiéndome de hombros. ...
Diego me mira y puedo ver la lucha en sus ojos, ¿tan difícil le es admitir lo que siente? quizá si somos un poco iguales.
- Eres un pequeño ser perverso – bromea.
- Oh, vamos Diego... cualquiera a millas lo hubiese notado, yo tenía tu brazo en mi cintura y rosas de tu parte, pero la forma en que la miraste a ella solo la consigo con otra persona, que de hecho, es mi novio.
- Te creí más racional, Joaquín, no me vayas a salir ahora con que crees en esas cosas como...
- ...¿Amor a primera vista? no creo en ello, el amor es más complejo de lo que podrías ver con solo una mirada, pero, mi querido Diego, sí creo en que grandes cosas pueden comenzar después de una verdadera mirada.
Él pone los ojos en blanco, mi idea le ha llegado, pero es claro que no lograré que lo admita.
- Mi amigo te ha vuelto una cursi – bufa, pero el rubor de sus mejillas me indica algo más.
- Quizá a ti también te haga falta alguien que saque tu lado cursi – bromeo – No es tan malo como creíamos.
Abro la puerta y salgo tomando mi mochila.
- Espera Bondoni – dice Diego – llévate las rosas, son tuyas... gracias por eso último y no solo tienes un novio, sino también un hermano nuevo.
Aquellas últimas palabras me hicieron lanzarme a sus brazos, ambos nos dimos un abrazo fraternal, solía sentirme muy solo hace no mucho tiempo, y ahora tenía a mis mejores amigos, un novio maravilloso y un hermano nuevo. ¿Acaso podría pedir algo más?
- Somos como familia, no lo olvides. – me dice por último antes de que baje y él prenda el motor.
- No conduzcas muy rápido – le pido, pero él ríe.
- Lo siento, este bebé dejará de ser mío en unas horas así que debo aprovecharlo
y como una bala sale disparado por la poca transitada calle de mi casa.
![](https://img.wattpad.com/cover/200139882-288-k91542.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Mi profesor || Emiliaco || Terminada
Fiksi PenggemarNúmero de registro: 2101246689115