𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 ➵ 𝐒𝐭𝐚𝐧𝐝𝐚 ❣

𝐓𝐞 𝐩𝐫𝐨𝐭𝐞𝐠𝐞𝐫𝐞

(No hay Vengadores)

Una castaña salía de su trabajo, se había quedado hasta tarde limpiando y acomodando las mesas para el día siguiente.

Al salir una gran oleada de frío hizo que se pusiera el abrigo que llevaba. La calle estaba vacía solo veía como algunos autos pasaban.

No importaba debía llegar a casa lo antes posible, debió caminar algunas calles hasta que se topo con un grupo de 4 chicos.

Los ignoro y siguió su camino, trataba de no mirar atrás pero sentía que ellos la estaban siguiendo. Aceleró el paso, en un momento alguno de ellos la sujeto y la metió a un callejón vacío.

Wanda trataba de safarse de su agarre, quería gritar pero no podía. Uno de ellos empezó a sacarle el abrigo.

Quería golpearlo y escapar pero la estaban agarrando muy fuerte. Mientras que otro chico que estaba cerca, iba dolido pues había descubierto a su novia acostándose con quién creía que era su amigo.

Estaba caminando hasta que cerca del callejón escucho risas de chicos y alguien que trataba de gritar.

Sin pensarlo dos veces entro al callejón, encontró a 4 hombres intentando abusar de una chica.

Con su cigarrillo quemo al primero y empezó a golpear a los demás. Los hombres se fueron hacia el dejando a la castaña a un lado.

Dos estaban en el suelo mientras que los otros golpeaban al rubio. Wanda vio una botella de vidrio cerca y estrelló la botella con la cabeza de los dos.

Los 4 hombres se fueron corriendo del callejón, Steve exhausto se quedó en el suelo. Wanda se acercó al rubio para ver cómo estaba.

- Dios, será que esos tipos le rompieron las costillas - empezó a inspeccionarlo.

- No se preocupe, solo estoy un poco adolorido nada más - trato de calmarla.

- Le agradezco lo que hizo, gracias por defenderme - ayudo a qué se levantará.

- Detesto ver como algunos idiotas intentan aprovecharse - dijo molesto y tratando de regular su respiración.

- Soy Wanda - dijo tratando de romper el silencio.

- Steve - dijo el rubio - No es bueno que usted salga a altas horas de la noche.

- Si, lo tendré en cuenta - antes de irse, Steve la detuvo.

- Déjeme acompañarla, la noche es muy peligrosa - la castaña estaba sorprendida.

- Es un desconocido, quien sabe que pueda hacerme - comento con miedo en su voz.

- No trataré de hacerle daño se lo prometo solo la seguiré hasta tal parte y luego me iré - llegaron cerca del departamento de Wanda, Steve sin decir nada se alejo de vuelta a su casa.

Al día siguiente Wanda despertó con un dolor de cabeza, al ir al baño bio como tenía algunas heridas, después de todo fue al trabajo.

Ya era como las 7:30 la cafetería empezaba a llenarse, la castaña se sorprendió al ver al mismo hombre que ayer la había defendido.

- Steve - llamo la castaña, el rubio levantó su mirada - No sabía que eras cliente.

- Wanda yo tampoco sabía que trabajabas aqui - después de todo Wanda tomo su orden.

Pasando los meses ambos se volvieron muy amigos, Steve acompañaba a Wanda siempre. No deseaba que volviera a pasarle lo mismo.

- Gracias por traerme - dijo ya fuera del auto y cuando Steve estaba por irse - Steve, creo que es muy tarde para que te vayas.

- Estaré bien, deben de estar esperándote - volvió a detenerlo.

- Por lo menos déjame invitarte algo ¿No crees? - Steve se rindió y entro con Wanda.

- Hija ya llegaste - dijo una voz masculina.

- Abuelo - Steve vio como un señor venía en silla de ruedas - Te presento a un amigo, Steve Rogers.

- Es un gusto señor - el rubio estrecho la mano con el abuelo de Wanda.

- Tu debes ser el que defendió a mi nieta de esos desgraciados ¿Cierto? - pregunto a lo que Steve asintió - Gracias muchacho.

- No debe agradecer, no tolero las injusticias - pasaron una noche llena de chistes, Steve y Wanda salieron de la casa - Wanda yo quería decirte que tengo un trabajo para ti.

- ¿Que tipo de trabajo? - pregunto.

- Yo trabajo en una empresa, necesito una secretaria y pienso que tú serías la ideal para eso - dijo.

- Steve yo… - no sabía que decir - No lo sé, no creo que sea buena idea.

- Me preocupo por ti, podrás ganar más y así ayudarás a tu mamá y a tu abuelo.

- Déjame pensarlo - pidió - Mañana te lo diré.

Después de todo Wanda acepto el trabajo, al principio no era muy bien aceptada pero con el tiempo varios empleados comenzaron a respetarla. Su vida estaba yendo mejor que nunca, su trabajo perfecto y su familia con un buen capital, pero sobre todo un gran amigo que la ayudo desde el principio.

No sería sorpresa que ambos empezarán a verse diferente, más de una amistad y llegar a algo más. Ambos empezaron a salir y largo tiempo después, Steve y Wanda decidieron dar el siguiente paso.

Ahora podrían vivir tranquilamente, ambos felices juntos y enamorados.