Bajé al comedor para encontrarme allí con Caroline. Nos sentamos a comer las dos solas en la misma triste mesa de siempre.
-¿A dónde fuiste después de clase?- me preguntó mientras masticaba.
-Al baño, no me encontraba bien - mentí para no meterla en mas líos.
Justin me observaba desde su mesa. Estaba con su pandilla de amigos y su hermana con otras chicas barbie como ella.
-Sé que Justin es interesante, pero créeme, es un falso - me advirtió Caroline.
-Lo sé, y no me parece interesante, es un idiota - le contesté llevándome el tenedor a la boca.
- Te atrae - dijo tras un silencio.
-¿Quién? - pregunté incrédula .
-Quien va a ser, el idiota - sonrió.
-Claro que no, le odio, es insoportable - le mentí.
- Ya, lo que tu digas - ella seguía sonriendo y se levantó de la mesa para retirar su bandeja.
Yo hice lo mismo y fui detrás de ella.
Me topé con Justin en el camino, y sentí cómo su mano agarraba la mía pasándome un trozo de papel disimuladamente.
Me acerqué al carrito donde se depositaban las bandejas vacías y allí desdoblé el papel.
"¿Quieres repuestas? Busca en los libros. JB "
Le miré a distancia desconcertada y me guiñó un ojo.
-¿Qué haremos toda la tarde libre? - me preguntó Caroline agarrando mi brazo mientras salíamos del comedor.
-¿Te apetece ir a la biblioteca? - supliqué para que dijera que sí en mi mente.
-Buena idea, necesito libros para el trabajo de química - sonrió ampliamente.
-¡Genial! - exclamé contenta.
Al entrar en la biblioteca la señora Fitch me saludó amable, desde aquel día que se cayeron los libros parecía más simpática.
-He visto cosas raras, pero ella saludando es demasiado rarito - comentó Caroline.
-Sí...a mi también me sorprende - confesé.
-Voy a buscar los libros, ahora vengo - me dijo Caroline y yo asentí.
Me senté escogiendo una mesa que estuviera alejada de donde se solía poner la gente. Caroline tardaba demasiado, y miré a lo lejos por si lograba verla. Me levanté impaciente para buscarla y me adentré en los pasillos.
-Caroline, eres una tardona - me asomé al pasillo de química pero no estaba.
-Otra vez no...- murmuré pensando en el susto que me había llevado días antes.
Recorrí más deprisa los pasillos pero no había nadie. Escuché un libro caerse cerca de donde yo estaba y fui a mirar al pasillo de detrás.
Eran los libros antiguos, uno de ellos estaba en el suelo. Me agaché para cogerlo y lo observé. Parecía de cultura clásica, pero tenía algo diferente. Al levantarme me encontré con Justin justo enfrente mía. Ahogué un grito.
-Lo has encontrado por mí - sonrió Justin.
-Pues ahora lo tengo yo - me giré para irme pero él se puso de nuevo delante mía impidiéndone el paso.
-Llevo buscando ese libro mucho tiempo y nunca antes se había dejado ver - insistió.
-Los libros no tienen vida propia - me burlé y él sonrió irónico como si lo que yo había dicho tuviese alguna lógica.
-Muy bien, tu lo has encontrado así que lo leeras tú por mí - me guiñó un ojo y se fue.
-Agggg...- gruñí. No soportaba los aires de superioridad de Justin. Esa actitud suya tan...aggg
-¿Qué haces ahí? ¡En este lado hay más polvo que libros! - Caroline interrumpió mi lucha interior.
Las dos volvimos a la mesa y ella se puso a leer los libros de química en busca de información. Yo hice lo mismo con aquel libro tan curioso.