Esté donde esté (Varchie)

2. Choque de puños

Veronica

Estaba nerviosa, más que nerviosa. Hace tiempo Archie había dejado de pelear, no sé en qué momento pensó que volver a boxear, y justo dos días antes de la graduación, era una buena idea.

Lo peor de todo es que estaba a cinco minutos de boxear con K.O, el novio de mi amiga Katy. Y dejando de lado el hecho de que lucharía con K.O, un chico que conocía de hace tiempo y era el enamorado de mi buena amiga de hace tiempo, él era boxeador, Archie no, hubo un tiempo en que lo fue, o intento serlo, hasta fui su manager, pero lo dejó, hace tiempo lo dejó, sólo le enseñaba a los niños del Royale, pero era todo, y K.O además de doblarle en tamaño, practicaba diario.

Sólo pido que no mate a mi hermoso novio.

Bueno, y que no lo desfigure, su cara es de las cosas más hermosas que he visto en mi vida. Me encanta besar sus mejillas y jugar con sus labios. Amo ver sus ojos marrones, son preciosos, y de verdad no me gustaría tener que hacerme la idea de ya no ver esos ojitos porque de sólo pensarlo, siento que desfallezco.

Además, en dos días es el baile de graduación, y no digo que vayamos a ser el rey y la reina, pero es nuestra última noche en Riverdale High con nuestros amigos y de verdad odiaría que fuera con la cara llena de cortadas y sangre seca.

Sin darme cuenta, por estar absorta en mis pensamientos, ya sea recordando por si a caso cada minúsculo detalle del rostro perfecto de Archie, o porque pensaba en cómo sería la reacción de todos en el baile al verlo con la cara destruida, que no me di cuenta del momento en que K.O subió al ring, muchos le aplaudían, pero eran más las personas que lo abucheaban y era lógico, estábamos en el Royale, territorio de Archie.

Por suerte, pude estar atenta al momento justo en que ese bello pelirrojo subió al ring.

Sonrío al verlo entrar tan seguro, tan lleno de energía.

Me pongo de pie y empiezo a aplaudir, a gritar y a echarle porras como toda una colegiala.

Logro llamar su atención, así que él voltea a ver hacia mí dirección. Me observa por unos segundos y me regala una encantadora sonrisa.

-¡Suerte, guapo!, ¡tú puedes!- grito lo más fuerte que puedo para lograr que mi voz sobresalga de los gritos de toda la gente y así Archie sepa que cuenta con todo mi apoyo.

Y no sólo cuenta con mi apoyo arriba del ring, también lo hace debajo de este. Cuenta con mi apoyo en todos lados, en cualquier momento y en cualquier situación.

Archie me mira unos segundos más, así que le lanzo un beso.

Él vuelve su vista hacia su contrincante y cuando el referí los llama a ambos para hacer el tradicional "choque de puños" se acerca, e inicia la pelea.

Archie es quien lanza el primer golpe, lamentablemente su oponente logra esquivarlo con agilidad, pero no pasa mucho tiempo hasta que Archie logra darle un buen golpe, haciéndolo perder un poco el equilibrio. Me levanto de mi lugar emocionada, sin dejar de echarle porras a Archie.

Después de unos minutos la pelea se torna algo reñida, Archie ya ha sido golpeado varias veces, pero a pesar de que K.O era boxeador, no sé ve tan limpio, el igual gotea sangre. No sé si más que Archie, pero al menos mi héroe pelirrojo había logrado causar un daño en el bulto de dos metros con el que peleaba.

Solo espero que la pelea continúe así, que no ocurran más daños, y sobre todo que Archie gane.

...

La pelea había terminado, ahora me encuentro llenado una bolsa de hielos.

Cuando termino de llenar la bolsa, giro mi cuerpo hasta ver a Archie el cual está sentado en una de las bancas del vestidor que hay en el Royale.