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En busca de la felicidad.

Me levanté como todo día, dejé a Callie durmiendo, me acerqué a Carol y Lori a ayudar con el desayuno, luego de comer le llevé a Callie.

-Iremos a ducharnos al rio- ella me miro.

-Esta bien.

-Toma la ropa que te pondrás y sigueme- saque una tenida de ropa que eran shorts y una polera, el calor era un asco, no quería sudar más con pantalones.

Fuimos al río con Callie, le lavé el cabello y jugué con ella un poco, tirandonos agua.

Luego nos secamos y pusimos la ropa, al llegar cerca de donde comenzaba el campamento sentí que varios me miraban, me sentí extraña, tal vez la pinta de la ropa que me puse.

Callie salió corriendo de mi lado y la mire mientras se acercaba corriendo a un hombre alto, cabello un poco largo y barba de días, él se agacho a su altura y por el impacto del cuerpo de Callie ambos cayeron al suelo.

-¡Papá!- grito Callie llorando, me quedé estática, sentí que el mundo se paralizaba a mi alrededor, tenía los ojos abiertos pero no lograba ver nada, ni siquiera podía pestañear. Pasaron unos segundos y logré pestañear, sentí húmeda mis mejillas y caí en la cuenta que estaba llorando sin darme cuenta, pestañee y mire la escena de mi padre y mi hermana, detrás de el a pocos metros estaba Daryl, mis ojos chocaron con los de él, él me hizo una seña hacia mi familia para que reaccionara. Me acerqué lentamente, ni me fijé en las miradas que tenía en mi.

Al llegar mi padre se había levantado, Callie estaba a su lado y me sonreía con lágrimas aún rodando por sus mejillas, levante mi mano y toqué su pecho, no podía creer que estuviera ahí.

-Soy real- di un respingo al escuchar su voz, lo mire, levantó su mano hacia mi mejilla y la acaricio- estoy aquí, las encontre- en un segundo me abalance a abrazarlo.

-Dios estas aquí...- susurre abrazandolo con todas mis fuerzas, sin querer se me quebró la voz- estas aquí... estas vivo- llore en su pecho. Senti sus labios en mi cabeza y a Callie unirse a nuestro abrazo a mi lado.

-Estoy aquí, ustedes están bien, las encontré , no las volveré a perder lo prometo- sentir un abrazo de papá me hizo caer en cuenta de todo lo que había perdido antes, lloré como una niña en sus brazos hasta que ya no tuve más lágrimas que sacar.

No sabía cuánto tiempo llevábamos así cuando me separé, todos habían seguido haciendo sus trabajos, algunos miraban de reojo hacia nosotros, solo Daryl que seguía a unos metros seguia de pie mirándonos.

-¿Como...?- lo mire y el suspiro.

-Logre escapar de la Horda, quise volver por ustedes pero tuve que rodearlos y perderlos en el bosque, cuando llegue cerca de donde las había perdido de vista no encontré ningún rastro contundente que me dijera hacia donde corrieron. Así que vage por el bosque sin rumbo fijo hasta que ayer me encontré con Daryl- nos giramos los tres hacia el cazador, ahí recién me fije en el venado que había a sus pies.

-Tu padre me ayudó a cazarlo- me dijo leyendo mi mente, sin siquiera pensarlo mucho, me separé de papá y avancé hacia él, sin que nos diera tiempo a ninguno de los dos de reaccionar por lo que hacía mi cuerpo, lo abrace.

-Gracias...- susurre, sentía su incomodidad, así que me separé de él, y por instinto besé su mejilla- me alegra que llegaras a salvo tu tambien- el hizo una mueca y yo me aleje unos paso, mire a papá- tengo que revisarte, ver si estás herido, tienes que comer algo e irás a descansar- el río y lo mire frunciendo el seño.

You Must Survive.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora