Serendipity [✔]

Capitulo 16

¿Alicia?

Park

La noche calló antes de haberme dado cuenta, mi respiración se acoplaba y el dolor en mi cuerpo cada vez era menor, la siesta se había extendido, mordí mis labios con una sonrisa tonta. Seguro que Selena debe estar muy sorprendida, no quería comportarme como un tonto, pero eso no estaba en mis manos, su sonrisa es lo único en lo que pensaba ahora, ella es lo único que me hace querer intentarlo.

― Habla Greenberg.

Acomode mi sudadera, caminaba por los pasillos con una pajilla en los labios.

― Te tengo una sorpresa, Narci.

― Hoy no tengo ganas.

Terminaré matándome si conduzco en este estado.

― Ni siquiera te digo que es, y ya estás con tu cara de culo.

― ¿Cómo estás tan seguro?

Río a través de la línea.

― Siempre la tienes, amigo.

Mal parido.

― Imbécil, habla rápido que no tengo tiempo.

― Me lo suponía. ―Suspiro, sacando todo el aire de sus pulmones― Estamos en una fiesta con las demás universidades, nos preguntábamos...

― No me gustan esas mierdas.

Aleje el móvil de mi oído antes de que hablara.

― La chica gata está aquí.

¿Sel?

― Déjate de jaladas.

Ella no iría a fiestas de ese tipo.

― Y no está sola. ―Rio.

Mi mandíbula se tensó, pase las manos sobre mi cabello, trataba de pensar con claridad, no creo que lo que está saliendo de sus labios sea verdad.

― Averigüé con quién está.

No, no creo que esté sea otro juego de Greenberg.

― Se llama Charlie.

Y la poca tranquilidad que tenía se fue a la mierda.

― ¿Dónde estás? ―Tome las llaves de la moto, prendiéndola salvajemente.

― ¿Vendrás?

Maldita sea.

― ¿¡Dónde mierda, estás!? ―Dije al filo de la cordura.

― En el sitio de siempre, donde te liaste con Suzi.

Mis dientes rechinaron, acelere y me introduje en el carril donde predominaban los autos, pase de ellos como si de un juego se tratara ¿Qué se supone que estaba haciendo? Pensé que no le interesaban ese tipo de lugares ¿y ahora va con alguien más? Con el puto niño que no deja de mirarla con esos gigantes ojos llenos de brillo. No le conozco, pero si reconozco la mirada de un chico locamente enamorado y para él, ella es como un gran descubrimiento en su patética vida. La luz yacía en amarillo, apreté el acelerador con fuerza, pasándola en un segundo. Las señales son molestas, por eso todos buscan pasar de ellas, aunque eso no haga más que lastimarte, y eso es pura decisión tuya. No me satisface saber que pude haber hecho algo al respecto, equivocarme, pero esa fue mi decisión, decisión que hace la diferencia. Porque quien la tomó fui yo.

Me detuve ante el camino que llevaba al acantilado, había muchos autos y motos mal estacionados, no podía tumbarlos y pasar sobre ellos, las personas eran como hormigas, y entre todo ese gentilicio está mi Alicia.