|Capitulo 70|

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Momo tenía el apetito más grande de lo común, comía y comía todos los platos que habían en la mesa, rellenaba su vaso cada momento. Después de comer más de la mitad de toda la comida se detuvo mirándome con una mirada apenada, solo pegue una carcajada ante acto tan tierno y adorable.

Opte por darle de comer, no quiso seguir comiendo después de olvidar que era para ambos, no tenía apetito y prefiero que Momo comiera hasta llenarse, era adorable como en un principio se negaba a comer, hasta que poco a poco empezó a aceptar la comida, en verdad amo a esta chica.

Lave los platos y cubiertos de la comida, ella solo estaba recostada en el sofá abrazando uno de los cojines, viendo cómo sus ojos se cerraban poco a poco para quedar dormida. Me acerque a ella y la cargue, ella abrazo mi cuello hasta que entre a mi cuarto para acostarla en la cama.

- Acuéstate conmigo - me jalo del brazo en ese momento -

- Necesito cambiarme, no puedo acostarme así - bese su frente - esperarme unos segundos

- No tardes - abrazo una de las almohadas acurrucándose aún más -

Entre al vestidor y me quite la ropa para ponerme un pants gris completo, me sentía más aliviado con momo ya en la ciudad y más conmigo aquí, no me parecía que continuara sobre explotando su cuerpo con sus rutinas pero quien soy yo para decirle, hago exactamente lo mismo.

Cuando salí estaba extendía de extremo a extremo de la cama, boca bajo, la situación es un poco comprometedora, esos jeans negros justos solo le dan mucha más volumen a su trasero, yo solo suspire para no dejar a mi mente volar.

Apenas había recibido los dos boletos para el evento que será este fin de semana, las calles están llenas de carteleras y las pantallas ponen a ambos peleadores, vendieron la pelea demasiado bien, en el estadio más grande de Seúl y agotando entradas digitales no solo en corea, en china, Japón y parte de Estados Unidos donde son conocidos.

Deje el sobre con las entradas en la mesa de la sala y me recosté en unos de los sofás, permanecí acostado y dormido al menos una hora, el reloj apenas marcaban las cuatro de la tarde, me levante y fui a la coja para preparar algo para comer antes de encender la pantalla y buscar una serie o película para entretenerme el resto de la tarde noche.

[...]

El tiempo pasó casi siendo las siete de la noche y la bella durmiente decidió despertar, salió del cuarto con una sonrisa y aún con su rostro un poco adormilado. Se acercó a mi dándome un besa en los labios y se sentó a mi lado abrazándome, tardó varios segundo en despertar del todo hasta que dejo de cabecear y tallo sus ojos.

- Ya te sientes mejor? - le pregunte -

- Siento que me levante peor que antes - se talló el rostro -

- Tuviste que haber dormido más, apenas descansaste de toda tu gira - se recostó en mi hombro -

- Tampoco quiero dormir, quiero distraerme - miro el sobre negro y lo tomó con curiosidad - y esto?

- Son unos boletos - espere a que los sacara y los viera - Es para el...

- La pelea de los dos reyes!? - miro sorprendida Momo - Como las conseguiste!?

- No fue difícil, y la pelea será este domingo - La mire de reojo - porque la sorpresa?

- Las entradas volaron apenas se pusieron a la venta, Jihyo apenas logró comprar la transmisión - miraba muy detenidamente los boletos dorados - y son enfrente del octágono, del área principal...

- Un boleto es para mi, y quiero que me acompañes - Momo quedo en silencio unos segundos -

- Lo dices enserio? - tapó su rostro con los dos boletos - Pero...

- Significaría abrir al mundo nuestra relación - suspire y exhale - no quiero obligarte a acompañarme, pero me encantaría que fueras conmigo

- Amaría acompañarte enserio sería un sueño - me abrazo - Pero no es algo que pueda decidir a la ligera

- No te apures aún tenemos 5 días para decidir - le di un largo beso - No te apures

Saldría a comprar algunos ingredientes ya que momo quería preparar algo para cenar, llamaría a las demás chicas para que vinieran, ella se quedaría en el apartamento y yo haría el viaje al supermercado a comprar las cosas. No está muy lejos de donde vivo por lo que fui a pie, necesito estirar las piernas un poco.

[...]

Durante mi trayecto de regreso del centro comercial pase por la empresa de JYP, no era muy normal ver mucha seguridad, logre distinguir a Han quien es el jefe de seguridad de toda la empresa, el Igual me reconoció de lejos y me hizo una seña que le acercara, solo asentí y me acerque.

Ambos nos saludamos y quedamos hablando por algunos minutos, durante la palatina le pregunte que pasaba, ya que no es normal ver a la seguridad de la empresa rondando más de lo normal.

- No se si lo sepas pero hay un tipo dando problemas - me enseñó su celular el rostro de una persona - el imbecil comienza a hacerse viral en la ciudad, la gente lo apodo "el acosador de Nayeon".

- De Nayeon? Im Nayeon? - pregunte intrigado y volví a ver la foto - Su nombre es Johs??

- Solo sabemos su nombre - dijo molesto - mediante videos intenta dar con el paradero de la chica, buscando lugares donde haya estado e intentando ingresar a la empresa dejando regalos, los cuales son rechazados

- E visto a este tipo antes - recordé su rostro - si, es el

- Lo dices enserio!? - se sorprendió - donde!?

- Fue hace mucho, logró distinguirme cuando trabajaba aun para la empresa, tenía un regalo para ella, intentó dármelo para entregárselo pero lo rechacé - Justo cuando Tania estaba aquí, incluso tuvo un mal presentimiento de él - Quien diría que me toparía con un acosador

- Eso no es todo - su rostro se puso más serio de lo normal - en algún momento tuvo contacto con las chicas, intentó acercarse con fuerza a Nayeon pero la seguridad lo bajo a golpes y patadas del avión, alguien le vendió información de su avión, como obtuvo, los asientos, vuelo, hora de su viajes de regreso?

- Hablas enserio? - Lo mire con molestia - maldita sea..

- Se que te reúnes con ellas - se miro más tranquilo - al parecer retomarás tu trabajo

- A que te refieres? - sabia a lo que se refería -

- Se el tipo de chico que eres - acomodó su saco - tendrás que cuidar de Nayeon d ese tipo, se que lograrás dar con el, lamentablemente la ley no nos permite meterle una paliza para que entienda, tienes restricción de distancia, órdenes puestas por la empresa y denuncias pero nada no lo detiene, a menos que seas tú, te desafío a que no podrías hacer nada

- No tienes que decir nada más amigo mío - sonreí de oreja a oreja - Entiendo cada cosa de lo que dices y ya estoy al tanto de cada detalle

- Puedo confiar esto en ti? - me pregunto con una sonrisa -

- Esa gente no tiene derechos para mi, sentirá todo el peso de meterse con esa chica - me puse la boina que traía puesta - me gustó hablar contigo una ves más

Ambos nos despedimos y el regreso más aliviado a su trabajo, sentí esa corriente de calor por mi cuerpo, esa emoción de ser el indicado para esto, conozco a los acosadores como el, y solo rompiéndose los huesos y dientes entendería. Retome mi camino de regreso a mi apartamento.

- Johs... - sonreí de oreja a oreja - mi trabajo es salvaguardar el bienestar de mis clientes... te mentiste con el guardaespaldas equivocado

Yo Soy Tu Guardaespaldas |Momo y tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora