𝑀𝑒𝑡𝑎𝑛𝑜𝑖𝑎

24

—Yo daba mi vida por él, todo lo que hacía era para él y por él. —habló Minho con voz baja —Sé que no está bien dejarse de la lado a uno mismo por alguien más, pero yo no pude evitarlo.
Teníamos tantos planes a futuro, todos nos envidiaban, yo me sentía amado y no tenía miedo de amar pero luego me dí cuenta de que estaba viviendo una farsa.

»Un día llegué a casa de su madre ya que había quedado en pasar por él. Cuando llegué su hermana me abrió y me dejó pasar pero no dió aviso de que yo había llegado. Me dirigí a la cocina y ahí lo escuché diciendo que yo le daba asco y que ya ni siquiera soportaba mi voz —terminó de decir Minho y peinó su cabello hacia atrás con sus manos.

—¿Y qué hiciste? —le pregunté mientras procesaba lo que me había contado.

—Yo solo me quedé ahí parado escuchándolo burlarse de mí y darme cuenta de que yo solo había sido su juguete por más de dos años. De un día para el otro mi vida cambió, yo cambié y caí en un pozo del cual no puedo ni quiero salir. —me respondió Minho —No te contaré con detalles pero yo estuve como muerto en vida, así me sentía. No quiero volver a arriesgarme y no lo digo por tí, lo digo por mí.

»No quiero que algún día mi voz vuelva a ser insoportable, no quiero volver a escuchar que no sirvo para nada, no quiero... No quiero volver a vivir, sentir y escuchar tantas cosas Han. —dijo Minho sentandose a mi lado y luego dándome un abrazo —No puedo controlar mis propios sentimientos menos los de los demás, no quiero que mi odio hacia mí siga creciendo por no poder ser suficiente para alguien.

—Pero podemos intentarlo y así te podré dar seguridad de que no me iré. Tú eres suficiente para mí Minho, eres lo único que quiero y necesito en mi vida. —le dije aún abrazado a él. Sorpresivamente el efecto de tanto alcohol se me estaba pasando poco a poco —No tenemos mucho tiempo de que nos conocimos pero tenemos mucha química y a pesar del poco tiempo te juro que no estoy exagerando cuando te digo que te necesito.

—No quiero volver a estar vulnerable, no quiero seguir siendo vulnerable. Yo no sé si pueda soportar algo como lo que me pasó otra vez...

—No tengas miedo, no tengamos miedo. Comencemos a vivir, a sentir, a ser valientes y no estemos pensando en cómo terminaremos, en dónde o cómo estaremos en un futuro ¿Si? —le dije alejándome y poniendo mis manos en sus mejillas —No tienes que huir y no lo digo por mí.

»Deja de huir de ti mismo, deja de ser tu mayor enemigo. Sal de la prisión en la que tu mismo te metiste, puedes ser libre si lo intentas. Eres hermoso por dentro y por fuera, no te condenes por alguien que nunca mereció tu amor.

—No sé cómo no escapar. No quiero escapar de tí pero no sé cómo no hacerlo —me dijo Minho rozando sus labios con los míos. —¿Quién te crees? Vienes a mi vida y la pones de cabeza como si nada. ¿No podías dejarme en la mierda en la que estaba y ya?

—¿Y tú quién te crees? Llegas y me haces sentir cosas que nunca antes, vienes y me haces sentir un miedo indescriptible, una sensación de necesidad inigualable. —le dije y nos dimos un lento beso —Quiero que me relates tu poesía toda la vida al oído, quiero que me uses como tú inspiración, quiero que dejes de estar escondido detrás de hojas de papel y le des paso a tu corazón.

—Yo no sé si pueda hacerlo.

—No lo sabrás si no lo intentas —le dije y Minho apretó un poco sus labios.

—No quiero volver a aferrarme y quedarme solo, no quiero seguir dando todo y no recibir nada. Quiero dejar de sentirme como un estúpido y que soy el hazme reír de todos. Hace mucho dejé ir esa idea de que alguien podría quererme  Han...

—Pero yo no me iré, yo no te dejaré solo. Yo te quiero como no tienes idea Minho, yo estoy dispuesto a dar todo de mí por ti ¿Tú estás dispuesto a dar todo de tí?

—Ya yo dí todo de mí una vez y no fué suficiente. Me quedé con un corazón echo trizas, una casa inundada en lágrimas, sueños destruidos y los cestos de basura llenos de fotos que tomé un día a esa persona, persona que decía amarme pero en cambio sentía asco cuando yo estaba a su lado. —habló Minho con sus ojos llenándose de lágrimas lentamente —Todo lo que un día fuí ahora no está. Dónde tú ves colores yo veo grises, dónde tú ves vida yo veo muerte, dónde tú ves positivismo yo veo lo contrario. Amaría no estar lleno de miedo, amaría poder quedarme, amarte, confiar, entregarte los pedazos dañados de lo que un día fué un corazón pero no sé si estoy preparado para eso.

»Estoy roto porque un día decidí ser vulnerable y solo terminé siendo un ser completamente despreciable.
No sé si es posible reparar a alguien que se encuentra bien lleno de cicatrices, no sé si podrás borrar mi mente y hacerme volver a creer en lo que en primera instancia me hizo estar en la mierda en la que estoy hoy, no sé si podré cambiar, no sé si podré dejar de ser un cobarde... No sé si merezco ser reparado por tí.

—No me importa que no tengamos la misma mentalidad, no me importa que veamos diferente el mundo, solo me importa el cómo me ves tú a mí —le dije y Minho sonrió.

—Te veo como un salvavidas pero no sé si será buena idea que me salves.

—No eres el único con miedo Minho, tú has cambiado muchas cosas en mí y estoy seguro que ya no podré volver a como antes. Tomemos riesgos —le dije —Olvida lo que sucedió por un momento, piensa en lo que sientes cuando estamos juntos, cuando reímos juntos, cuando nos vemos a los ojos, piensa en eso. El pasado que quede en el pasado. Tú si mereces ser reparado, mereces tomar valor y repararte a ti mismo, sal de la oscuridad en la que te permitiste entrar. ¿Por qué buscar que vuelva el Minho de antes? Ese estaba perfecto pero puede venir una versión mejorada de ti, más seguro y teniendo en claro que eres suficiente y alguien maravilloso.

—Cuando estoy contigo me siento mejor que cuando estuve con esa persona. Tus ojos me demuestran algo diferente... —dijo Minho y luego exhaló —Soy un estúpido, sabía que si abría la boca iba a caer por tí pero no le hice caso a mi cabeza.
Me hiciste sentir vivo cuando llegaste con mi libro en mano para que lo firmara. Me dejaste babeando por tí apenas te ví y cuando comenzaste a hablarme fué mi perdición.

—¿Por eso a mí sí me dirigiste la palabra y a las demás no? —le pregunté con una sonrisa y Minho asintió.

—No sé si te diste cuenta en ese momento pero yo no podía dejar de mirar tus labios.

—¿De verdad? No me dí cuenta, estaba muy nervioso en ese momento —le respondí soltando una risita y Minho me dió un beso en la frente.

—No quiero que vuelvas a llorar por mi culpa... A menos que sea de placer —dijo Minho y yo le dí un pequeño golpe en el hombro —Y por eso correré el riesgo e intentaré seguir lo que queda de mi corazón. ¿Quieres que demos vuelta a la página y comencemos de nuevo?

—¿En serio? —le pregunté emocionado y sentandome sobre mis rodillas frente a él.

—Hola chico lindo, soy Minho ¿Y tú? —dijo Minho y yo reí.

—Soy Han, tú también eres muy lindo —le respondí.

—Que lindo está el cielo hoy ¿Verdad? —me preguntó Minho mirando al techo, tonto.

—Estamos dentro de tu casa, no sabes cómo está el cielo en este momento —le dije riendo.

—Si lo que sea, bésame.

No sé quién te hizo tanto daño pero lo odio.

No mereces sentirte así cuando eres tan bueno.

Me quedaré contigo y juntos sanaremos tus heridas.

Antes no entendía cómo alguien podía darle tanta importancia a alguien que no la merece, antes no entendía cómo podíamos permitir ser heridos pero contigo estoy aprendiendo tantas cosas. Gracias a ti estoy aprendiendo cosas tan básicas como ser empático y ponerme en los zapatos del otro.

✧─── ˚｡⋆୨୧˚ ♡ ˚୨୧⋆｡˚───✧

Hola!! Perdón por estar tan inactiva, comenzaré a subir capítulos todos los días como antes 🙏🏻.

Gracias por el apoyo y los comentarios tan lindos, muchas muchas gracias.

Nos vemos en el próximo capítulo 💗.