José María y Cristóbal había decidido irse del parque, caminando por las calles de San Sebastián tranquilamente; y estaban tan tranquilos, hasta que vinieron los padres del chico supuestamente por él, los cuales resultaron ser del tipo "Matilde".
José: ¿Eh? Si son los padres del chico. Por fin... Espera, esos tíos tienen pinta de perros -le mira una pistola al papá-. Uy, creo que mejor será mío, sin importar nada.
Sam: Yo estoy más a gusto con este Lobito (.3.).
Padre: Ahora sí venimos por el escuincle.
José: Amm... No, este niño ahora se queda conmigo. Vosotros nunca vinisteis por él, y veo lo que está pasando entre él y vosotros...
Madre: Tú eres más que un saco de pulgas -saca la chancla como arma-.
José: Sí, lo soy, pero al menos sí saqué adelante a este crío y mejor que ustedes. En fin, buen intento, pero el chico se queda conmigo.
Sam: Yo me quedo con el lobo.
José María intentó huir de aquellos humanos, se los intentó quitar jalandoselo pero el padre le forcejeaba hasta que le dan otro sacón de aire al Lobito Lindo, y eso que el padre tenía mucha fuerza. No obstante, José no se quedó atrás, despertándose su instinto salvaje de lobo, debido al enojo. Con sus filosos colmillos, le muerde un brazo, hasta que, sin querer queriendo, se los encaja. Pero la madre, con el poder de la chancla, golpea al Lobito Lindo en la cabeza dejándolo inconsciente. Ah, pero el duende les cayó peor, puesto a que este se los friega y los logra a estos perros tirarlos al océano.
Cuando José María despertó, ya estaba en su cama acostado, se levanta y se dirige a la sala. Estando ahí, José María logra ver al chico en su casa, lo que le dio mucha alegría y entonces lo abraza fuerte y le da un besito.
José: ¡Samuel, estás aquí! ¡Creí que te iría a perder para siempre! -lo abraza y le da besitos-
Sam: Pues no, papá. :)
José: Je papá :)
Cristóbal: El Carlitos lo hizo por ti.
José: Gracias, Miniño Carlitos.
En fin, de ahí estuvieron muy alegres, estando en paz, aunque no por mucho, ya que los padres volvieron a buscar al Lobito Lindo para quitarle al hijo, el cual ocupaban en un asunto. Siendo así, estos perros se la pasaron rastreando.
José: Tú estás a salvo conmigo, nadie te irá a hacer daño :) -decía mientras lo tenía en brazos sentado en la sala de su casa-. Puede que sea un coñazo a veces, pero no seré malo con este niño, aunque otras veces se le tenga que reprender :)
Sam: Te quiero, papi uwu
José: También :3
Cristóbal: Veo que te encariñaste con el niño.
José: Sí, pero tú también alguien especial -besa al Lobito feo en una mejilla-.
Pero algo estaría por venir; hagamos un salto con que José María estaba paseando esta vez a solas con su hijo adoptivo, estando muy contento después del susto que tuvo.
José: ¿Quieres comer algo, hijo?
Sam: Mmm... Sí.
José: ¿Qué quieres comer?
Sam: No lo sé, dímelo tú.
José: Mmm... Vayamos a comer pescado ¿te parece?
Sam: Bien...
José: Jejeje
Estaban muy alegres, sin ningún problema, caminando por las calles de Donostia. Estaban completamente a gusto, lo que le dio un giro inesperado, convirtiendo esa felicidad en drama; ya que, en ese momento, vinieron los padres del chico con unos policías, acusando al Lobito Lindo de robo de menores.
ESTÁS LEYENDO
Yolosema: amor de canes (Yaoi furry, fanservise)
RandomEsta es la vida de Cristóbal, un lobo chileno que, a decisión de sus padres, se muda vivir a España. Este es un chico con Asperger, por lo es un chico antisocial e aislante. En ese país, este conoce a lo que más adelante sería el amor de su vida, qu...