Capítulo XX

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Yue y Katara ya llevaban tiempo en el oasis cuidando de los gemelos. Yue quería ir por ayuda pero Katara insistía en que ella era capaz de cuidar de ambos, lo que ninguna espero era que Zuko que estaba infiltrado en la ciudad llegó a donde ellas estaban buscando a los Avatares. Cuando atacó, Katara comenzó a luchar con él mientras que Yue fue a despertar a su amiga.

- Lyng despierta te necesitamos - dijo sacudiéndola pero la Avatar no reaccionaba - ¿Lyng?

La puso boca arriba para tocarla y cayó en la cuenta de que esta helada y a penas respiraba.

- ¡Katara! ¡Lyng no despierta! ¡Casi no respira! - con esas palabras Zuko se distrajo para ver a su antigua amiga, Katara aprovecho eso para congelarlo en un tempano para luego ir con su amiga.

- Lyng, Lyng despierta - dijo dando palmadas en el rostro de su amiga.

- ¿Estará bien? - preguntó Yue intentando contener las lágrimas.

- Busca ayuda, yo la cuido - dijo y Yue se fue corriendo - Lyng, vamos despierta.

Empezó a usar sus poderes curativos para ver lo que le pasaba pero nada de lo que hacía funcionaba, llegó el amanecer y Zuko pudo liberarse del bloque en el que Katara lo aprisionó para luego atacarla y en un intento de defenderse terminó chocando contra un poste perdiendo el conocimiento.

- Aléjate de ella - dijo antes de correr al Lyng para revisarla, tal como dijo la princesa estaba helada.

De inmediato tomó sus manos y empezó a calentarlas esperando algún cambio, pero nada. Intento lo mismo tomando su rostro, pero solo logró el mismo resultado, allí Zuko supo que lo que le pasaba no tenía nada que ver con el exterior. Así que como último recurso unió su labios para transmitirle su calor, al separarse ella comenzó a toser con dificultad para luego volver a caer inconsciente.

- Tranquila, descansa un poco - dijo recostándola en el césped para luego acercarse a Aang - volveré por ti.

***

Cuando Katara recupero el conocimiento de inmediato fue a ver a Lyng, al tocarla suspiró aliviada al ver que su temperatura volvió a ser la de antes. Pero luego notó que Aang no estaba con ellos, Lyng abrió los ojos y se sentó poco a poco con la ayuda de Katara quien le dijo lo que pasó. Al poco tiempo llegaron Sokka y Yue quien fue a abrazar a su amiga al verla bien, luego todos fueron a la Tundra en busca de Aang y Zuko mientras que Lyng intentaba recordar que fue lo que pasó mientras estaba dormida.

- Dudo que el príncipe Zuko pueda escapar con este clima - dijo Yue intentando animar a su amiga.

- Lo que me preocupa es lo que pueda pasarle, esta fuera de su elemento... - dijo y ante la mirada confundida de los hermanos habló rápidamente - si no lo encontramos no podremos encontrar a Aang.

- Si algo sabemos de Zuko gracias a ti es que es un sobreviviente - dijo Sokka pero luego se le ocurrió una idea - un momento, tú conoces a los maestros fuego mejor que nadie... ¿Sabes lo que pudo hacer?

- Teniendo en cuenta de que necesita mantenerse cálido, en donde sea que esté debe haber creado una fogata... tengo una teoría - dijo tomando las riendas de Mimmi para aterrizar, una vez allí se quitó los guantes para apartar la nieve y tocar el suelo, al hacerlo se concentro y a unos kilómetros de donde estaba percibió una fuente de calor - los encontré.

Volvió a subir y fueron en búsqueda de Aang, cuando estaban por llegar vieron una luz ir en dirección a donde Lyng quería ir. Sabia que su hermano estaba volviendo al mundo de los humanos, así que hizo que Mimmi fuera más rápido. Al llegar, vio como Zuko tenía a su hermano como rehén aterrizaron y antes de que Lyng hiciera algo, Katara atacó a Zuko. De inmediato fue a su hermano con Sokka para liberarlo y luego ver a Zuko, seguía con vida.

Los últimos maestros del aire (SA 1º)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora