56. Bullying

7.1K 742 336
                                    

CLOE


Desde que llegué a casa me había centrado en estudiar y adelantar trabajos que me mantuvieran ocupada para no pensar. Cuando creía que nada podía ir peor, cuando pensaba que mi vida era un desastre y todo por culpa de un imbécil, me llegaba una notificación que me daba una esperanza. Eran las once de la noche y pensaba que Erik se arrepentía de su escenita en la que me había dejado en ridículo ante medio instituto. Me giré en la cama y alcancé el móvil. Nada más lejos de la realidad.

Estiradaaaaa ¿Qué pasó? ¿Se le manchó el polo a tu novio el pijo y por eso te fuiste corriendo?

Vete a la mismísima mierda Thiago García, ya te lo dije.

Grrrr. ¿Por qué yo? ¿Qué buscaba?

No me molestes.

Fíjate, hasta te aprendiste mi apellido. Mmm, ¿y qué se supone que hice? Para irme a la mierda, digo.

¿ eres tonto o te la das?

Uy, eso es lo más bonito que me has dicho nunca. Esta noche soñaré contigo.

Déjame en paz, olvídate de que existo.

Me has tocado el corazón, estirada.

Y tú a mí los ovarios, gilipollas.

Uyyyy, baja los humos, "princesa".

Qué princesa ni qué princesa... La cabeza me iba a explotar por su forma de alterar mi estado de ánimo. Yo estaba tranquila y aparece el imbécil para perturbarme, para hacerme rabiar.

¿O qué, imbécil? ¿Me estás amenazando?

Si eres así en otros lados el pijo de tu novio estará contento.

Vete a morrear a Alicia y déjame en paz.

Uyy, con gusto, pero me huele...

Pobre Alicia.

Me huele a... celos.

Definitivamente eres tonto perdido, chico.

Pero sé qué más te gustaría a ti.

Háztelo ver por un especialista.

Qué pena que estés con el pijo posesivo.

Número bloqueado.

GRRRRRR. «¡Quería gritarrrrrr!».

En mi vida nadie me había hecho enfadar de esta manera. Imbécil, idiota, gilipollas, puros adjetivos que lo calificaban como un auténtico TOCAPELOTAS. El maestro del bullying, eso era Thiago. Un ser insufrible que me llevaba al límite sin despeinarse. En el otro instituto me ignoraban y eso me molestaba mucho, pero que una sola persona de casi novecientos que éramos en ese centro, una sola, se metiera conmigo sin razón... ¿O tenía alguna razón y yo no la sabía? Tenía que averiguarlo y enfrentar el problema. Generalmente, lo normal sería chivarse y denunciarlo, aunque no tenía pruebas, no me había tocado un pelo, y si había algo que mi padre me había repetido hasta la saciedad era que no se podía ser chivata. "A los chivatos los mataban en las guerras", pero mi madre le replicaba siempre: "soldado cobarde vale para dos guerras". Lo único seguro es que esto era una guerra entre él y yo, y tenía que saber ¿por qué?

Número desbloqueado.

¿Por qué me bloqueas y desbloqueas?

¿Te aburres?

¿Por qué yo? ¿Qué te he hecho?

Algún día te lo diré :):

Por favor, déjame en paz, te lo ruego.

Ay, "princesa", no puedo.

Deja de llamarme así, no soy princesa de nadie.

¿Ni del pijo de tu novio?

Soy mía y de nadie más.

Ves...

Veo ¿qué?

Es por eso...

¿Por eso, qué?

Nada...

Das miedo, Thiago, por favor, déjame en paz...

Eso nunca, estirada, jamás podré darte miedo porque no te haría daño.

Pues que sepas que me das miedo.

Yo que tú, haría que tu novio cuide las formas.

A él sí le temes, aunque no lo quieras reconocer.

Erik no me hace daño como tú.

Visto.

Mi cuerpo temblaba al completo, una angustia recorría mis venas, era como cuando intuyes que algo malo va a pasar. Thiago era el Dexter Morgan de mi vida, hermoso, misterioso y terriblemente malo. No podía sucumbir al Síndrome de Estocolmo con ese ser. Él no me había secuestrado, pero me perseguía con su inquietante presencia que perturbaba mis emociones.

Me dejó en visto y no volvió a escribirme. Me desahogué, le dije lo que pensaba, no sé de qué serviría ni cuanto duraría, pero si el tío no me quería hacer daño por lo menos se lo pensaría dos veces antes de volverme a molestar. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mis días de adolescente.  Amar. I (Publicado en físico)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora