Capítulo XXXVIII

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Al llegar al salón ganamos la atención de muchos invitados pero los ignoramos y nos internamos entre el público hasta llegar a donde estaban Piandao y Shen. En ningún momento me separe de mi primo, ni siquiera cuando vi que llego la familia de Ozai y la de Mai, en ese momento decidí no separarme de Shen dado que Zuko no dejaba de ver mi máscara.

Al estar cansada de que me viera así fui al balcón diciéndole a Shen que quería tomar aire fresco, una vez allí me quedé viendo la luna. Pensando en mi hermano y mi mejor amiga de la tribu agua, se que ella hizo lo correcto al dar su vida para ser el espíritu de la luna y se que en estos momentos debe estar cuidándonos desde el cielo.

- Vas a congelarte aquí afuera - dijo una voz conocida.

- Como si te importara - dije cortante y vi como se puso a mi lado - ¿Puedo ayudarte en algo?

- Quiero saber ¿Cómo estás? Me sorprende que no tengas algún vendaje.

- Y a mí me sorprende que después de sobrevivir a la explosión de tu nave no hayas quedado con cicatrices ni moretones - ante esas palabras comprendió todo - me quedó una cicatriz por la intensidad del fuego, mis poderes no pueden arreglar eso.

- ¿Y lo demás?

- Deja de actuar así... deja de actuar como si de verdad te importara.

- No actúo, de verdad me importas.

- De ser así me hubieras dicho la verdad sobre Mai y mi hermano seguiría vivo - dije antes de querer irme, digo querer dado que a penas di dos pasos sujetó mi mano - suéltame Zuko.

- Quiero que me muestres... muéstrame la cicatriz.

- No creo que eso sea de tu incumbencia.

- Solo hazlo, no pierdes nada - con esas palabras suspiré antes de quitarme la máscara - ¿Qué le pasó a tu ojo?

- ¿No te preguntaste por qué la amiga maestra tierra de Aang tenía los ojos así? - pregunté señalando mi ojo, negó confundido - es porque ella es ciega.

- ¿Acaso...?

- Sí Zuko, perdí la visión de mi ojo gracias a tu padre - dije antes de volver a la fiesta no sin antes ponerme la máscara.

- Lyng quiero presentarte a algunos de mis amigos - dijo Ty Lee apareciendo de la nada para arrastrarme.

- Dudo que les agrade - nos detuvimos al ver a Mai frente a nosotras - no estoy de humor para tu actitud Mai.

- Mi madre me obliga a traerte esto dado que tu familia es la anfitriona de esta fiesta - dijo extendiendo un vaso con jugo en el interior, lo miré con desconfianza.

- Si Lyng no lo acepta yo sí - dijo Ty queriendo tomar el vaso pero Mai le dio otro.

- Toma este, el de Lyng contiene fruta dragón y ya sabes que eres alérgica - dijo antes de dirigirse a mí - vamos, acéptalo.

- Lyng no seas descortés - iba a negarme pero me dio una mirada tierna y lo acepte, a nuestro lado pasó un mesero y tomó un vaso que llevaba.

- Un brindis, por la llegada de la Avatar y su nueva vida - dijo alzando su vaso y nosotras hicimos lo mismo antes de tomar un trago de la bebida.

***

Al día siguiente Shen, Ty Lee y yo fuimos a dar un paseo en Mimmi al atardecer. Desde que tengo memoria, siempre que veía el atardecer y sentí la luz del sol en mi piel tenía más energía y me sentía mucho más viva. 

- Es tan hermoso - dijo Ty mirando el sol ocultarse.

- ¿Crees que ya estamos a buena altura? - preguntó Shen y miré abajo.

Los últimos maestros del aire (SA 1º)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora