CAPITULO 9: "Rota"

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Bella Pov

Durante el resto de la noche no pude dormir, él no contesto mi mensaje y eso solo empeoraba las cosas, no podía parar de hacerme preguntas, ¿Qué estarían haciendo? ¿La habría llevado a su apartamento? ¿Le habría hecho el amor en la misma cama en la que me entregue a él? Todas esas y más preguntas golpeaban mi mente y quería dejar de pensar, no quería ser masoquista pero el dolor estaba ahí y no había nada que pudiera hacer para remediarlo.

Al día siguiente mis ojos estaban un poco hinchados, sí, había sucumbido al dolor y me había permitido soltar algunas lágrimas, pero no iba a dejarlo ver que había sufrido por ello, aunque tal vez él sería tan hipócrita que seguiría como si ayer no hubiera tenido una cita, eso me hizo enojar, prefería que me dijera que se terminaba a que me dijera alguna mentira, odiaba que la gente jugara conmigo y yo no había aceptado una relación abierta así que al diablo, si él no terminaba esto, lo haría yo.

Hice toda mi rutina normal, pero hoy me maquille un poco más para que mis ojeras no se notaran, fui a la escuela totalmente tranquila, ya me había liberado con llorar por algo que ni siquiera tenía definido, iba preparada para acabar con esto. Llegue a la escuela y no me permití buscar su auto, pase de largo y fui con mis amigas, poniendo mi mejor sonrisa, hoy por fin el amado viernes había llegado y nosotras teníamos grandes planes para mañana así que hoy tal vez iríamos a la casa de Rose pues ella había conseguido los disfraces de todas.

-Belli ¿lista para mañana?-dijo Tanya sonriente.

-Más que lista.-dije con una gran sonrisa, quería una noche divertida y alocada, por primera vez no sería la única tranquila del grupo.

-Genial. Entonces ¿vamos a mi casa después de clases?-pregunto Rose, dándome una mirada de ¿Puedes? Ella sabía de mi trato así que tal vez por eso preguntaba.

-Claro.-dije segura, ella frunció un poco el ceño pero luego sonrió dejándolo pasar.

Fuimos directo a clases y Tanya y yo pasamos la clase entera hablando de mañana, bueno ella hablaba, yo escuchaba y sonreía ante sus locuras. Luego a Biología y luego a mi propio infierno, Literatura. No sabía porque justo ahora me temblaban las piernas y temía más que nada verlo a la cara, pero puse mis nervios de lado, podía hacerlo, él se había equivocado, no yo y no iba a temer nada. Todas nos sentamos en nuestros lugares y él entro poco después, guapo y arrebatadoramente sexy, quería mirarlo y besarlo pero no podía, no dejaría que volviera a lastimarme.

-Buenos días.-dijo con un tono serio que tomo por sorpresa a todas, yo no respondí, el resto de las chicas lo hicieron, Rose me miro extraño y yo solo levante los hombros como restándole importancia, me obligue a no perderme en su voz o sus ojos, puse total atención al tema, nada más, él se notaba serio pero no me importaba, ya no más.

Cuando la clase termino, salí antes que todas, no quería hablarle, no aun. Rose logro alcanzarme y me miro sorprendida, me tomo de la mano y me llevo fuera hasta las gradas, no quería hablar pero con Rose esa excusa no serviría.

-Quiero una explicación Isabella, así que habla.

-No es nada importante Rose.

-Claro que sí, tú aunque quieras poner esa falsa sonrisa, se nota que vienes de un ánimo horrible y él que siempre viene sonriente, llego más que molesto. ¿Qué paso? ¿Te hizo algo malo?

-No me hizo nada, bueno...

-¿Qué paso?-repitió alterada.

-Ayer lo vi cenando con otra en un restaurante cuando fui a cenar con mis padres.-dije sin querer decir más.

el profesor cullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora