Yo Soy Tu Guardaespaldas |Momo y tu|

|Capitulo 86|

Sentí una energía negativa por todo mi cuerpo, no quería ir a casa, por lo que seguí de largo la casa y me dirigí hasta la ciudad.

Me estacione enfrente de un bar,suspire y entre al lugar necesito tranquilizarme un poco, para mi suerte estaba vacío, me senté hasta la esquina de la barra y el bar-tender se hacerco para atenderme.

- Whisky seco - el hombre asintió y comenzó a servir el trago -

- Aquí tiene - dejó el baso enfrente de mi mientras que en la otra mano tenía la botella -

- Deja la botella - asintió y la puso al lado del vaso - Gracias...

Había olvidado por completo el infierno que viví y que cause en ese experimento, sentía pulsaciones en mi cabeza, como si hubieran intentado borrarlos o esconderlos en lo más profundo de mis pensamientos, aún los recuerdos son vagos, desde las voces en mi cabeza y fragmentos de cosas que sucedieron en ese tiempo.

Continué bebiendo hasta dejar de sentir el fuerte sabor del whisky, me siento de mal humor, de muy mal humor, ahora tengo muchas preguntas sin respuestas en mi cabeza, desde el comportamiento de Edward y la actitud de Selene de no entender qué reclamaba, las pocas respuestas de la presentadora, el porque es de vida o muerte asesinar de una vez por todas a Hashima y a su organización.

Entre tantas personas que pudieron sufrir esa tortira yo fui uno de esos contados desafortunados.

- Estás sentado en mi silla - una persona apretó con fuerza mi hombro - quítate ahora

- Toda la barra está vacía - volví a beber de mi vaso - lárgate y siéntate en otra silla

- Te crees muy listo? - voltee y había un grupo de al menos 10 tipos - Te dije que te largues

- Eres idiota? - me voltee sin levantarme de la silla - siéntate en otra silla tú y los imbeciles con los que vienes

El grupo de idiotas comenzaron a murmurar y a burlarse, mi sangre comenzaba a hervir, lo que menos tenía ahora era paciencia y una actitud tranquila. Volví a acomodarme y continué bebiendo.

Sentí una navaja en mi hombro, solo respire profundamente y me levante, tenía la sensación que si explotaba no iba a poder detenerme, no lo mire solo para evitar romperle el vaso en el rostro.

Tome la botella y el vaso e intente caminar hasta la otra orilla de la barra, mi respiración estaba muy agitada y mis puños demasiado tensos.

- Espera - el hombre evitó que tomara la botella - Tu pagaste eso?

- No me molestes - intente soñar tranquilo -

- Enserio creíste que te podrías ir después de faltarme al respeto - se acercó a mi - Deja la botella y lárgate de aquí

- Compra la tuya - la jale quitándosela - y déjame en paz

- Eres un cabron sin modales? - otro de ellos se paró frente a mi - no sabes quienes somos?

- Míralo, es un extranjero - el tipo de antes colocó ese cuchillo en mi garganta - un maldito que perdió el camino a casa

- Disculpen caballeros por favor váyanse o llamaré a la policía - el barrendero intento calmar las cosas -

- Tu cállate imbecil o te cortare la lengua después de matar a este imbecil - me quitó la botella y me empujó - ahora lárgate

- Regrésame eso pandillero de mierda - mis puños estaban más que listos -

Todas esas personas comenzaron a rodearme en donde estaba, la típica pandilla de idiotas que salían a las calles a molestar a la gente para quitarles su dinero, como una bola de perros que atacaban a la vez al más débil hasta matarlo.

- Está bien quédatela - tome el vaso del principio que aún tenía alcohol y lo bebí - disfrútalo...

Lo golpeé con el vaso con toda la fuerza explosiva que pude soltar, se reventó en su rostro causándole contadoras y uno que otro pedazo de chistar incrustados en el, todos quedaron en shock por lo ocurrido, un vaso lo suficientemente resistente para un romperse al caer de la barra fue destruido al impactar en el rostro de ese tipo.

El hombre gritaba mientras se retorcía en el suelo, algunos de sus amigos los intentaban levantar mientras que otros me impedían el paso, tome la botella que había saldo ilesa y le bebí directamente hasta acabármela. Sentí un ardor recorrer mi garganta hasta mi estómago, un dolor placentero.

El más grande de todos ellos se paró enfrente de mi junto a otro sacando lo que podría ser un cuchillo de combate, poco después otro tipo se le unió colocándose atrás de mi.

- Eres hombre muerto imbecil! -

De un ataque frontal intento apuñarme esquive el ataque asiendo que avanzará, lo golpee con fuerza con la botella en la cabeza rompiéndola, el tipo de atrás intento reaccionar demasiado tarde, me abalancé hacia él enterrándole la otra mitad en el estómago, comencé a forzajear con él hasta que termine por enterrarla aún más haciéndolo caer al suelo, ambos solo de desangraban del golpe.

El resto de los tipos comenzaron a lanzarme golpes, los que tenían armas intentaban lastimarme con ellas, bloqueaba y esquivaba los intentos de golpes de ellos, solo eran golpes al aire y sin ningún punto específico.

- No te cansas? - tome a uno de los hombros y solté un fuerte rodillazo en el estómago y encogerse remate con uno en el rostro, escuche algo romperse, podía ser la mandíbula o el cuello -

Así con continué con cada uno de ellos, los pocos que quedaban comenzaron a lanzarme las sillas y mesas del lugar, intentando apuñalarme. Por intentar esquivar una silla termine resbalándome con el cuerpo de uno de ellos cayendo al suelo.

Los restante comenzaron a patearme y golpearme con las barras de madera de las mesas y sillas rotas, el tipo del principio se levantó aun quejándose, la sangre comenzaba a escurrir de su rostro.

- Te vamos a matar imbecil! - dijo el tipo del rostro roto, quien parecía ser el jefe - me destruiste un ojo, yo te voy a quitar ambos!!

La adrenalina comenzó a correr por mis venas, sentía una sonrisa en mi rostro, comencé a reírme al intento de asesinato de estos tipos.

"Diviértete"

- Comencemos a jugar niños - solté una carcajada -

A mi lado había una navaja la cual tome con rapidez y enterré en la pierna de uno de los tres restantes, haciendo que cayera al piso, al siguiente con un corte en el cuello con la misma cuchilla, y el tercero solo fue pateado hasta que cayó.

Al que apuñale en la pierna me senté en su estómago, me miraba con termo mientras solo lo miraba con una sonrisa, cuando intento decir una palabra comencé a golpearlo en el rostro y el pecho con la mayor fuerza y velocidad que saqué, la sangre comenzó a embarrarse en el suelo y en mis puños.

Me levante y camine hasta el último de ellos, comenzó a arrastrarse en el suelo hasta topar pared, me incline para verlo de cerca y después comencé a patearlo, la primera patada lo noqueó el resto solo fue por diversión.

- Llama a la policia - me sentí mucho más relajado - di que fue en defensa, tienen cuchillos y toda esa mierda

- D-destruyeron el lugar - dijo cabizbajo el hombre -

- Toma - avente un fajo de billetes en frente del hombre - arregla este lugar y saca toda esta basura

- E-Entendido -

Salí del lugar y camine hasta el estacionamiento. Me sentía relajado y desestresado. Estoy seguro que lo volvería a hacer.