Perfecto Mentiroso | L.H

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Esta mañana me había despertado con los ánimos para arreglarme más que otros días, me había despertado más temprano de lo normal, me di una ducha como era de costumbre, planche mi cabello y lo deje suelto, esta vez si ocupe mis dos perforaciones en mis orejas, me puse un brazalete y me puse el uniforme.

La hora de marcharnos había llegado y antes de salir de mi habitación verifiqué que todo estuviera bien y debo de aceptar que hoy me veía muy bien.

Por primera vez aceptaba que me veía bien, me sentía bien conmigo misma, salí de mi habitación, bajé las escaleras y vi a Rachel terminando de desayunar y cuando me vio estaba boquiabierta.

—¡Oh Dios! —balbuceó— ¡Madeline estás bellísima!

Sonreí, satisfecha y feliz por el comentario que había recibido por mi hermana, el rostro de mi mamá también reflejaba sorpresa.

—Tu hermana tiene razón Madeline, te ves muy hermosa hoy.

—Gracias.

—¡Mamá como me gustaría verme todas las mañanas como Madeline! Ella es perfecta en todos los sentidos.

—Tu también eres perfecta en todos los sentidos Rachel, deberías de saberlo.

Ella me devolvió la sonrisa y moviendo sus labios supe que me había respondido con un gracias y yo le respondí de la misma manera un de nada.

Al llegar a el instituto todo parecía ir como de costumbre pero todo eso cambio cuando las miradas se concentraban en mí y no tenía la menor idea del porqué, ¿A caso era mi apariencia? Descarte eso al instante, no creo que mi apariencia tenga algo que ver.

Y confirmé eso cuando supe la razón de todo, vi sobre mi hombro encontrándome con el rubio, se veía impecable como siempre pero a comparación de otras veces él no estaba solo, y no eran sus amigos los que lo acompañaban.

Era una chica, él tenía su brazo izquierdo sobre el hombro de la chica caminando con ella sin prestar atención a nadie a su alrededor. Era alta, cabello rubio platinado, tenía un cara que parecía tallada por los mismísimos dioses. Portaba en informe igual de impecable que el rubio, que ambos parecían sacados de una pasarela, ellos nos pasaron a lado y cuando él pasaba a mi lado me vio sobre su hombro, sonrió y luego apartó su mirada para seguir caminando a lado de la rubia.

El rostro de Luke no decía nada de lo que en realidad era, tenía la cara de un chico bueno, uno amable y atento pero en estoy más que segura de que eso es una mentira y que detrás de todo eso solo hay una persona, burlona, egocéntrica e ignorante.

Su rostro engañaba de tal forma, que nadie creería todo eso de él, cualquier persona pensaría que era un buen chico si fuese la primera vez que lo vieses, y lo digo por qué eso fue lo que yo pensé la primera vez que lo vi.

Luke Hemmings era un perfecto mentiroso.

Junto a mi iba Katherine y ambas llevamos una bandeja de comida e íbamos en busca de una mesa afuera de la cafetería, ella iba platicando sobre el entrenamiento de hoy porqué mañana tendríamos un partido contra el instituto Colbey.

Así que ambos decidimos comprar algo ligero para que no nos afectará en la práctica de hoy, encontramos la mesa perfecta, que estaba vacía y sin esperar más nos dirigimos a ella, dejamos nuestra mochilas a un lado y las bandejas frente a nosotras.

La mañana había pasado demasiado rápida, que en un pestañeo nos encontrábamos comiendo el almuerzo.

Estábamos por comenzar a comer cuando dos brillantes cabelleras aparecieron en el campo de vista de todos, eran ellos de nuevo pero está vez iban acompañados de los amigos de Luke.

Calum, Ashton y Michael.

Solo conocía uno de ellos tres y ese era Calum, él me hablaba bien de los otros dos chicos y me decía que se llevaba más con Ashton y que era como un hermano para él.

Había escuchado muy poco de la chica, solo sabía que se llama Violet y que era alguien muy cercana a Luke y a su familia, pero nadie sabía más de ella ya que siempre ha sido muy reservada con sus asuntos personales.

—¿Sabes algo de ella? —le pregunté a Katherine de una forma muy vaga, mostrando desinterés.

—¿De Violet? —asentí—. Sé lo que todo mundo sabe, su nombre es Violet pero aún se desconoce su apellido, lleva en el instituto desde el primer año y nadie conoce su apellido, se dice que los profesores tienen prohibido decirlo, y también que era jugadora de soccer.

—¿Era?

—Si, hace un año que abandonó el equipo, nadie sabía la razón, pero el equipo había perdido a su jugadora estrella.

—¿Por qué no la había visto antes?

—Había salido de viaje días antes de que ustedes se aparecieran, pero como te dije tiene una vida muy privada que es casi confidencial.

—¿Por qué tanto secreto con el apellido? —ella alzó los hombros.

—Nadie sabe la razón, tampoco saben dónde vive o quienes son tus padres ya que la mayoría del tiempo está con Luke y él es quien se encarga de llevarla. Pero al igual que ella es muy cuidadoso en ese aspecto, es todo un misterio.

Volví mi mirada a dónde hace unos minutos ellos estaban parados, mi ceño se frunció, ¿por qué alguien tendría tanta confidencialidad por decir algo tan simple como su apellido?, ¿estará maldito y por eso no quiere que nadie lo sepa?

Rodé los ojos y volví a lo mío dejando a un lado lo que Katherine me decía hace unos minutos, el baile era este viernes, los pasillos estaban repletos de anuncios sobre él, sería aquí a las ocho de la noche y todos debían llevar disfraces.

Y como era de esperarse mi hermana no dejaba de insistir para que yo aceptará ir, pero no a obtenido respuesta de mi parte. Comía con tanta tranquilidad que junto cuando más personas se incorporaron a nuestra mesa casi me atragantaba con la manzana que comía.

—Señoritas —era la voz de Calum, bebí un poco de agua y luego levanté la mirada para encontrarme con él y otra persona más.

—Hola —murmuré, la garganta me ardía por estar ahogándome hace unos segundos con una manzana.

—Antes de hablar de cualquier otra cosa, quiero presentarles a mi amigo y hermano Ashton —con sus manos señaló al chico que estaba a su lado.

Sonreía muy poco, tenía una postura relajada y su rostro emanaba alegría por lo que ninguna de las dos pudimos evitar sonreír.

—Un gusto, Calum me habló de ustedes, en especial de ti —me señaló y sentí mis mejillas arder, su voz era muy pacífica.

—Mi nombre es Madeline y Calum también me habló mucho de ti, ella es mi amiga Katherine —señalé a la pelirroja a mi lado.

—Tu hermana Rachel también mencionó muchas cosas de ti, veo que eres una persona muy solicitada.

Reí un poco.

—Algo así —visualicé mejor al chico y me pude dar cuenta que la camisa que llevaba era diferente a la de Calum, esa es la camisa del equipo de béisbol—. ¿Juegas béisbol?

—Así es.

—Que genial, siempre había querido aprenderlo pero no fue lo mío así que opté por algo más sencillo como el voleibol.

—Yo no diría que el voleibol fuera lo más sencillo, de hecho siento que también es complicado, de niño estaba en un equipo de voleibol pero era una mierda, pero creo que es de cada uno.

Todos reímos y seguimos con la plática, Calum y Katherine ya se habían unido a la conversación hasta que salió el tema por el que Calum estaba aquí con Ashton.

Y era sobre el baile.

—¿Quieres ir al baile conmigo Madeline?

Sentía el calor en mis mejillas, también esas mariposas en el estómago que apenas pude articular la repuesta.

Iré al maldito baile con Calum Hood.