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Al principio de la tragedia.

-¡Esa puerta está abierta!- me grito Ty apuntando hacia la que habíamos cerrado cuando tomamos la prision, así que todos los caminantes que habíamos dejado encerrados estaban saliendo, por todos lados veía caminantes y disparaba, me estaba desesperando el echo de haber perdido a Callie de vista en cuanto el caos comenzó.

-¡Callie!- quise avanzar pero había muchos.

-¡Bri la reja!- dijo Ty- ¡Vamos!- dispare y lo seguí, en un momento un maldito caminante me tomó desprevenida y caí al suelo con el, le di una patada para poder safarme y saqué mi cuchillo para enterrarlo en su craneo- ¡AAAHH!- me gire para ver justo cuando Ty cerraba la reja y un caminante a su espalda le mordía el hombro.

-¡NOO!- grite, Ty se zafó de él y le disparó quedándose sin balas, venían muchos más, así que abrí la puerta cercana- ¡Ty!- el corrió como pudo hacia mi, entramos y corrimos dentro, adentrándonos entre los pasillos oscuros e interminables- Ty necesito verte.

-Estoy bien- dijo tambaleándose, en eso una alarma comenzó a sonar demasiado fuerte.

-¿Y eso?- dije asustada.

-La conexión con el bloque C debe estar por aquí, debemos pasar por los generadores de energía, vamos- siguió caminando.

-¡Ty por favor déjame verte!

-No esperare aquí la muerte, no si puedo llevarte a salvo hasta los demás- hablo haciendo esfuerzo, en eso escuchamos unos gruñidos detrás, los malditos se acercaban.

-Ty por favor- dije exasperada cada vez más - ¡no puedo perderte! ¡Somos amigos! ¿Recuerdas?

-Si el plan de Dios es este que así sea- dijo él sin detenerse- tengo que sacarte de aquí- me miro y siguió- por que somos amigos es que no debo morir aún.

-Déjame ayudarte al menos- dije tomándolo del brazo antes de que cayera al piso, estaba desangrándose y me sentía frustrada, caminamos varios metros hasta que dos caminantes aparecieron frente a nosotros, levanté mi arma y quise disparar pero no tenía balas- ¡Mierda! Retrocede vamos- dije tratando de que viniera conmigo pero se separó de mi.

-Estamos cerca, Corre, ¡AHORA!- me grito para abalanzarse él sin armas hacia los caminantes.

-¡TY!- llore sin saber que hacer.

-¡Yo ya estoy muerto! ¡CORRE!- quise golpearme por lo que hacía pero mis piernas comenzaron a correr, mientras a mis espaldas escuchaba los últimos gritos de Ty, mi vista se nublaba por las lágrimas y a la vez intentaba mantener la cabeza fría para salir de ahí con vida, en la cabeza me retumbaba el sonido de la alarma.

Doble una esquina corriendo encontrándome de frente con uno, forcejeamos un poco y escuche el sonido de un cuchillo caerse de mi cinturón, logré pegarle una patada y saqué el otro para apuñalarlo, pero cuando quise sacarlo de su putrefacto craneo este parecía atorado, me exasperé y forcejeé, en eso escuche unos gruñidos y apareció otro, tome el que se cayo al suelo pero antes de darme vuelta completa el se abalanzó sobre mí y en una caída mal me enterré mi propio cuchillo a un costado, gruñí de dolor pero no podía pararme un segundo por que tenía un maldito caminante encima, con mucho esfuerzo logré quitarlo de encima, tome el cuchillo que estaba en el cráneo aún y con poca fuerza enterré el cuchillo, pero justó sentí un pequeño mareo y termine fallando, demonios, sus garras no me dejaron acercarme a tratar de tomar el cuchillo otra vez, así que me levante como pude y trate de correr.

Respiraba de manera corta y superficial, el costado me dolía, pero sabía que si sacaba el cuchillo podría desangrarme más rápido, ya que sangraba de igual manera. Escuche varios gruñidos no tan lejos y camine lo más rápido que pude lejos de ahí, me sentí mareada, estaba sudando, y bastaron unos minutos esforzándome para comenzar a marearme, debía encontrar una salida. Escuche gruñidos ahora también de frente, no veía nada y tantee la pared en busca de algo, mis manos tocaron lo que era una puerta y la abrí rápido para encerrarme dentro. Era un cuarto muy pequeño, sentí una pequeña estantería y supuse que era un armario de limpieza. Los gruñidos se escucharon ahora al otro lado de la puerta, mierda mierda mierda, no estaba bien, seguía perdiendo un poco de sangre y no tenía nada con lo que hacer presión, además que me dolía a mares y ni siquiera respiraba bien, me aferré a la manilla de la puerta con las pocas fuerzas que me quedaban, esperaba que los caminantes no olieran mi sangre e intentarán abrir la puerta, no lo soportaría.

Hubieron unos pequeños golpes como si hubieran chocado con la puerta, iba a tomar mi cuchillo y recordé que ya no tenía mas, mierda... en caso de... tendría que sacar el cuchillo incrustado en mi costado para poder defenderme... maldición...

No sé cuánto tiempo paso, pero ya me sentía bastante ida y tenía una mediana poza de sangre debajo de mi, pero aun seguía escuchando gruñidos al otro lado de la puerta, los hijos de perra están oliéndome mientras me desangro y esperan por mi...

Me acomode en silencio y como pude para sentarme, quise gritar de dolor cuando solo quise tocar el mando del cuchillo levemente y sentí un dolor horrible, mordí mi labio, si alguien no me encontraba pronto moriría seguramente, me desmayaría y esos bastardos me encontrarían y comerían.

Comencé a escuchar gruñidos como si estuviera debajo del agua, y sabía que en realidad... se debía a la pérdida de sangre... solo me quede quieta, sentía mi cuerpo ido, sin fuerzas ni para mantener los ojos abiertos, en trance...

You Must Survive.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora