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Esto es un martirio.

Cada que tengo que tomar unos papeles o carpetas Eunwoo las tira al suelo o las tira al otro lado de su oficina, pero eso no es lo peor, con eso puedo lidiar... Con lo que no puedo lidiar es con Minho.

Mientras ordeno facturas y respondo llamadas tengo mis pensamientos revueltos, no evito sentir decepción, no evito imaginarme lo peor, no evito recordar lo que Minho y yo en este tiempo hemos vivido.

¿Qué haré cuando lo vea a su estúpida cara?

¿Qué me dirá cuando venga a buscar a Eunwoo?

No entiendo bien por qué hace esto. ¡Se está perjudicando a él mismo! Eunwoo no le traerá nada bueno, nada positivo y él no lo entiende.

—¿Terminaste? ¿Por qué eres tan lento? —habló Eunwoo cuando entró a su oficina con una copa en la mano. —Ya es tarde, salgamos de aquí.

—No se preocupe, yo aquí acomodo todo y luego salgo —le respondí mientras hacía como si estuviera organizando algo.
No quería salir al mismo tiempo que él, de seguro Minho está allá en el bar o en el estacionamiento esperándolo.

—¿Cómo crees? No puedo darte más trabajo hoy, sería un mounstro —dijo Eunwoo actuando, como siempre lo hace —Vamonos ya.

No me quedó de otra que hacer lo que me pidió, tomé mis cosas y salí con Eunwoo detrás mío.
Él no dejará pasar su oportunidad de restregarme que tiene a Minho con él.

—¡Ahí está! Ven conmigo Han —chilló como una rata embobada y sin darme oportunidad a réplica me tomó del brazo y me llevó con él.

Tuve que disculparme como un millón de veces porque gracias a mí súper amado jefe empujé a muchas personas, lo que provocó que me miraran con cara de querer matarme.

—¡Minho! Ya te extrañaba.

Eunwoo se le tiró encima a Minho y ví como Minho rodeaba su cintura. No lo abrazó por completo y tampoco se notaba muy cómodo con la cercanía del otro.

Quería correr e irme de ahí pero no podía moverme, mis ojos estaban en Minho.

—¡Min Min! ¿Por qué no llevamos a Han a su casa? —habló Eunwoo más pegado a Minho que chicle.

—¡No! —dije saliendo de mi trance —Mi amigo ya está fuera esperándome. —al terminar de hablar salí corriendo del bar.

Obviamente no había ningún amigo fuera.

Tengo que ir hacia el lado contrario y tomar un taxi en el local de al lado, por la apuradera tomé el camino que no era. ¿Ahora cómo haré? Si vuelvo me toparé con Eunwoo y Minho, deben estar ahí en el estacionamiento.

Voy a tener que quedarme aquí escondido en la esquina hasta que ellos se dignen y se vayan.

Me senté en el suelo y ví mi reloj, son las dos de la madrugada y… Minho no trató de acercarse a mí, Minho no me dirigió la palabra, Minho actuó como si yo no fuera nadie para él, ¿Soy nadie para él?

Prefiero que llegue y me diga que se va a Dubai con Minho a que me siga torturando de esta manera.

¡Pero más tonto yo! ¡Él me lo dijo, él me lo advirtió! Al principio me lo dejó claro. Él ganó, me destruyó,me hizo darme cuenta que vivía en una fantasía estúpida y ahora todo me afecta, lo del presente, lo del pasado y hasta el futuro.

¿Cómo pude ser tan ingenuo?

Minho nunca me amará porque a pesar de todo el daño que esa perra le hizo él lo ama y lo que siempre ha buscado es que Eunwoo lo ame de la misma manera.

𝑀𝑒𝑡𝑎𝑛𝑜𝑖𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora