Capítulo 42: "Abrázame."

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Feliz cumpleaños Layli<3

Me senté en el piso, quedando al lado de Liz, quién estaba jugando con unos cubitos que Greg y Denisse habían traido como regalo.  De un momento al otro, aquellos juguetes pasaron de estar en el piso, a estar encima mío. Mire divertido a la pequeña, esperando alguna sonrisa pero nada, estaba seria.

-Liz.- Alargue la "i".- ¡Me estás llenando de cubos! - Chillé. Ella se volteo a verme, confundida.- ¿Es porque Harry no está aquí? Lo lamento, pequeña, pero también soy tu padre, solo te informo.

Soltó una pequeña risita y segundos después, la tenía encima mío, abrazandome. Reí apenas y rodee su cuerpecito con mis brazos.

El timbre interrumpió nuevamente otro momento tierno y, protestando internamente y maldiciendo a Harry por olvidarse sus llaves, levanté a Liz y la llevé conmigo a la puerta. 

-¡Ya va, Harry! - Grité.- Mierda, ¿por qué eres tan imbécil como para no llevarte las llaves? 

-No soy Harry.- Presté atención a aquella voz femenina y tan rápido como pude, abrí la puerta. Gran error, Niall, gran error.-  Hola, Niall.

-¿Qué haces aquí? - Masculle, sin más rodeos.- Creí que te había decepcionado lo suficiente como para que no me quisieras ver más. 

-Vine a disculparme contigo, con Harry y con Liz por no haberla visitado antes.- Mi mirada bajo por todo su cuerpo, analizando si tenía algún arma para matar a mi novio. Al no ver nada, me eché hacia un lado, dejandola pasar.- Gracias, bebé.

-Tengo veintiún años, pero lo que sea.

|Narra Harry|

Salí apresurado de aquella tienda y rápidamente me metí al auto. Me metí por un montón de calles, contemplando cada una de ellas, hasta que di con la mía.  

Estacioné el automovil en el garage y luego me metí en el ascensor del edificio. Marqué el piso y luego me apoyé contra uno de los vidrios, mientras observaba, como podía, a través de un agujero de la bolsa. Estaba seguro de que a Liz le iba a encantar y probablemente a Niall no.

Introduje la llave en el cerrojo de la puerta de mi departamento y luego de darle vueltas, empujé. Me tire nuevamente hacia atrás en cuanto reconocí a la mujer que estaba en frente de mi novio, sentada sobre uno de los sillones. 

Niall se volteo y me miró esperando ayuda. Tan solo parpadee demasiadas veces, tratando de aclarar mi vista y que todo fuera una simple ilusión.

Observé como el rubio se paraba y se aproximaba a mí. Deje la gran bolsa a un lado y ni bien estuvo a mi lado, lo abrace.

-Vino para disculparse y creo que esta vez va en serio.- Murmuró en mi oído. Asentí lentamente y me separe de él. 

Llevando a Niall de la mano, nos acomodamos en los cojines. Mi vista iba de la mano de mi suegra en el brazo de Liz, hasta su cara. La pequeña, cuando notó mi presencia en la sala, extendió sus manitos hacia mí. Me pare y luego de tomarla, me volví a sentar.

-Bueno.- Comenzó a hablar.- Sé que esto, luego de todo lo que paso, suena demasiado hipocrita de mi parte...-

-Sí. - Respondió el rubio. Lo codee despacio, marcandole que debía comportarse si no quería que la mujer enfureciera de nuevo.- Lo siento.

- Sí.- Repitió ella.- Pero anoche Bobby me hizo darme cuenta de mi gran error. Y sé que esto tardara bastante tiempo, porque mis criticas no fueron 'leves', sino que fueron graves. Lo siento mucho, Harry, por todas las veces que dije cosas malas sobre ti y sobre tus tatuajes. Niall, realmente siento mucho haberte dejado sin tu madre por mucho tiempo, cuando probablemente necesitabas más que nunca mi apoyo.

El chico no respondió. Solo se puso de pie, caminó hacia su madre, le dio un leve abrazo y luego se marchó, dejandome solo frente al peligro.

|Narra Zayn|

Mi brazo rodeaba los hombros de la rubia, quién descansaba tranquilamente sobre mi pecho. Mi vista iba solamente a Liam...Estaba sosteniendo a la bebé, tratando que durmiera un rato.

-Vamos, cariño.-Le murmuró. Sonreí.- Mamá está descansado. Tú también deberías dormir. 

Observe como una pequeña manito salía entre tantas mantas y se posaba en la nariz del chico. Ambos sonreímos al mirar tal gesto.

-Creo que tiene ganas de molestarte, Li.- Le dije despacio, procurando no despertar a Perrie. Liam sonrió y dos minutos después, dejó a Dalila sobre su pequeña cama. 

-Quizá tiene hamb...- Un pequeño lloriqueo lo interrumpió. El chico se giró y volvió a tomar a la bebe entre sus brazos. - Retiro el "quizá". Tiene hambre. 

Moví con cuidado el brazo de la chica, esperando que se despertara. Solo soltó algo inentendible  y se dio la vuelta.  Nuevamente la moví, ahora con más fuerza.

-Perrie.- Susurré.- Vamos, despierta.

-No quiero.

|Narra Harry|

Reí al recordar la reacción del rubio en cuanto le mostré ambos disfraces. Al instante había negado ponerse el que traje para él, pero luego de insistirle una hora, agregando que se lo compensaría, aceptó. 

Ahora estaba detrás de la puerta, rogando que saliera del baño. Habíamos dejado a Liz jugando en su cuna, mientras que nosotros nos cambiábamos.  

La manija se movió hacia abajo, y ni bien vi a mi novio, estallé en carcajadas. Él solo me dedico una mirada asesina y se movió, como pudo, hasta quedar en frente mío. 

-Después invertiremos trajes.- Se cruzó de brazos.- No entiendo por qué eres tan malo, Harry.

-Oh, pero si eres una hermosa princesa con un hermoso traje.- Me pare y tomé su cintura con ambas manos.- Estás adorable, Niall.

-No puedo caminar sin pisar el puto vestido, Harry.- Chilló. Minutos después me acordé que le faltaba algo a él: La corona. Metí mi mano en la bolsa blanca y la saque. - Oh no, no me pondré eso. Suficiente con esto.

-Oh, pero yo me pondré la mía.- Coloqué una de las coronas sobre mi cabeza y vi como una pequeña sonrisa salía de sus labios.-  ¿Vamos? - Le ofrecí mi brazo.

-No quiero.- Hizo un gesto raro con la nariz, como si fuera un conejito.- Liz se acordara de esto y luego se lo dira a todo el mundo.

-No tiene ni un año, Niall.- Reí.- ¿Cómo pretendes que se acuerde? 

-Bueno, uno nunca sabe. 

-Camina o te cargare como la princesa que eres.- Gruñí, pero al parecer aquello no lo intimido. Dando por hecho que era mi última opción, me agache y tomé al chico. 

-¡No, Harold! ¡Me estás humillando frente a nuestra hija! - Trató de esconderse detrás mío cuando lo baje al piso de la habitación rosada. - Por favor, Haz.- Apoyó sus manos sobre mi pecho y me miró suplicando.- ¿No podías haber traído un traje de un ogro o algo así?

-La ibas a asustar si traía uno de ogro.-  Rodee su cintura y asomé la cabeza por encima de la suya para ver a Liz. Estaba dormida.- Oh te has salvado porque está durmiendo.

Sonrió a más no poder y dirigió sus manos hacia su espalda. Oí el cierre del traje bajarse y pronto tenía a Niall solo en boxers en frente mío. Sin darme cuenta de cuándo, el rubio había tomado el disfraz y se había ido de la habitación.

Susurré un "mierda" y después de salir del cuarto, comence a buscarlo como loco. Al no verlo ni en la sala, ni en la cocina, entré a nuestro cuarto.

El chico estaba tirado sobre nuestra cama, apenas roncando. Lo mire con ternura y también tire mi traje por alguna parte del cuarto. 

-¿Haz?- 

-¿Sí? -Me tire a la cama y me tapé con las mantas.

-Abrázame.- Gimió, medio dormido. 

Heart |NARRY|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora