Capítulo 36: "Liz"

869 72 7
                                    

¡Tranquilas, falta para el final!

Coloque la campera sobre mi cuerpo y minutos salí, siendo seguido por Harry. Comenzaba a hacer frío en Londres y no era algo precisamente placentero, salvo porque tenía a Harry encima mío todas las noches, temblando. Bueno, quizá el que temblaba era yo.

Luego de cerrar el departamento, y de subir al ascensor, presione el botón de “planta baja”

-¿En serio te teñirás de azul? – Harry levantó las cejas, mirándome incrédulo. Le devolví la sonrisa y en seguida le contesté.

-Mike dice que se va con los lavados.

-Todas las tinturas se van con los lavados, Niall.  –Hizo una mueca. – Pero, ¿cuál es el sentido de pintarse el pelo de ese color? 

-¿Cuál es el sentido de tatuarse, Harry? Ninguno. Si lo ves desde ese punto de vista, nada tiene sentido. Es algo que quiero hacer y ya, mi cuerpo, mi pelo, todo mío.  – Crucé mis brazos.- Ashton apoya a Mike, ¿por qué tú no me apoyas a mí?

-¿Dices que debería ser como Ashton?- Me miró mal.-  Aparte, no lo apoya, simplemente no dice nada. No me emociona despertar todos los días al lado de un chico con cabello azul.

-¿Insinúas que seré desagradable?  -Abrí la puerta del ascensor cuando llegamos y baje.- Si no te gusta, no me mires entonces.

-No se trata de no mirarte, Niall, se trata de…

-¡Yo no digo nada de tus tatuajes! ¡Nunca protesto cuando quieres agregar uno más a la colección! –Grité. -¡Es más, siempre te acompañe a hacértelos! Si tú no quieres venir conmigo ahora, vete y ya. –Introduje la llave en la cerradura de la puerta principal, la gire dos veces y en seguida la puerta se abrió.

-¡Yo nunca dije eso! – Espetó.- ¡Dios, me vas a volver loco!


-¡Sería genial! ¿Sabes? Así  terminaras en rehabilitación y no tendré que verte nunca más, ni a ti ni a tus tatuajes.

-Los tatuajes son parte de mí, chico inteligente.

-¡No naciste con esas mierdas!

-¡Y tú tampoco con el pelo azul! – Mantuve mi vista en él mientras caminaba, pero algo me hizo tropezar. Me voltee, molesto, pero solo vi a Harry agachado frente a una caja de cartón.

El chico siguió mirando ese perfecto rectángulo. Lo miraba asombrado, sin poder creer lo que había dentro. Me levanté de la nieve que había en la calle y, luego de limpiarla de mi trasero, camine hacia él.

-¿Qué? – Lo miré, esperando siquiera alguna respuesta. Pero nada. Movió sus manos hacia la caja y la abrió. Lo primero que pude ver fueron varias mantas, ¿por qué alguien dejaría una caja con mantas dentro? –Déjalo, Harry. Deben ser para alguien.

Ni se inmutó de lo que le dije, y siguió sacando mantas, hasta revelar a un pobre e indefenso bebé que dormía.

-Wow. – Balbucee.- H-Harry.

-No podemos dejarlo aquí, Niall.- Me miró desde abajo. Bufe, pensando qué hacer.

-Harry, no podemos tener un bebé ahora. –Mordí mi labio inferior.

-Sí podemos.- Contestó de inmediato. – P-Piénsalo, Niall. Tenemos dinero para mantener a más de dos familias completas, tenemos una casa y pronto tendremos otra cuando nos casemos. Tenemos la edad suficiente como para tener un bebé y…

-Hazz.- Me arrodillé frente a él, observando como acunaba al bebé en su pecho.- Amor, entiende. Tener un bebé no significa nada más sostenerlo en los brazos. Significa mucho más.

Heart |NARRY|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora