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Mis pasos eran calculadores y veía hacia todas las direcciones, me sentía tan desconfiada en cualquier parte, después de que Luke me hubiera dicho sobre el tipo que quiere quitarme la cabeza si es necesario para que él le de lo que le debe. Apenas he podido dormir.

En mis diecisiete años nunca antes me imaginé en una situación igual, estando alerta de todo lo que pudiera ser sospechoso, no huyendo de un narcotraficante sumamente peligroso con el que mi platónico estaba envuelto.

Sí, por qué por más que el sea un mentiroso seguía siendo mi platónico, mi corazón se había encariñado rápidamente con él y no le importó saber que estaba saliendo con su mejor amigo mientras teníamos "algo" mucho menos le importará sabiendo que está metido en cosas graves y peligrosas.

Mi corazón siempre ha sido un estúpido en ese sentido, se enamoraba profundamente y no le importaba lo que en realidad era, mi corazón siempre vería a Luke como la primera vez que cruzamos miradas.

Había pasado una semana, Luke y yo no nos hemos topado desde esa última vez que hablamos y yo estaba bien con ello, era mejor verlo lo menos posible, pero como me había dicho, Violet estaba conmigo y Rachel en el instituto, Ashton nos llevaba a casa, Michael también era un apoyo y Calum nos cuidaba en casa. No salía de casa más que para cosas necesarias.

Y trataba que mis padres y Rachel hicieran lo mismo pero como algo predecible pero solo me limitaban a cambiarles el tema de conversación. Violet se mantenía a mi lado en silencio mientras veía y teclaba algo en su celular, teníamos una relación bastante compleja, no manteníamos conversación a menos de fuera necesario, así que en pocas palabras no nos dirigíamos la palabra en ningún momento del día.

Bueno hasta esta vez.

—Luke me ha dicho que quiere que lo veas en la biblioteca antes de salir de clases, tiene que decirte algo importante.

—¿Por qué no me lo ha dicho a mí?

—No quiere que nadie sepa de ello.

Asentí y me alejé de ella, faltaban una clase para llegar al final del día de hoy, quería que mis días fueran iguales a los anteriores, pero ahora con una preocupación en mi cabeza eso era casi imposible, en los entrenamientos no estaba del todo concentrada por estar pesando en toda esta situación y sobre la extraña plática que tuve con aquellos tres chicos, desde esa vez que hablamos no se han aparecido en mi camino y yo tampoco lo he hecho.

Aún me tenía aturdiada la idea de saber que alguien sabe lo que pasó con Jessica y Joe, nadie sabía de ello, ni siquiera mis padres, mucho menos Rachel. Nunca le conté ya que pensé que me odiaría por hacerla dejar a su antiguo novio.

Entré a el salón de física y busque un lugar libre para luego ocuparlo, no me sentía cómoda en ningún lugar pero creo que cualquiera en mi situación estaría igual...

Estar tranquila en una situación dónde quieren quitarte la cabeza por haberte enrollado con un tipo es imposible.

Movía mi pie con nerviosismo, el salón se llenó completamente y entonces la profesora inicio con su clase, no le estaba prestando atención en lo mínimo, sentía que en cualquier momento me volvería loca...

No había dormido absolutamente nada durante casi cuatro noches, los párpados me pasaban y mi cuerpo se sentía débil, la clase estaba haciendo que me durmiera, el silencio absoluto y el aire acondicionado no estaban ayudando en nada.

Así que cerré mis ojos y me deje llevar por el cansancio.

Abrí los ojos de golpe cuando escuché el sonido de la campana, todos estaban guardando sus cosas y se levantaban para salir del aula, hice lo mismo y me levanté de mi silla para irme de una vez, las clases habían terminado.

Me quedé esperando en el pasillo a qué todos salieran del instituto y antes de entrar a la biblioteca vi a todas direcciones para evitar que cualquier persona me viera, al verificar que lo había nadie en los pasillos, entre a la biblioteca y cerré la puerta después de que había entrado.

Luke estaba sentado sobre una mesa con un libro en manos, al escuchar mis pasos levantó la vista y dejó el libro a un lado, se bajó de la mesa para caminar a mí y me sonrió.

—Hola, por un momento pensé que no vendrías.

—Hola, ¿de qué es lo que quieres hablar?

—¿Así serán las cosas ahora entre nosotros?

—¿Así como, Luke?

—Simple...

—Tu hicistes que todo terminará así de simple.

—¿Cuántas veces tendré que decirte que lo siento y que no quería herirte, Mason?

—No tienes porque hacerlo, solo tienes que aceptar que así serán las cosas entre nosotros siempre.

—Madeline, te he dicho que te quiero. Eres demasiado importante para mí y todo lo que he hecho últimamente es con la intención de mantenerte a salvo.

—Y yo te he dicho que no te creo, ¿cuántas veces tendré que decirte eso, Luke?

—Dame otra oportunidad, te prometo hacer bien las cosas está vez.

—No habrá segundas oportunidades...

—Madeline...

—Luke.

Me vió y sonrió un poco, mi rostro se mantenía inexpresivo, solo quería que era lo que quería decirme para irme a casa y volver a la rutina de todos los malditos días.

—¿No me dirás nada? —no contesto—. De acuerdo me iré, solo me hiciste perder el tiempo.

Me giré para salir de la biblioteca e ir a el estacionamiento para irme con Ashton y Rachel pero mis planes se vieron interrumpidos por él, me había tomado de la mano impidiéndome caminar, de mala gana me gire para verlo, su rostro no me decía nada concreto, quise soltarme de su agarré pero él apretó un poco más pero no me lastimaba.

—Si no tienes nada que decirme me iré, tengo cosas que hacer...

Volvió a sonreírme y las ganas de querer golpearle la cara eran gigantes, pero cuando estaba por hacerlo él lo impidió, me acercó a él y me besó.

Sus labios se movían son suavidad sobre los míos, muy diferentes a los anteriores, este tenía otro sentimiento, sin poder evitarlo le seguí el beso, mis labios estaban de fiesta en ese momento y al parecer se había puesto muy a gusto, quería alejarlo de mí y golpearlo como la última vez, pero simplemente no lo hice, solo disfruté del momento.

Sus manos estaban en mi cintura y me apretaba a él, caminamos hasta que había chocado contra la mesa, hizo que me subiera a ella, abrí un poco las piernas y se puso en medio, el beso estaba exigiendo más y nuestros cuerpos también.

Pero lastimosamente todo tuvo que terminar, mi celular estaba sonando así que alejé a Luke de mí, él bufó y  maldijo un par de veces mientras se acomodaba el cabello y se paraba a mi lado. Era Rachel no alcance a contestar, así que me baje de la mesa, tomé mi mochila y antes de salir él hablo.

—¿También esto seguirá siendo así?

—¿A qué te refieres con esto? —abrí la puerta.

—Cuándo nos besamos, alguno de los dos tiene que irse...

Puse los ojos en blanco y sin decirle más salí de la biblioteca y corrí hasta el estacionamiento donde estaba Rachel esperándome con Ashton.

Perfecto Mentiroso | L.HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora