CAPITULO 21: "Secretos"

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Jasper Pov

Los días pasaban y Tanya y yo nos hicimos muy amigos, pero no había pasado de eso, eran preguntas inocentes y hablábamos de trivialidades, Alice ni se paraba por aquí más que para dormir, salía diario a quién sabe dónde, no me quería contar nada y yo me estaba hartando de ser el idiota que se quedaba a esperarla, ¿Qué tan malo podía ser que no podía contarme? Así que ese día finalmente hablaría con ella, o hablábamos o nos separábamos, sencillamente había llegado a ese punto.

-Alice tenemos que hablar.-dije tajante, ella me miro sin importarle.

-Mañana, ahora estoy cansada.-dijo pasándome de largo.

-No, Alice. Mañana no. Ahora mismo.

-Ya te dije que no.-dijo girándose a verme fijamente.

-Y yo te digo que sí.

-No quiero hablar ahora.

-Bien entonces simplemente te diré lo que tengo para decir.

-Di lo que quieras.-dijo indiferente.

-Me regreso a Forks.-dije serio, eso no era verdad pero necesitaba llamar su atención y lo conseguí porque se giró a verme sorprendida.

-¿Qué?

-Como lo oyes. Si decidí acompañarte fue porque creí que pasaríamos algo de tiempo juntos antes de tal vez formalizar esto pero ahora me doy cuenta que vine a encerrarme en el hotel mientras tu andas perdida en la ciudad y no puedo preguntar nada porque te enojas como si te hubiera ofendido y sinceramente estoy harto.

-¿De qué se trata esto? ¿Piensas dejarme?-pregunto enojada.

-Sí.-dije mirándola a los ojos, esperando ver algún sentimiento ahí pero no, nada. No había ni una pizca de tristeza en su mirada, en serio le valía si me quedaba o me iba.

-Pues vete, si es lo que quieres. Pero cuando te des cuenta de que me perdiste no pienses en volver porque yo no te pienso esperar.-dijo altiva.

-No pienso volver.-dije y me pase directamente a mi habitación para recoger mis cosas, metí todo en una maleta y luego volví para recoger mi computadora y otros aparatos.-Pagaré el hotel hasta el sábado.-dije viendo como ella seguía mirándome sin emoción y salí de ahí.

Maldito el momento en que me enamore de Alice Cullen. Fui a quedarme en otro hotel de la ciudad, ya instalado en mi habitación decidí hablar un rato con Tanya, generalmente hablábamos en las noches. Saque mi computadora y me di cuenta que no era la mía, está no tenía clave y al entrar no tenía ninguno de mis documentos.

Me había equivocado con la de Alice, suspire le llamaría para explicarle pero lo haría mañana, ahora decidí usarla para entrar a mi cuenta, pero al entrar a Facebook me topé con la cuenta de Alice abierta, no quería entrometerme e iba a cerrarla cuando de pronto la conversación con otro chico apareció a la vista.

"Hola hermosa, te extraño ¿Cómo estás?"

Era un tal Jacob Black, empecé a leer la conversación y me topé con grandes sorpresas, Alice no era la dulce chica que creí conocer, era alguien totalmente diferente, estaba con ese chico y conmigo al mismo tiempo.

"¿Estás ahí?"

No respondí nada, pero quise saber que otros secretos tenía Alice así que busque en sus cosas, era casi como entrometerme pero ahora no podía confiar en ella. Me topé con conversaciones realmente interesantes con otro hombre, no era otra conquista era más bien alguien con quien negociaba un diamante llamado "Estrella Rosa" hablaban de cifras enormes de dinero, al parecer ella le vendería la joya y él le pagaría muy bien, no sabía qué era eso pero sonaba malo pues decía que acababa de conseguirlo y que debía deshacerse de él lo antes posible sino todo se iría al infierno, esto era malo.

el profesor cullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora