Música amigos y fiesta
Tengo frio, no sé exactamente porque si no hay corriente de aire y la noche está bastante cálida a comparación de otros días, aun así, eso no evita que mi piel se erice con cada paso que doy. Mis odios se llenan al instante de la música que proviene de la casa frente a nosotras, no hemos dado un paso más porque me he quedo unos segundos contemplando la mansión frente de mí. Es enorme.
Gabriella me toma del brazo sacándome de mi pequeño trance, haciendo que vuelva a caminar a la par con ellas.
Nos abrimos paso entre las personas porque el lugar está repleto y es imposible no chocar, tocar y sentir el cuerpo de alguien más. Tengo un odio-amor con este tipo de ambientes.
Recorro con la mirada el lugar a medida que vamos avanzando, las chicas me habían dicho que los padres de Rhett poseen una gran cantidad de dinero, pero no fueron lo suficientemente claras al decir que vive en una mansión con unos cuantos amigos. El lugar es enorme y eso que apenas estamos atravesando la entrada. Sabía que Rhett no se preocupaba por el dinero, se ha creado esa reputación, además, solo basta ver el auto que conduce y como despilfarra dinero en fiestas. Solo que jamás había puesto un pie en su casa. Era la primera vez que venía a una de sus famosas fiestas y entendía un poco porque todo mundo hablaba de ellas, estamos prácticamente en un castillo.
Llego al jardín trasero en donde había varias personas alrededor de una inmensa piscina, conversando, bailando, bebiendo y otras jugando en un par de mesas. El sonido es menos penetrante aquí y mis oídos agraden eso. Las chicas se dispersan al momento que ponemos un pie afuera. Suelto un largo suspiro buscando donde estén sirviendo las bebidas.
Kelsey dijo que nos veríamos aquí, le mandó un mensaje preguntándole en donde se ha metido. Normalmente en las fiestas estaba con Kel y Ares, muy pocas veces con las chicas y era porque su círculo de amigos era diferente al mío, pero como no tengo auto, vine con ellas.
En mi búsqueda por algo para beber, me encontré al dueño de la casa con una chica colgando de su cuello bastante divertidos, ella habla mientras él se concentraba en el escote de su blusa. Suspiré apartando la mirada y seguí buscado en otra parte.
Mis ojos vieron la inmensa barra, que en realidad son mesas apiladas llenas de diferentes bebidas con un chico detrás preparándolas. No puedo evitar sonreír, el alcohol es mi debilidad y mi perdición, y hoy lo necesitaría. Ares no estaba y mi objetivo de hoy está bastante ocupado así que mientras encontraba a Kelsey, esto serviría.
—Hola linda, ¿qué te doy? —me habla el chico intentando sonar seductor apenas llego frente de él.
Intento no reír y lo miro bastante tranquila, ignorando lo que ha dicho.
— ¿Qué tienes?
—De lo que tú quieras —me mira y hago mi mayor esfuerzo para no rodar los ojos por el doble sentido en sus palabras.
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No me digas adiós [1]
RomanceCallie es una chica cuyos problemas los podía contar con los dedos de su mano, inteligente, divertida con complejo de comediante y siempre ha mantenido un perfil bajo en la universidad, hasta que él llega y la saca de su zona de confort. Jamás se vi...