𝑴𝒐𝒏𝒔𝒕𝒆𝒓𝒔, 𝑰𝒏𝒄. (𝑺𝒖𝒍𝒍𝒊𝒗𝒂𝒏 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂)

Capitulo 30.

T/n voló mientras Sulley bajaba la colina en el trineo. Pasaron al Abominable hombre de las nieves camino hacia abajo.

—¡Oye, hay más helado! —él dijo.

Continuaron hasta que Sulley chocó contra una roca, haciéndolo caer y casi perder el conocimiento en la nieve. T/n aterrizó junto a él cuando la linterna se apagó.

—¿Sulley? Sulley, despierta —llamó.

Fue entonces cuando escucho gritos
Eso despertó a Sulley. Vieron luces encendidas en las casas

—¡La villa! —sonrieron, se levantaron y corrieron hacia la casa más cercana.

Mientras tanto, Charlie y Chelsea estaban tratando de convencer a George de que asustara a alguien a través de la puerta que eligieron

—Tú puedes, George. Hay que tener confianza. Esta puerta es de las fáciles: en Nepal. El tranquilo Nepal —
Charlie persuadió.

—Sí, tienes esto —agregó Chelsea.

—Saben, estoy listo. Sostén esto —respondió George, dándole su muleta.

—¡Georgie, duro con ellos! —Charlie y
Chelsea vitorearon.

Justo cuando abrió la puerta, Sulley y T/m lo golpearon mientras corrían en el piso de sustos.

—¡Cuidado! ¡Que tengo prisa! —
Sulley gritó mientras corrían hacia la salida.

—Lo siento, George —dijo T/n.

—Oye, eso no se hace... — dijo Charlie, jadeó cuando vio un calcetín en George y exclamó: —¡33-1...!

George agarró a Charlie por el cuello, le metió el calcetín en la boca, lo arrojó por la puerta y cerró.

—¿Estás seguro de que fue una buena idea? —preguntó Chelsea.

—Bueno, es eso o ser abordado por agentes de la CDA —George se encogió de hombros.

—Buen punto —acordó Chelsea.

Sulley y T/n siguieron corriendo por la fábrica para encontrar a Boo.

—¡Fuera del camino! —gritaron a los monstruos mientras corrían.

—¡Oye! —uno objetó.

—¡Hey! —exclamó otro.

En la guarida de Randall y N/e, ataron a Boo a la silla mientras ella gemía de miedo. Entonces entró Waternoose.

—¡Por fin! No debí confiarles esto. ¡Por ustedes, expulse a los mejores asustadores! —él dijo.

—Con esta máquina, no necesita asustadores —comentó N/e.

—Además, T/a y Sullivan se lo merecían — agregó Randall.

—Sullivan y T/a hacían lo que ustedes nunca podrán —espetó Waternoose, haciendo que los dos monstruos gruñeran en respuesta.

Sulley y T/n finalmente llegaron a la puerta secreta y la arrancaron como si nada. Fungus puso en marcha la máquina mientras Randall y N/e simplemente sonrieron mientras Boo luchaba por salir de las ataduras.

—¡Gatito! —ella llamó.

La máquina seguía acercándose.

—¡Pajarito! —llamó de nuevo.

Aún no vino nadie. La máquina estaba casi en su cara, haciéndola gritar, hasta que Sulley y T/n entraron con rugidos. Sulley obligó a la máquina a alejarse de Boo mientras T/n la sacaba de la silla.

—¡Gatito! ¡Pajarito! —Boo exclamó felizmente en los brazos de T/n.

—¿Sullivan? ¿T/a? —Waternoose cuestionó.

Sulley siguió empujando la maquina hasta que se rompió y la arrojó hacia los cuatro monstruos, atrapando solo a Waternoose.

—¡Gatito! ¡Pajarito! —Boo vitoreó de nuevo.

—Perdónanos, Boo —se disculpó T/n mientras la abrazaba más fuerte.

N/e y Randall gruñeron cuando él se volvió invisible y ella corrió a una parte diferente de la guarida.

—Hay que huir —respondió Sulley.

Corrieron hacia la salida, Sulley cogió su tarjeta. Luego, mientras corrían, una fuerza invisible golpeó a Sulley mientras N/e corrió hacia T/n, derribándola. Se levantaron, listos para defender a Boo.

—Acaba con ellos —ordenó Waternoose.

T/n y Sulley siguieron recibiendo golpes hasta que quedaron aturdidos y cayeron al suelo.

—Hace tanto que quería hacer esto, Sullivan —comentó Randall mientras se volvía visible.

—Lo mismo contigo, T/n —sonrió N/e.

T/n y Sulley intentaron golpearlos, pero salieron del camino con risas malvadas. Mientras seguían avanzando poco a poco hacia la salida, fueron golpeados y pateados hasta que Boo pudo esconderse. Cuando se levantaron, una bola de nieve golpeó la cara de Sulley. Miraron a quién lo tiró y no podían creer a quién veían.

—¡¿Mike?! —exclamaron.

—Oye, no es que no me importe la niña —comenzó Mike.

—Mike, no entiendes —le dijo Sulley mientras intentaban buscar a N/e y Randall.

—Claro que sí. Estaba molesto. Necesitaba pensar. Pero no debieron irse así —continuó Mike.

T/n y Sulley continuaron recibiendo golpes cuando Sulley fue inmovilizado y T/n se estaba levantando del suelo.

—¡Nos atacan! —gritó T/n.

—No me digas que te ataco. Simplemente soy honesto. Escuchen. Somos un equipo. Solo importa nuestra amistad —Mike siguió adelante mientras seguían siendo golpeados, Boo trató de explicar, pero Mike respondió—.  Ya sé, nena.
Son demasiado sensibles

Entonces Randall, aún invisible, comenzó a asfixiar a Sulley, haciendo que sintiera arcadas. T/n trató de ayudar, pero N/e retuvo su garganta contra los barrotes, lo que la hizo sentir náuseas.

—No, por favor. Si lloran, voy a llorar, no me gusta. Pero aun así te falle, pero ya no —finalizó Mike.

—¡Ay! —exclamó Boo.

Mike estaba empezando a enojarse un poco.

—Sulley, T/n, pongan atención —
Mike comentó.

Lanzó la bola de nieve, pero en lugar de golpear la cara de Sulley, golpeó la de Randall. Esto le permitió a Sulley saber dónde estaba Randall y lo golpeó, dejándolo inconsciente. T/n agarró la mano de N/e, se la arrancó de la garganta, tiró de ella a través de los barrotes y le dio una patada en el estómago, haciéndola caer hacia atrás y toser en busca de aire.

—He querido hacer eso desde la universidad —gruñó T/n.

—Que chistoso, son Randall y N/e! Es... —Mike comenzó y luego se dio cuenta—. Oh.

—¡Vamos! —instó Sulley, agarrando a Mike mientras T/n agarraba a Boo.

—¡Levántate! No quiero testigos —
Dijo Waternoose.

—No los habrá —gruñó Randall.

—Entendido —espetó N/e.