Perfecto Mentiroso | L.H

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—¿Que haces despierta tan temprano? —preguntó Rachel abostezando y caminando hasta mí.

—Me dió hambre así que me levanté para hacerme algo de comer.

—Por supuesto que debías de tener hambre anoche apenas y cenaste algo, parecías muy ansiosa en regresar a tu habitación, ¿a caso secuestraste a alguien y lo tienes en tu habitación? —se sentó a mi lado.

—No, ¿crees que soy capaz de hacer eso?

—No pero podría haber alguna probabilidad que sí.

—Tú también te has despertado temprano, ¿a qué se debe ese milagro?

—Me caí de la cama...—contuve una risa pero después de unos segundos no pude más—. ¿De que te ríes? Es algo serio Madeline.

—Perdón pero es inevitable no imaginar la forma tan graciosa que debiste de haberte caído de la cama.

—No fue gracioso, fue doloroso —tomó un trozo de manzana y se lo llevó a la boca.

—Eso era mío Rachel...

—Asher me envió un texto ayer —vaciló.

—¿Que te dijo?

—Nada interesante realmente, pregunto cómo estábamos y mencionó a Jessy un par de veces, la pobre aún no recupera la memoria y Joe la dejó, desde el principio supe que ese no era un buen tipo, que bueno que terminaste con él. Aunque se me hizo algo extraño saber que tu mejor amiga estaba saliendo con tu ex.

—Jessica y yo ya no somos mejores amigas, exactamente, ¿qué fue lo que te dijo Asher?

—Dijo que Jessica ha estado preguntando demasiado por ti, no tenía idea de que ya no eran amigas y por eso le di tu número —casi me ahogaba con la manzana.

—¿Qué hiciste qué?

—Le di tu número de teléfono pero en verdad no pensé que ya no eran amigas, lamento haberlo hecho, pero tú tampoco me dijiste acerca de tu ruptura con ella. Seguramente a Jessica no le tomé importancia...

Respiré profundo un par de veces y le di una sonrisa a Rachel dándole a entender de qué no pasaba nada, ella tenía razón no podía reclamarme pues ella no tenía conocimiento alguno de mi inexistente amistad con Jessica. Ella solo creía estar haciendo lo correcto.

—Vale, no te preocupes...

—En serio lo lamento Mads, no pensé que tú amistad con Jessica terminaría.

—Yo tampoco, el único amigo que tengo en Arizona es Nate y con él me conformó, pero también te tengo a ti, Katherine, Calum, Ashton, Miachel y a Luke y eso es suficiente para mí.

Sonrió y me dió un coto abrazo, para acomodarse en el sofá y ponerle el televisor.

—Hablando del rubio, ¿cómo van las cosas con él? ¿Sigues negando tus sentimientos por él?

—Pues...—fruncí los labios, Rachel parecía estar ansiosa por mi respuesta y antes de volver a decir algo la voz de nuestra madre interrumpió.

—Buenos días mis amores. ¿Qué hacen despiertas tan temprano en sábado?

—Teníamos hambre —le mostré las manzanas y ella sonrió.

—Les preparé el desayuno, por qué esas manzanas no serán suficientes.

Le correspondimos la sonrisa y después ella se fue de la sala para ir a la cocina, pensé que Rachel preguntaría más sobre el rubio pero me equivoqué ya que después de que mi madre se fuera ella se concentro en ver la televisión y yo hice lo mismo que ella.