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Esteph.

El cumpleaños de Eva se acerca y como a ella no le gustan los festejos en grande, le haré una fiesta sorpresa, porque sé cómo es, y si le digo se va a negar a todo. Así que llamo a Dimitri.

- ¿Aló? - suena extrañado.

- Hola, aquí Esteph. - saludo.

- Esteph... ¿Sucede algo?

- Si, es sobre Eva.

- ¿Qué pasó? ¿Ella está bien? - suena preocupado.

- Bueno se acerca su cumpleaños y estoy planeando su fiesta. - explico y lo oigo bufar. - Como sabrás se acerca Halloween también así que estoy organizando una fiesta de disfraces, ¿Podrás venir?

- Supongo que sí.

- Bien, necesito que me digas cuál será tu disfraz, ya sabes para que no se repitan.

- No me disfrazare.

- Como sea, ah y el cumpleaños de Eva es el 1 de octubre, le gustan las gardenias. - cuelgo.

Arreglé todo para el gran día, Leah nos dejó el bar a un precio bajo, le comenté a Eva sobre una fiesta de disfraces en el bar, más sin mencionar que era para ella. Ahora son las 7 de la mañana y estoy decorando un pastel que le hornero a Eva, no son muy buena cocinando, pero considero que quedó bien, tuve que levantarme mucho más temprano que ella pues tiene que ir a trabajar a las 8.

- ¿Qué haces tú despierta temprano? - su voz me hace saltar del susto.

- ¡Felices 23! - agitó mis manos en el aire y ella ríe aún somnolienta.

- Gracias. - la abrazo. - Me encanta el pastel. - lo sé. Ambas tomamos unos tenedores y comemos pastel. - Te quedó bien, estoy sorprendida.

- Gracias, gracias. - rio.

Eva.

Después de un largo día de trabajo, llegó al piso encontrándome a un hombre con un ramo de hermosas gardenias frente a la puerta.

- Para Eva Carmont.

- Soy yo. - abro la puerta y lo hago pasar. - puede dejarlas en la mesa. - me hace firmar de recibido y se va dejándome sola, tomo la tarjeta dorada que viene entre las flores.

Felicidades, ángel.

Sonrío, ni hace falta que diga de quién es, porque lo sé perfectamente, lo que no sé es cómo sabe que amo las gardenias y que además es mi cumpleaños.

- WOW. - entra Esteph con los disfraces en mano, ruedo los ojos divertida. - Es gigante.

- Hazte la sorprendida. - ella hace una cara de inocencia.

- No me metas... - niega. - Aquí está el disfraz, vamos.

Ambas ya listas y arregladas, ella decidió vestirse de Selena Quintanilla y yo de ángel, la verdad es que, si es por Dimitri y porque no tenía idea de que vestirme, era eso o de algún artista a la par de Esteph. Nos dirigimos al solitario bar, la miro extraño. - ¿Estás segura que era hoy? - pregunto y ella asiente, me toma de la mano y me hace entrar.

- ¡SORPRESA! - salto del susto poniendo una mano en mi pecho, las luces se encienden junto con la música, hay amigos del trabajo y del máster, pero quién llama la atención es Dimitri, mirándome divertido. Antes de llegar a su lado y saludo a algunos amigos.

- Eres el ángel más hermoso que ha pisado esta tierra. - sonríe tomándome de la cintura.

- Gracias por las flores. - susurro antes de besar sus labios suavemente.

PHOENIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora