Yo Soy Tu Guardaespaldas |Momo y tu|

|Capitulo 69|

Un par de días pasaron y continué trabajando con los demás en el futuro evento, desde la plática de aquella noche me quede con esa espina de invitar o no a momo, por mi cabeza solo paso ese riesgo cuando vi cara a cara a Isai, se que me vigilan y no solo a mi, los demás empezaron a sentirse acosados por personas, incluso Catherine tuvo contacto con otro de los alumnos de Hashima.

Existe una posibilidad que asechen a las chicas, es muy mínima pero aún así existe y puede ser la mala suerte que ese diminutivo acierte. Salí de mi transe por mi teléfono que empezó a sonar.

Respondí la llamada y era Momo, apenas habían regresado a Seúl y su transporte las dejaría en su respectiva empresa para terminar unos detalles de un programa de televisión y poder descansar. Me avisaría cuando terminara su junta para poder ir a recogerlas.

Deje de hacer mis actividades para despejarme y aclarar mi mente, recostándome en mi cama mirando al techo, me esforcé por mi pensar en nada pero apenas te sales de un tema y tú mente entra en otro. Recordar que no tuve una vida normal, una pobre alma desafortunada que cayó en las garras del bajo mundo.

Nos convertimos en la generación de coronas más jóvenes por la atrocidad de Hashima, por lo general son nombradas a partir de los 25 años, no a los 20, por seguridad Amon quien era el instructor y entrenador de las futuras coronas retomó su cargo como corona por seguridad si Hashima regresaba. Incluso Indra hizo lo mismo, el no tuvo compasión con nadie, es por eso que es un enemigo común de ambos.

Hashima fue considerada la mejor corona de todos los tiempos, incluso superando a Amon, pero su deseo de convertir su estilo en uno perfecto falló, así que se centró en crearlo, usándonos como conejillos de experimentos, su ambición lo segó por completo, Imperial al enterarse de las muertes que causó, le quitaron ambos títulos, no le importó, logró su cometido, pero dejaría claro si poder, asesinando a sus compañeros a sangre fría, con el único fin de inculcarles a sus dos únicos discípulos lo fuertes que podrían ser, los monstruos en los que se convertirían, aquellos jóvenes que continuarían el camino hacia la perfección, derramando sangre a cada paso y llevando cada parte de ellos, física y mental mucho más haya del extremo límite.

Ambos cargamos el peso de detenerlo, matarlo, cargando las injustas muertes de aquellas coronas, el peso de mostrarnos ante el mundo como una figura invencible, la creación perfecta del hombre que tuvo al bajo mundo en sus manos. Desperté de aquel profundo y caótico transe, toque mis mejillas las cuales estaban húmedas, al parecer un par de lágrimas cayeron sin darme cuenta estando despierto, mi celular comenzó a sonar, es Momo quien ya estaba a nada de terminar su junta.

Me di un golpe en la mandíbula para despertar en mis cinco sentidos, baje hasta el estacionamiento hasta subir a mi vehículo y me dirigí a la empresa la cual no está muy lejos de donde vivo, no me tomaría más que diez minutos en llegar.

Al llegar me estaciones y espere del otro lado de la calle para no llamar la atención, poco después vi a todas salir poco a poco de las instalaciones de la empresa, algunas de ellas volteaban y sonreían, y en momentos cruzaban la calle para saludarme y retirarse. Lo más seguro es que quieran descansar después de una jornada pesada de trabajo.

En ese momento Momo salió cargando un par de bolsas y fue interrumpida por una persona, una persona que últimamente me a dejado con un muy mal sabor de boca, por lo general me da igual la gente pero está persona me a estado molestado.

- Soy yo o ese imbecil intenta estar siempre cerca de mi novia - me dije a mi mismo -

- Diría que es la segunda opción - una voz me sobresalto - te asuste?

- Jihyo.. qué haces aquí - le dije después de sentir mis latidos regulares -

- Perdón pero olvide comprar unos dulces - señaló la tienda de atrás - Pero el porque de tu molestia?

- Nada del otro mundo - volteó a ver a cómo y a ese tipo -

- Te molesta Heechul? - ladeó la cabeza -

- No siquiera lo conozco y no me agrada - apreté los dientes - debería ir por Momo ahora y decirle que se aleje ni piense en ella para no romperle las piernas...

- Eeehh lo de romperle las piernas no creo que sea necesario - rio nerviosamente - Pero tampoco me arriesgaría a sacarla de ahí, podrías meterla en problemas

- Conoces a ese tipo - seguí mirándolos -

- Es un conductor de programas, por lo general invitan a grupos a sus actividades, de ahí en fuera no tenemos ningún lazo con el - quedo pensando unos segundos - solo que...

- Solo que? - me acerque más a ella -

- Aa-Ah b-bueno - cruzó sus manos - Es cierto eso, intenta llamarla incluso parece que la sigue últimamente  son muchas las casualidades de verse en cualquier lugar

- Gracias por la información - trone mi cuello -

- Solo prométeme que no le harás nada que ponga en riesgo su vida - casi me suplico -

- Desde cuando te importa ese tipo - ladeó una ceja -

- No se trata de eso, pero en el mundo normal no puedes ir por la vida golpeando a la gente que no te agrada, solo lo evitas y ya -

- Haré el intento - acomode mis lentes - si me disculpas

Me despedí de Jihyo quien por fin pudo entrar a comprar sus golosinas, llegue al punto de desesperarme al ver que ese idiota seguía ahí parado, note en Momo su rostro de impaciencia.

Me acerque a ellos y tome a Momo de la muñeca jalándola hacia mi, el rostro de Momo fue de sorpresa, y el de Heechul fue de desconcierto, y un toque de molestia.

- Si me disculpa, la señorita Momo aún tiene cosas pendiente por hacer y no tiene tiempo como para perderlo hablando con usted - mire a Heechul - con su permiso

- Quien eres tú - levantó el tono - estaba hablando con ella..

- Solo soy su guardaespaldas - le sonreí - con su permiso

Comencé a caminar junto con Momo tomándola de la mano, obteniendo algunas miradas de personas que circulaban en esa calle, hasta llegar a la camioneta, subiendo en el asiento de el copiloto.

- Gracias... - recargó y cubrió su rostro con su mano -

- Te ves cansada - comencé a conducir - sigues practicando de más cierto?

- Solo un poco - sonrió - Pero ya estoy contigo

- Llegaremos a casa, comerás algo y dormirás un rato - tome su mano - Es importante que descanses

- Te amo - me dio un beso y se recostó en el asiento -