Flavio y Bruno: ¡BUENOS DÍAS EVA! ¡BUENOS DÍAAAAAAS, DESPIERTA, ES SÁBADOOOOOO! - Dijeron los chicos gritando.
Eva: ¿Vosotros siempre os despertáis con esta energía? Porque igual me planteo mudarme de nuevo. - Dije con tono de broma, intentando abrir mis ojos. - ¿Qué hora es?
Bruno: Son las 10, pero vamos, vístete que tenemos muchas cosas planeadas para tu bienvenida.
Ni veinticuatro horas llevaba en Madrid y ya quería cargarme a mis compañeros de piso por despertarse con tanta efusividad. Suerte que eran majos...
Bajamos al bar a desayunar y empezaron a contarme esos planes que tenían.
Eva: Entonces Bruno, ¿a tu novia no le importa que me una?
Bruno: Claro que no, en verdad ha sido idea suya invitarte.
Flavio: Maialen es un amor de persona, ya la conocerás.
Bruno: Bueno, pues ahora vamos a comprar alcohol, porque después de cenar empezaremos el copeo en su casa y después ya nos iremos a una discoteca cerca de ahí.
Eva: ¡Ay que bien!, tengo ganas de conocer a tu novia y a los demás. Si son amigos vuestros seguro que serán buena gente.
Tenía muchas ganas de que llegase la noche. Por lo visto, los sábados, Flavio, Bruno y sus amigos solían quedar después de cenar para tomar algo y salir de fiesta. Podrían haberme excluido del plan, algo que sería normal ya que me acababan de conocer, pero no fue así, sino todo lo contrario. Maialen, la novia de Bruno me invitó al copeo de su casa para integrarme en el grupo. Por lo visto, ayer llegaron sus nuevos compis de piso, y habían organizado esto para celebrarlo.
Cuando llegamos a casa de Maialen, se escuchaba la música desde fuera. Nos abrió la puerta una chica rubia, muy mona, que al parecer Flavio y Bruno aún no conocían.
X: Hola, Soy Samantha, pero podéis llamarme Sam. Soy la nueva compi de piso de Mai. - Dijo la rubia
Bruno: Hola Sam, yo soy Bruno, y estos son mis compis de piso, Flavio y Eva.
Flavio: Hola soy Flavio, un placer. - Dijo con una sonrisa.
Eva: Soy Eva, encantada. - Me quedé un poco pensativa ya que esta chica me sonaba de algo pero no me acordaba de qué.
Sam: ¿Eva, entras? - Me tuvo que decir Sam ya que me había quedado parada en la puerta.
Una vez dentro, Bruno me presentó a Maialen, que nos estaba esperando en la puerta del comedor. Me pareció una chica súper dulce y agradable, tal como Flavio me había advertido.
Había dos personas en la casa. Nia, una morena increíble, y su novio Jesús. Todos eran muy agradables y me acogieron super bien.
Estábamos haciendo juegos y cantando, cuando vimos a alguien bajar por las escaleras.
Sam: Hugo, ¿no vas a saludar?
Hugo: Sam, no es un buen momento para hacerme de madre. - Contestó con un tono muy borde- No estoy de humor. Salió dando un portazo.
Sam: Amor de hermanos... de verdad, desde que lo dejó con su ex novia está insoportable.
Mai: Bueno Sam, dale tiempo. Además os acabáis de mudar, no conoce a nadie, solo a tí que eres su hermana y a mí que soy su compi de piso.
Flavio: Qué pena, podría haberse quedado aquí jugando con nosotros.
Sam: No te preocupes... él es así, suele huir cuando está rallado.
Eva: Pero... ¿qué pasó? - Dije sin parecer muy interesada, aunque lo estaba, porque la verdad es que ese chico era guapísimo y tenía unos ojos verdes que se te clavaban para siempre.
Sam: Buf, su ex es muy tóxica... prefiero no hablar del tema ahora.
Nia: ¡Vamos a seguir con la fiesta y a emborracharnos!
Jesús: Sí, dale. Que sino no llegamos nunca a la discoteca.
Seguimos bebiendo y jugando un rato más, hasta que pedimos los taxis que nos llevaban hasta la discoteca.
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Siempre nos quedará Madrid
Fiksi RemajaDos caminos que se cruzan en una estación de tren de Madrid. Eva y Hugo se mudan a Madrid para estudiar. Desde su primer encuentro y un seguido de coincidencias de la vida, sus vidas les llevan a conocerse más a fondo. Eva conoce al Hugo despreocupa...