- Oh, miren es por allá - dijo Aang sabiendo lo que tuve y nos dirigimos en esa dirección.
- Ya hicimos una para ayer ¿No deberíamos viajar un poco más antes de acampar?
- Estoy de acuerdo con eso Sokka, pero los bisontes se cansan demasiado cuando vuelan y llevan a más de uno... y más si es una persona tan irritable como tú - dije señalándolo antes de ver al océano viendo lo que vinimos a buscar - bueno hermano menor, allí tienes al elefante koi.
Asintió antes de quitarse la ropa y saltar al agua para nadar al elefante Koi y montarlo. Al principio todo iba bien y a Katara parece que le gusta mi hermano hasta que desvió la vista por un momento...
- ¡No Appa! ¡No comas eso! - me di la vuelta y vi lo que ambos bisontes intentaron comer.
- ¡Mimmi escúpelo! - grité corriendo en su dirección y tras hacerle cosquillas en la garganta lo escupió, Katara hizo lo mismo con Appa - gracias a los espíritus llegamos a tiempo.
- Volveré a ver si algo les pasa - dijo volviendo a la playa mientras yo me quedé con los bisontes, pero los gritos de Katara y Sokka me pusieron alerta y tras tomar mi bastón volví a la playa - ¡Aang sal de agua!
- ¿Qué pasa? - pregunté viendo como mi hermano estaba en el agua y de repente una especie de aleta salió a la superficie cerca de él - ya veo... ¡Aang, vuelve!
Al ver lo que había detrás de él empezó a correr encima del agua hacia donde estábamos, extendí mis brazos para recibirlo pero por en realidad corrió en dirección a Sokka y ambos se estrellaron contra un árbol. Aang de inmediato se incorporó y empezó a vestirse, todos estuvimos de acuerdo en que debíamos irnos pero nos emboscaron y nos llevaron a quien sabe donde.
Cuando nos dejaron ver estábamos en un pueblo rodeados de mujeres con vestimenta de guerreros y algunas personas.
- ¿Quién eres tú? ¿Dónde están los hombres que nos emboscaron? - preguntó Sokka.
- No fueron hombre nosotras te emboscamos... ahora dígannos quienes son y qué hacen aquí - dijo una de ellas.
- Es imposible que... - empezó a decir Sokka pero pisé su pie obligándolo a callarse.
- De verdad lo sentimos, es mi culpa... quise montar al elefante koi, no quisimos causar molestias - dijo Aang.
- ¿Cómo sabemos que no son espías de la Nación del Fuego? Kyoshi se alejó de la guerra hace mucho tiempo y pensamos seguir así - dijo el que parece el alcalde.
- ¿Está isla lleva el nombre de Kyoshi? - pregunté con una sonrisa - mi hermano y yo conocemos a Kyoshi.
- ¿Cómo podrían conocerla? Avatar Kyoshi nació hace 400 años, lleva siglos muerta - dijo señalando la estatua a la cuál nos tenían atados.
- La conocemos porque nosotros somos los Avatares - dijo mi hermano guiñándome un ojo y asentí.
Esto será interesante
Ambos saltamos usando aire control para pasar por encima de la estatua y caer frente al pueblo, mi hermano creo una esfera de aire y me la lanzó la cuál hice girar en mi manos antes de lanzarla al cielo y empezar a usar tierra control dejándolos a todos impactados.
- Es verdad ustedes son los Avatares - dijo el alcalde y Aang empezó a jugar con sus canicas logrando que todos en el pueblo celebraran y que unos hiciera movimientos raros antes de desmayarse.
***
Al día siguiente decidí ir a las afueras para practicar los elementos, empecé primero con la tierra control y todo iba genial hasta que unos chicos del pueblo empezaron a coquetear conmigo. Lo pasé desapercibido al principio dado que estábamos en un pueblo que sabe como tratar a un Avatar, pero luego uno de ellos se quiso pasar de la raya así que lo dejé congelado en un árbol.
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Los últimos maestros del aire (SA 1º)
FanfictionHace más de 100 años, las 4 naciones: Agua, Tierra, la nación del fuego y los nómadas del Aire vivían en completa armonía. Todos los maestros estaban en contacto con su elemento natural. Pero había una persona que era capaz de controlar los cuatro e...